martes, 7 de enero de 2025

España a ras de cielo - Mario Zapata ,. - PLANETA CALLEJA - Domingo - 19 - Enero ,. / Centenarios - Homenaje a Ana María Matute en su centenario ,. / Tramoyista - Yukio Mishima: el suicidio que eclipsó la obra de un escritor,. / Aquí la tierra - Sonidos de España, protagonistas del Cartagena Festival de Música ,.

 

TITULO: España a ras de cielo - Mario Zapata    ,. - PLANETA CALLEJA -Domingo - 19 - Enero ,.

 

España a ras de cielo  ,.

 

España a ras de cielo es un programa de televisión emitido por TVE y se estrenó el 17 de septiembre de 2013. Desde el primer programa, está presentado por Francis Lorenzo Martes a las 22h30,.
 El programa permite conocer lugar de España desconocidos y ya conocidos desde otro punto de vista., etc,.


PLANETA CALLEJA - DOMINGO - 19 - Enero ,.
 

   Planeta Calleja es un programa de televisión de España que se emite cada domingo a las 21:30, en Cuatro de Mediaset España,. Jesús Calleja enfrentará a rostros conocidos a vivir experiencias únicas e irrepetibles fuera de su contexto habitual y en los lugares más remotos y fascinantes ., etc.

 

 Mario Zapata ,.

 

 

 En una recepción

foto / Mario Zapata, el extremeño que susurra a las grandes ONGs,.

A los 17 años se marchó de Los Santos con una beca para estudiar en los Colegios del Mundo Unido ,.

El oriundo de Los Santos y afincado en Nueva York ayuda a las grandes ONGs, fundaciones, e iniciativas públicas o privadas a mejorar su impacto en la sociedad.


Mario Zapata (29 años ) se marchó de Los Santos de Maimona a los 17 años con una beca para estudiar en los Colegios del Mundo Unido y se graduó, summa cum laude y también becado, de la Universidad de Nueva York en políticas públicas. En la última década ha estudiado y trabajado en más de media docena de países, y hoy se desempeña como consultor estratégico de desarrollo económico y social en Nueva York, donde ha trabajado con instituciones como el Foro de Davos, la organización internacional de colaboración público-privada. Ahora que ha pasado las vacaciones en familia con sus padres en Los Santos, lo abordamos.

 

-En N.Y. ¿Qué es lo que realmente hace en su día a día?

Tengo la suerte de trabajar con líderes y organizaciones que buscan aportar soluciones a los grandes desafíos de nuestro tiempo, como el cambio climático, las crecientes desigualdades, y la necesidad de promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible. En un entorno de creciente complejidad, muchas organizaciones, no solo del sector social y público, sino también del mundo de la empresa, necesitan generar nuevas visiones para cumplir mejor con su mandato o propósito social, y sus directivos a menudo buscan perspectivas externas para replantearse sus estrategias y traducir estas ideas a la realidad.

Los desafíos con los que buscan ayuda van desde cómo desarrollar innovaciones comerciales o iniciativas concretas que combatan problemas como las desigualdades educativas y laborales, hasta, en algunos casos, cómo adaptar y modernizar todo su portfolio de productos, servicios, actividades, o inversiones, para no perder relevancia en el contexto actual o credibilidad con el ciudadano. A menudo se olvida que este sector puede ser tan competitivo como muchos otros: las organizaciones más eficaces se esfuerzan mucho por definir estrategias que lleven su impacto social al máximo. Y a veces las herramientas más útiles para elaborar estas estrategias no son tan diferentes de las que usan las grandes empresas: estudios de prospectiva y de mercado, análisis de riesgos y de las necesidades del «usuario», evaluaciones de impacto, etc.

-¿Qué es lo que más le gusta de su profesión?

He disfrutado mucho trabajando con líderes que tienen ganas de innovar, cuestionar las injusticias de nuestro tiempo, y aprovechar los recursos a su disposición para ayudar a reimaginar nuestro sistema y combatir los grandes problemas que este no resuelve. Admiro en particular a aquellos que persisten en esta actitud con convicción, incluso cuando encuentran resistencia dentro o fuera de sus equipos.

- A grandes rasgos ¿Cuáles son las tendencias que observas en este sector?

Destacaría tres cambios particularmente relevantes a nuestro contexto. Primero, a nivel político, se observa una mayor preocupación en el mundo de la filantropía por reforzar las instituciones democráticas, y crecientemente, también el sistema internacional de derechos humanos, que se ha traducido en un mayor flujo de donaciones a estas causas en los últimos años.

El segundo cambio, a nivel económico, es un mayor interés desde las grandes fundaciones en trabajar más de cerca con entidades públicas y privadas para ayudar a corregir problemas sistémicos y fallos de mercado, e incluso a ayudar a rediseñar estos mercados para que funcionen más y mejor para las personas. En este ámbito, uno de los roles más interesantes que adoptan algunas instituciones filantrópicas es el de utilizar su capital para experimentar con nuevos modelos de soluciones y políticas públicas. Apoyándose en su carácter independiente, las fundaciones pueden ayudar a establecer lazos entre diferentes sectores o entidades y a tomar riesgos o testear ideas con las que el sector público o privado a veces no se atrevería a priori, pero que podría apoyar o adoptar si resultan efectivas. Yo he trabajado en proyectos de este tipo con el fin de impulsar el emprendimiento en materia de soluciones climáticas, o la mejora de la gobernanza de las ciudades y el fomento de la innovación.

El tercer cambio, de ámbito social, es el retorno de las soluciones comunitarias y arraigadas en lo local, en respuesta a un paradigma global que a veces infravalora y pone presión sobre las relaciones humanas. Así cobran más relevancia organizaciones como las fundaciones cívicas, que buscan que los ciudadanos unamos fuerzas para ayudar a transformar nuestros pueblos y ciudades. Entre estas, la Fundación Maimona ha sido nombrada como una de las más avanzadas a nivel mundial.

- ¿Porqué ha elegido vivir en NY y desde cuándo permanece allí?

Me siento muy afortunado de haber comenzado mi carrera profesional en Nueva York: Siempre me ha fascinado como centro neurálgico de la toma de grandes decisiones así como del nacimiento de ideas y movimientos culturales de relevancia global. En total, llevo unos seis años en la ciudad, pero con algunas pausas: tras la pandemia, por ejemplo, volví a España por unos meses para ayudar a desarrollar una nueva ONG en Madrid apoyando la recuperación económica y social a través de la colaboración público-privada.

- ¿Cómo es la Gran Manzana para vivir?¿Con qué te quedarías de la ciudad?

Nueva York es un paraíso para los aficionados a la cultura. Disfruto mucho de su oferta de música en vivo, desde conciertos pop, clásicos, y óperas, hasta grupos de salsa en Central Park y bandas de jazz en un bar cualquiera. También tiene una comunidad internacional muy diversa, lo cual se refleja en su oferta culinaria. Al mismo tiempo, la ciudad en sí tiene muchos trazos de nuestra cultura y reúne a muchos españoles: diplomáticos, emprendedores, artistas, etc.

TITULO: Centenarios - Homenaje a Ana María Matute en su centenario ,.


Homenaje a Ana María Matute en su centenario ,.

Premios - La gala del Nadal recuerda a su ganadora de 1959 y nombre fundamental en las letras españolas del último siglo,.

 La escritora Ana María Matute.

foto / La escritora Ana María Matute,.

El fallo del Nadal se dio a conocer en la tradicional velada literaria celebrada este lunes en el hotel Palace de Barcelona con más de trescientos invitados y a la que asistieron el ministro de Cultura, Ernest Utasun, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el alcalde Barcelona, Jaume Collboni, entre otras autoridades. En la gala también se conmemoró el centenario del nacimiento de Ana María Matute (Barcelona 1925-2014), galardonada con el Premio Nadal en 1959 gracias a 'Primera memoria' y nombre fundamental en la historia de Destino y en las letras españolas del último siglo. Su legado fue celebrado por Inés Martín Rodrigo.

El decano de los galardones literarios españoles es un saludable octogenario. Se creó en 1944 en memoria del malogrado periodista y editor Eugenio Nadal, fallecido poco antes. Sus mentores fueron Ignacio Agustí, Josep Vergés y Joan Teixidó, creadores años antes de la editorial Destino que ampara el premio desde entonces y que se integró luego en el poderoso Grupo Planeta.

Dotado con 5.000 pesetas en su edición inaugural se falló en la noche del 6 de enero de 1945. Durante la cena en el Café Suizo, los invitados degustaron un menú a base de crema de alcachofas, lenguado y becada, con peras a la cardinal de postre. Los finalistas eran Carmen Laforet -una perfecta desconocida entonces-, César González Ruano y José María Álvarez Blázquez.

El primer regalo

En la cuarta votación 'Nada', de Laforet, se proclamó vencedora. Los Reyes Magos acababan de entregar su primer regalo a la literatura española. Termómetro fiel de nuestras letras contemporánea para lo bueno y lo malo, a lo largo de estos 81 años ha sumado a su nómina talentos como Miguel Delibes, Ana María Matute, Elena Quiroga, Carmen Martín Gaite, Rafael Sánchez Ferlosio, Álvaro Cunqueiro, Francisco Umbral, Fernando Arrabal, Manuel Vicent, Juan José Millás, Maruja Torres, Clara Sánchez, Felipe Benítez Reyes, Antonio Soler, Rosa Regàs, Álvaro Pombo, Gustavo Martín Garzo, Lorenzo Silva o Fernando Marías.

   TITULO:  Tramoyista - Yukio Mishima: el suicidio que eclipsó la obra de un escritor,.

 Yukio Mishima: el suicidio que eclipsó la obra de un escritor,.

Se conmemoran cien años del nacimiento del autor y Alianza relanza algunas de sus obras,.
 
foto / El novelista japonés Yukio Mishima ,.
He aquí un caso de suicidio elevado a la enésima potencia militar, política, sociológica e histórica. Lo protagonizó Yukio Mishima, en Tokio, el 25 de noviembre de 1970 –había nacido el 14 de enero de 1925–, a quien aún no lo ha devorado su propio personaje, aun siendo su vida entera y las actividades a las que se dedicó más que suficientes para eliminar al artista y quedarse con el individuo extravagante que preparó al dedillo su suicidio y, como dijo Javier Marías en un artículo, protagonizó toda clase de majaderías. Queda su potente obra, novelas, cuentos, ensayos, y muchos otros textos de teatro Kabuki y demás trabajos secundarios que nunca llegarán a Occidente.
Mishima nos dejó, entre muchos textos destacables, «Confesiones de una máscara» (1951), su debut narrativo con el que obtuvo un enorme éxito, y la tetralogía «El mar de la fertilidad», pero también una existencia marcada por la obsesión por la muerte y por restaurar el Japón más rancio, el del culto al emperador.
 
Pero, decíamos, la obra perdura, y las excentricidades del autor ya se han vuelto anecdóticas, aunque algunas anécdotas tengan un trasfondo inquietante y hasta sanguinario: su complejo de tipo bajito que dedicó sus últimos quince años a hacer pesas y a fotografiarse en poses entre religiosas y sensuales, la fundación en 1967 de un grupo de extrema derecha llamado Tatenokai, formado por cien jóvenes a los que adiestraba bajo la idea de servir a la patria frente a una sociedad consumista y decadente, su harakiri –que había perdido popularidad desde la Segunda Guerra Mundial– al fin en el despacho del jefe del Estado mayor del ejército, en protesta contra la desmilitarización de Japón y la pérdida de sus valores tradicionales...

El Mishima adulto, narcisista, que se creía un genio y ansió el premio Nobel, que grabó discos, viajó por todo el mundo, se casó y tuvo hijos para complacer a su madre a pesar de su homosexualidad, el que se libró de ir a la guerra y a la vez anheló una muerte heroica y anónima, es víctima de una trayectoria familiar espeluznante: su tiránica y demente abuela destruyó su infancia con crueldades diversas; el padre, de tendencias nazis, le prohibió escribir, le obligó a cursar Derecho y ni lamentó su suicidio. A Kimitake Hiraoka (su verdadero nombre) ese desapacible entorno le hace ser un adolescente inestable, un hombre que se salva por la disciplina del trabajo y la creatividad de su talento.

Honrar la cultura nipona

El lector tiene una prueba de ello gracias a la novela de 1954 «El color prohibido», disponible en español, como tantas de sus obras, en la editorial Alianza; una obra aquella que contaba la historia de un triángulo amoroso infructuoso –un escritor sexagenario y dos jóvenes, un hermoso chico gay y una muchacha– ambientado en el Tokio de la posguerra. Qué clase de dolor, de rabia, de impotencia, recorrería a Mishima para, luego de visitar a su editor para darle la última parte de su tetralogía, ser capaz de entrar en el cuartel de la Fuerza de Autodefensa, con cuatro hombres del comando de extrema derecha que había fundado y, con la excusa de visitar a un general para enseñarle una valiosa espada, maniatar a éste y reducir a los guardias. Entonces, sale al balcón para proclamar sus arengas a un público que hasta se mofa de él, y luego, se deja el torso desnudo, se asienta sobre los talones y, tras gritar tres veces «larga vida al emperador», se clava una daga.
Tal cosa la tenía ensayado como actor en la película «El rito del amor y de la muerte», y a continuación se dejó decapitar al fin por un compañero, Furu Koga, que necesitó tres tentativas para lograr el propósito de cortarle la cabeza a él y al que fue probablemente el amante del autor, Masakatsu Morita. Clavarse una daga o una espada en el estómago representaba para Mishima «la masturbación definitiva», una explosión de vida y muerte. Sin duda, una suprema contradicción al hilo de lo que dejó escrito en una nota hallada en su escritorio póstumamente: «La vida humana es breve, pero yo quisiera vivir siempre». Lo explica Juan Antonio Vallejo-Nájera en «Mishima o el placer de morir» (Planeta, 1995), en que habló de la importancia de tal muerte ceremonial y de tan elevada dignidad.
Toda esta trayectoria está reflejada en «Yukio Mishima. Vida y muerte del último samurái» (La Esfera de los Libros, 2020), en que Isidro-Juan Palacios intentó desvelar ese «misterio envuelto en arte» de «cómo un hombre, en la cima de la celebridad y la gloria, pudo morir así como lo hizo». Este autor nos llevaba al Japón premoderno de la infancia de Mishima y al que se occidentalizó tras la Segunda Guerra Mundial, a lo largo de unos años que dieron pie a una ingente cantidad de libros pese a la muerte temprana del autor, a los cuarenta y cinco años, dejando «entre novelas, ensayos, cuentos, piezas teatrales, guiones cinematográficos... doscientas cuarenta y cuatro obras». 
Palacios, además, entre otras curiosidades, remarcaba que Mishima conocía a la perfección varios estilos de su lengua, así como el japonés medieval, que fue un perfecto calígrafo, un maestro de kendo, piloto de reactores, atleta y orador consumado; y evocaba a otra cumbre de la literatura japonesa, Yasunari Kawabata, Premio Nobel en 1968, que dijo de él: «un genio como Mishima solo aparece en la humanidad cada trescientos o cuatrocientos años».

