En Portada,.
'En Portada' retrata cómo Ecuador ha logrado uno de los índices de violencia y delincuencia más bajos de América Latina,.
El jueves -6- Junio a las 23.30 en La 2, foto,.
‘En Portada’
viaja a Ecuador para mostrar un éxito poco conocido que tuvo lugar en
los barrios más duros de este país: la transformación de las pandillas
callejeras (Latin King, Ñetas, Masters y otras) en agrupaciones
juveniles urbanas, con la consiguiente reducción de violencia y
delincuencia.
La clave ha sido, no la represión policial, sino la vía política, la negociación entre las autoridades y los distintos grupos para que, mediante programas de formación y culturales, los jóvenes mantuviesen su identidad grupal pero se desvincularan de la violencia.
El programa, puesto en marcha hace más de 10 años, tuvo precedentes en Barcelona, Nueva York y Chicago. En todos los casos, ha probado su eficacia. En estos momentos, Ecuador tiene uno de los índices de violencia y delincuencia más bajos de América Latina.
‘Amor de ley’ es un reportaje para todos los públicos con guion de Yolanda Sobero; realización de Mariano Rodrigo; imagen y sonido de Alejandro Coves y Antonio Garrido; montaje de Txomin Várez; sonorización de Isabel García Leal; producción de Andrés García de la Calera y Lourdes Calvo; producción ejecutiva de Domingo Isaba; subdirección de Susana Jiménez; y dirección de José A. Guardiola.
La clave ha sido, no la represión policial, sino la vía política, la negociación entre las autoridades y los distintos grupos para que, mediante programas de formación y culturales, los jóvenes mantuviesen su identidad grupal pero se desvincularan de la violencia.
El programa, puesto en marcha hace más de 10 años, tuvo precedentes en Barcelona, Nueva York y Chicago. En todos los casos, ha probado su eficacia. En estos momentos, Ecuador tiene uno de los índices de violencia y delincuencia más bajos de América Latina.
‘Amor de ley’ es un reportaje para todos los públicos con guion de Yolanda Sobero; realización de Mariano Rodrigo; imagen y sonido de Alejandro Coves y Antonio Garrido; montaje de Txomin Várez; sonorización de Isabel García Leal; producción de Andrés García de la Calera y Lourdes Calvo; producción ejecutiva de Domingo Isaba; subdirección de Susana Jiménez; y dirección de José A. Guardiola.
TITULO: Más Vale Tarde La Sexta -No tengo tiempo 'pa na',.
No tengo tiempo 'pa na',.
Es la frase de moda, se escucha en cualquier sitio y resume nuestro estúpido modo de vida,.
En la acera, las dos con sus carritos de la compra, hablando sin parar. Paso a su lado. Voy camino de la charcutería-frutería. También empujo mi carrito. O tiro de él. Es un carrito de la compra de doble tracción. Mañana de sábado en el cacereño barrio de Moctezuma. Bullicio y compras. Alegría en las tiendas y resaca en los bares. Ayer fue feria y mañana también.Sábado de puente en Cáceres. Entre fiesta y fiesta, todo el barrio sale a la calle. Perdura en el ambiente una división antigua de las labores domésticas. Las mujeres mayores de 30 y los hombres mayores de 60 hacen la compra. El resto, en casa descansando o trajinando en la cocina, en la calle haciendo deporte o en las terrazas de los bares, combatiendo la resaca ferial con cafés y con cervezas, con aguas minerales e infusiones de manzanilla con anís.
Comentarios en las terrazas alrededor del bullicio, mayor o menor que otros años, en las casetas del ferial. Debates sobre si la feria de día en el centro acabará en un par de años con la feria de día en el ferial. Anécdotas de ebriedades y pasiones desaforadas contadas entre grandes risas. Indignación por los precios de las raciones de pollo y los espetos de pinchos morunos. La feria se repite, las conversaciones se repiten, la vida en el barrio se repite y ellas dos, con sus carritos bien aparcados, siguen charlando en la acera. Al pasar por su lado, escucho un frase al azar, una frase que es una declaración de estrés, de prisa, de agobio, de ansiedad, del estúpido modo de vida occidental. «No tengo tiempo 'pa na'», le dice una señora a la otra, que replica inmediatamente: «Pues anda que yo».
El «no tener tiempo 'pa na'» como emblema, como máxima, como frase estelar de la contemporaneidad. Si fuéramos caballeros andantes o nobles damas medievales, el escudo de nuestra casa no estaría orlado por nobles palabras de altos propósitos: «Dios y mí, derechos» (Ricardo Corazón de León), «Quien resiste, gana» (Camilo José Cela), sino que se resumiría en la vulgaridad angustiada del: «No tengo tiempo 'pa na'».
Entro en la frutería-charcutería y las conversaciones, tras un repaso a las vicisitudes feriales, parecen un diario de agenda: «Vengo de cuidar a mi madre... Voy a recoger a mi nieta... Dame una lechuga y un par de tomates para una ensalada rápida, que tengo peluquería... ¿No tienes cerezas? ¡Madre mía!, pues voy a tener que recorrer las fruterías del barrio para encontrarlas porque se le han antojado a la niña... Guárdame un queso blanco, que voy a la farmacia y vengo ahora mismito...».
Lleno el carrito de quesos, embutidos, naranjas, kiwis, plátanos y verduras para el sofrito. Vuelvo a casa. ¡Increíble! Allí están las dos colegas. Siguen hablando sin parar, la una le quita la palabra a la otra, parece como si hablaran sin escucharse. Cuentan sus casos y sus cosas aprovechando las pausas de la interlocutora para arrebatarle el turno de intervención e introducir su frase en la conversación. Y al pasar a su lado, fingiendo una parada de descanso, las escucho hacer una larga y pormenorizada relación de tareas pendientes rematadas con la frase estelar dicha a coro, como cerrando la escena guiadas por un buen guionista: «No tenemos tiempo 'pa na'».
La expresión está de moda y se escucha en el café y en los pasos de cebra, en invierno tiritando y en verano sudando. Nos paramos a charlar, nos invitamos a tomar algo, quedamos para contarnos la vida y parece que el resumen de nuestra existencia es ese «no tener tiempo 'pa na'» que nos acogota y condiciona. A veces, parece que más que no tener tiempo, lo que no tenemos es capacidad para hacer las cosas cuando tocan en vez de estar todo el día pensando en las cosas que tenemos que hacer. Es el partido a partido del Cholo Simeone o el no bailar hasta que no suene la música que recomienda Arturo Pérez Reverte en alguna entrevista.
Pero nos empeñamos en pensar en todos los partidos de la temporada a la vez y queremos bailar todos los bailes antes de que arranque la orquesta. El problema no es que no tengamos tiempo 'pa na', el problema es que no hacemos otra cosa que pensar en lo que puede suceder sin que haya sucedido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario