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DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -JUEVES - VIERNES - Pedro Ruiz, fotos,.
Pedro Ruiz,.
Pedro Ruiz: "Mi secreto de salud, tener más planes que años"
Vuelve a RTVE, dos décadas después, con «Nada del otro mundo», un espacio dirigido y escrito por él, que se emitirá en La 1
«Aunque a veces no se me haya entendido, nunca he querido ser trinchera sino puente». A Pedro Ruiz (Barcelona, 1947) da gusto oírle. Por suerte para los que le queremos bien, RTVE le recupera para su casa y para su causa –dos décadas después– para conducir «Nada del otro mundo», un especial dirigido y escrito por él, con colaboraciones de las actrices Antonia García San Juan y Luisa Martin o la influencer Dulceida, que se emitirá próximamente en la noche de La 1.
Pregunta: Adelanta que en su regreso a TVE no habrá nada hiriente para compensar «la bruticia de otros». ¿Quiere señalar o se retratan solos?
(Desayuno)
Respuesta: Siempre diré que la televisión está para arreglar o solucionar problemas y no para dividir.
(Cena )
P: Será un programa único. El humor de Pedro Ruiz es como el perfume, ¿intenso y en formato pequeño?
R: El lujo de este nuevo programa es que son tres comedias, una de ellas se ha grabado con mucho esfuerzo en el Metropolitano. He pretendido que la gente sonría y que pase un rato agradable. No me considero presentador, ni periodista. Solo soy un artista que conversa.
P: Excluir a los políticos de su espacio. ¿Es una moción a la totalidad del gremio?
R: Es una apuesta por la cordialidad de la gente de a pie, que somos los que movemos la sociedad. Los políticos ya están muy presentes.
P: De todos los dirigentes que ha conocido, ¿alguno merece su amnistía?
R: Como personas, todos, y como profesionales, ya no les juzgo. Hace mucho tiempo que no consumo política. Lo que hago es trabajar con la emoción, la diversión y la poesía.
P: Se define romántico, agnóstico, aprendiz de todo y celoso de su vida privada. ¿Algo más?
R: Intento ser empático con la gente que necesita cosas, estoy en un punto tan sencillo que ya no quiero tener razón. Quiero tener derecho a no tener razón.
P: Con 76 vueltas al sol de una vida muy vivida. ¿A qué dedica el tiempo libre cuando no hace tele, ni teatro, ni guiones?
R: Permanentemente a aprender. Voy al cine, al teatro, a conferencias, a celebraciones donde no se me imagina, no voy a fiestas para fotos, me tiro a la piscina, escribo poesía, hago deporte...Estoy empezando. Mientras no me llamen para marcharme de aquí estoy con cientos de planes. Mi secreto de salud es tener más planes que años, es el mayor patrimonio que tengo y no voy al médico hace cuarenta años. No hay gente mayor ni joven, solo hay gente rendida o no rendida. Lo único que tenemos es la salud y el hombre más rico pagaría por la mía. Me he cuidado mucho, pero sin obsesiones. No fumo, no me drogo y no me gusta nada que me pueda enganchar, ni siquiera una serie. Las cosas materiales me importan poco y, aunque no lo parezca, paso mucho de mí.
P: Aventuró que el fin de «Sálvame» hundiría a Telecinco. ¿Cómo puede reflotarse Mediaset?
R: Que hagan lo que les parezca, pero sí pienso que cuando uno quiere cambiar la flor de su jardín lo primero es la raíz.
P: ¿Le gusta la tele que se hace ahora o no hay nada del otro mundo?
R: Hay más tele que se hace por negocio que por vocación artística.
P: ¿Ser valiente le ha salido caro?
R: No es caro cuando el tubo de respirar lo tienes sin nicotina. Nunca he perpetrado nada malo y eso me lo premia la salud. Ahora nos gusta tener razón, cuando somos un pasaje mínimo de la historia del planeta. Deberíamos recuperar la cordialidad que hemos perdido, siendo más humildes y dando al otro su lugar.
P: Le han preguntado por Pablo Motos y ha dicho que nunca le ha invitado a su programa...
R: Hacen muy bien su trabajo y, si me llaman, ya veré si voy.
P: Ha desvelado también que vivió en un hotel durante dos años. Eso es vida de rico. ¿Lo fue? ¿Lo es?
R: En aquel momento no tenía casa en Madrid, me hicieron un precio y ahora voy todos los días. Quedo con amigos, actores, productores, músicos... Allí escribo un poema en el mostrador, con un camarero que me pone un título y le redacto unos versos en cuatro minutos.
P: ¿Qué consejo daría «al hijo que no tengo», como tituló uno de sus libros?
R: Le diría «cuídate, sé sencillo, no te metas en guerras y no te olvides que no eres lo que tienes sino que tienes lo que eres».
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EL PAPEL HIGIENICO ROJO - EL D.N.I. - Teresa Ribera redujo el dinero destinado a obras de la Confederación del Júcar respecto a la era Rajoy ,.
EL PAPEL HIGIENICO ROJO - EL D.N.I. - Teresa Ribera redujo el dinero destinado a obras de la Confederación del Júcar respecto a la era Rajoy ,fotos,.
Teresa Ribera redujo el dinero destinado a obras de la Confederación del Júcar respecto a la era Rajoy,.
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El dinero destinado a obras e infraestructuras en la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, en los últimos cinco años de Gobierno de Pedro Sánchez no solo no se ha elevado, sino que incluso,.
TITULO : Donde comen dos - Sardinas Cuca - Brigadeiros ,.
Donde comen dos - Sardinas Cuca - Brigadeiros , fotos,.
Brigadeiros,.
Desde el norte hasta el sur de Brasil, este postre es un símbolo que une al país a través de su sabor y tradición,.
La Brigaderie, la pastelería de dulces portugueses que acaba de abrir en Malasaña,.
Joana Perdigão y Alejandro Martínez han convertido en negocio su afición por los 'brigadeiros', unas golosas trufas de origen brasileño. Empezaron online y ahora los despachan en su tienda de la Plaza del Dos de Mayo
Malasaña, una joven pareja de emprendedores, unos dulces portugueses llamados 'brigadeiros' y un pequeño local que materializa la evolución de un formato 'e-commerce' a tienda física. Bienvenidos a La Brigaderie, un proyecto fruto de una idea gestada mano a mano entre Alejandro Martínez y Joana Perdigão. Se conocieron en Portugal, donde coincidieron trabajando en la misma empresa.
Él había estudiado Ciencias Gastronómicas y Artes Culinarias en Basque Culinary Center, en San Sebastián, completando su currículum con trabajos como chef, profesor de cocina o consultor. Ella, graduada en Bioquímica en la Universidad de Coimbra, se especializó en cosmética, área donde sigue trabajando como consultora 'freelance'. Cuando vivían en Lisboa, la pareja, de 29 años, solía ir a comer 'brigadeiros', unas trufas de origen brasileño. "A Joana le encantan", cuenta Alejandro Martínez.
Así que, cuando, pasado un tiempo, se mudaron a Madrid "por cuestiones laborales, nos dimos cuenta de que no encontrábamos ningún sitio donde comprarlos o comerlos". Por eso, decidió comenzar a hacer la receta en casa para Joana, "como un pequeño acto de amor; ese es justo nuestro eslogan". Y, de paso, "llevarlos a reuniones de familiares y amigos".
¿Podría funcionar este dulce, poco conocido entre el público español, en el mercado madrileño? "Vimos la oportunidad porque no había ninguna empresa en España especializada en 'brigadeiros'; con el 'feedback' de nuestros seres queridos y conocidos, decidimos lanzarnos a la aventura", cuentan.
Del 'delivery' al local físico
El proyecto nació como 'delivery' vía venta online para evolucionar a local físico con venta al público. "Comenzamos como un 'e-commerce' por una simple cuestión de capacidad de inversión y porque realizamos estudios de mercado que nos indicaban que el sector 'e-commerce' en pastelería y dulces estaba al alza", argumenta Alejandro Martínez, cocinero que habla en clave de empresario. "Queríamos tener un producto mínimo viable -el conocido como MVP- y probar el mercado sin correr un riesgo enorme. Los dos creíamos y creemos que es un paso necesario previo a realizar una inversión más fuerte como puede ser abrir una tienda física, donde se incrementan los costes fijos", añade.
Con este ensayo online, dice que tuvieron claro que los 'briguis', como llaman a su producto estrella, tienen demanda con un cliente satisfecho. "Ocho de cada diez clientes que hemos tenido en 'e-commerce' han repetido su compra". Tras barajar abrir 'almacenes fantasma' -estilo 'dark kitchen'- en Madrid, optaron por la tienda física, porque pensamos que era "una potente acción de márketing".
Sin empleados, la pareja abrió hace unos días La Brigaderie, una minúscula tienda -sin espacio para sentarse a tomar algo-, bajo un "concepto 100% 'take away' y 'delivery', en el barrio de Malasaña, que eligieron "por su diversidad cultural y por las tipologías de público. Malasaña es el barrio ideal de Madrid para definir nuestro público objetivo. Nos recuerda mucho a Camden Town, en Londres, con una diversidad de modelos de negocio increíble, aparte de su ubicación en la zona centro de Madrid, por lo que el 'delivery' también es una buena opción para darnos a conocer".
¿Cómo pueden llevar un negocio que implica producir los 'brigadeiros' solo entre dos personas? Con las recetas originales de Alejandro Martínez, externalizan la producción a través de una alianza con Viena Capellanes, empresa centenaria que se encarga de la producción. "Ellos han decidido apostar por el proyecto, han invertido su tiempo, han puesto su experiencia en el desarrollo y han involucrado de lleno a su excelente equipo, con Francisco Somoza y Carlos Simarro a la cabeza, para mejorar los productos junto a nosotros, creando 'briguis' con interiores más ligeros y coberturas más crujientes. Sin su ayuda, nada de esto hubiera sido posible", señalan 'a dúo' Alejandro Martínez y Joana Perdigão.
La 'carta' de La Brigaderie
¿Pastelería? Estos emprendedores se resisten a referirse así a su negocio, aunque esta tienda lo es, con la especialización en dulces portugueses. Por otro lado, "nuestro producto principal y nuestra especialidad son los 'brigadeiros', que nosotros llamamos 'briguis'". Nos cuentan lo que son: "Unas trufas dulces hechas a base de leche condensada, nata y mantequilla". Con la misma base, "su carácter lácteo implica mucha versatilidad para distintos sabores y aromas", así que tienen una 'carta' de ocho sabores, con un precio único de 1,80 euros por unidad: del 'Coquette', con chocolate blanco y cobertura de coco rallado, o el 'Truffe', de chocolate al 70% y cobertura de 'Choco Crispies', al 'Tarte au citron', con ralladura de limón y galleta belga; uno casi castizo como el 'Violette', de violeta y cobertura de violeta ácida; o el 'Vanille et Biscuits', de vainilla y 'cookies' americanas.
Aparte de estas tentadoras bolitas golosas, la oferta de La Brigaderie se completa con panes de queso, con la receta típica de Brasil -"de la región de Minas", aclaran-, por 0,60 euros la unidad; pasteles de nata, típicos de Portugal, por 1,50; y los 'chafadiños', sándwiches de pan de queso "chafados en la sandwichera", crujientes por fuera y cuatro opciones, por 1,90 euros cada uno: Mixto, de Cheddar y pechuga de pavo; Pizza, de tomate, mozzarella, jamón York y orégano; Ibérico, de jamón y tomate; y Trufado, de queso brie, salsa de trufa y rúcula.
Algunos productos se pueden comprar en 'combos' para "probar un variado", con precios entre 6,90 y 17,90 euros; y como opción de regalo, cajas de 8 unidades -incluso en un 'pack' con velas perfumadas y un Moscato, por 29,90 euros-. Y, además, hay un lado líquido en la oferta de La Brigaderie: café, infusiones, refrescos...
"Estar en la misma Plaza del Dos de Mayo es un punto a favor, ya que mucha gente entra y se sienta en un banquito de la plaza a comerse sus 'briguis' o sus 'chafadiños', junto con su café. Uno de nuestros objetivos intangibles es incentivar esa costumbre y darle todavía más vida y buena energía a la plaza", admite la pareja fundadora de La Brigaderie.
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