Dos decapitaciones

​En su libro «Mishima o la visión del vacío» (Seix Barral, 1997), Marguerite Yourcenar recreó cómo pudo ser la escena final de Mishima: «Y ahora, reservada para el final, la última imagen y la más traumatizante tan impresionante que ha sido reproducida muy pocas veces. Dos cabezas sobre la alfombra, probablemente acrílica, del despacho del general, colocadas la una junto a la otra, casi tocándose, como dos bolos. Dos cabezas, dos bolas inertes, dos cerebros en que ya no irriga la sangre, dos ordenadores detenidos en su tarea, que ya no seleccionan, que ya no descifran el perpetuo flujo de imágenes, de impresiones, de incitaciones y de respuestas que pasan cada día por millones a través de un ser, para formar todas juntas lo que se llama la vida del espíritu, e incluso la de los sentidos, y que motivan y dirigen los movimientos del resto del cuerpo».

 

TITULO : Aquí la tierra - Sonidos de España, protagonistas del Cartagena Festival de Música ,.


Sonidos de España, protagonistas del Cartagena Festival de Música,.

La OSCyL protagoniza el concierto inaugural del certamen colombiano,.

Actuación de la OSCyL
 
foto / Actuación de la OSCy,.

La Orquesta Sinfónica de Castilla y León (OSCyL) interpretó este sábado 4 de enero el concierto inaugural del XIX Cartagena Festival de Música, que se ha denominado un viaje en Iberia al final del siglo XIX, que en esta oportunidad hizo énfasis en las músicas de España.

El pianista español Javier Perianes bajo la dirección del suizo Thierry Fisher, presentó obras de los compositores más importantes de España de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, entre los que se destacaron: Isaac Albéniz, Manuel de Falla, Enrique Granados y Joaquín Turina.

Este recorrido por la música española incluyó al francés Georges Bizet (1838-1875) que en la Suite no. 1 de 'Carmen', que evoca algunas características de la cultura tradicional española.

Los asistentes al teatro Adolfo Mejía de Cartagena disfrutaron de la interpretación de: Castilla de la Suite española, Noches en los jardines de España, Intermedio de Goyescas de Granados y La oración del torero.

"Esta edición está enfocada sobre la música de España y Portugal de finales del siglo XIX y principios del XX", dijo el director general del Cartagena Festival de Música, el músico italiano Antonio Miscenà.

Miscenà destacó la participación de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, que tiene 35 años de constituida, por lo que aseguró que, además de tener a un director muy destacado "interpreta magistralmente el repertorio que se escogió para el festival de este 2025".

El director también elogió la participación del pianista Perianes de quien dijo "es uno de los mejores que he visto y que hay en este momento en España".

'El canto del mar', el tema central

En este 2025 el festival escogió como tema central 'El canto del mar', por lo que los participantes hacen referencia a este tópico y a los compositores que con su obra ha contribuido a dar identidad a la música de la península ibérica.

"En el nacionalismo musical español pueden distinguirse dos fases, una primera de asimilación con Isaac Albéniz y Enrique Granados como principales representantes y una segunda con Manuel de Falla y Joaquín Turina en la que se alcanzó una madurez musical que se desarrolló ya en la primera mitad del siglo XX", explicó, Miscenà.

Entre los artistas que se destacan está la cantante flamenca española Marina Heredia quien canta desde los 13 años y ha colaborado con artistas flamencos como Arcángel o Eva Yerbabuena y ha participado en óperas como De Amore, del compositor Mauricio Sotelo.

También la violinista Ana María Valderrama, quien ganó el primer premio y el premio especial del público en el XI concurso Internacional de Violín Pablo Sarasate 2011 (España), la primera española en conseguir este galardón.

El festival cerrará los telones el próximo 12 de enero con un concierto al aire libre en la plaza de la Aduana de Cartagena con la participación de la Orquesta Sinfónica de Cartagena.

También estarán Paola Ávila, Ana María Valderrama (violín), Paola Leguizamón (mezzosoprano), Laura Gómez (soprano); los tenores Antonio Gandía y Hans Ever Mogollón, Roberto Abbondanza (bajo) y Juan David Gonzáles (barítono).

 

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