lunes, 28 de enero de 2019

'La Hora Musa - El Cefot de Cáceres bate sus registros ,. Martes -29- ENERO ,./ Cachitos de hierro y cromo -,.’¿Qué une al Sansón Extremeño con el Crimen de Don Benito?,. Martes -29- ENERO,.

TITULO: 'La Hora Musa -El Cefot de Cáceres bate sus registros ,. Martes -29- ENERO ,.
'La Hora Musa', presentado por Maika Makovski ,
a las 22:55 horas, en La 2 martes -29- Enero,.

El Cefot de Cáceres bate sus registros,.

Un soldado jura bandera este sábado en Cáceres/JORGE REY
Un soldado jura bandera este sábado en Cáceres,.

Más de 1.200 soldados juran bandera en un acto que siguieron 6.000 personas | A finales de mayo se espera un nuevo ciclo de 1.320 alumnos que realizarán su formación en la capital cacereña,.

Atasco en el ferial, donde el aparcamiento se quedaba pequeño para tanto coche. Colas en los urinarios móviles, en los que a media mañana decenas de personas formaban cola. Día de fiesta para el vendedor de la Once, que hacía su particular agosto en pleno enero. Y fin de existencias en muchos negocios de la capital cacereña que celebraron como si fuera festivo la jura de bandera de ayer. 1.240 alumnos del primer ciclo de 2018 protagonizaron el acto en las instalaciones del Centro de Formación de Tropa (Cefot). Se batió un nuevo registro. Ya en julio se vivió la jura más multitudinaria de la última década con casi 1.100 soldados. «La tendencia se mantiene y continúa», sostiene el coronel jefe, Francisco de Asís Ramírez, que ayer volvió a rememorar la conexión que existe entre el Ejército y Cáceres. Unas 6.000 personas, casi todas familiares de los alumnos desplazados desde distintos puntos de España, lo presenciaron en directo.
«Han entrado varios grupos de canarios que venían a la jura de bandera y me he quedado sin existencias. Se me ha acabado el bacon», contaba satisfecha a media tarde María Rodríguez, que regenta la multitienda de la calle Argentina. También Miguel, su pareja, que es taxista, tuvo un día completo. Los servicios se multiplicaron en el gremio.
«Cáceres es una ciudad que quiere al Cefot. Está muy arraigado y aporta riqueza a la ciudad», resume el coronel jefe. Francisco de Asís recuerda que «estas juras multitudinarias agotan las reservas hoteleras de Cáceres y sus alrededores». De esos dividendos adicionales que deja la institución militar daba fe también Antonio Rodríguez. En su cafetería El Olivar ayer, a la hora del desayuno, la tostadora no daba de sí ante tanta demanda. «Ha sido cuestión de minutos. Hemos servido unas 15 ó 20 tostadas y desayunos a familias que venían a la jura. Eran de Canarias, Cádiz, Ceuta...», contaba visiblemente satisfecho.
Las gradas del Cefot se quedaron pequeñas para acoger a lso familiares y amigos que llegaron
Las gradas del Cefot se quedaron pequeñas para acoger a lso familiares y amigos que llegaron,.
«Cáceres ya demostró en su momento que no quiere perder el Cefot», insiste Francisco de Asís Ramírez. Como coronel jefe fue la autoridad que tomó juramento a esos más de 1.200 nuevos soldados. De ellos, solo 56 eran mujeres. Menos del cinco por ciento. En la jura del pasado 28 de julio, de 1.097 alumnos, 45 fueron mujeres. La proporción, por tanto, se mantiene, aún con mucho camino por delante para la aumentar presencia femenina en el Ejército.
El acto de ayer, con una temperatura primaveral, comenzó al mediodía y se prolongó hasta después de la una y media de la tarde. La presidencia del mismo correspondió al general de brigada y subdirector de Instrucción, Adiestramiento y Evaluación, Andrés Freire. Agustín Ferrán López Torres recibió un diploma como alumno número uno de su promoción. A su vez, a Antonia Torres Costa, en representación de todas las madres de los soldados, se le entregó un ramo de flores.
Los soldados participantes en el acto, durante un momento de la juraEl coronel jefe, en su discurso de este primer ciclo del pasado año, aludió a «la cercanía entre la ciudadanía cacereña y la institución militar». «Ha sido un periodo especialmente duro e intenso física y psíquicamente. Habéis pasado muchas horas de frío en estas tierras extremeñas», resaltó, además de felicitar a los soldados. En el homenaje a los caídos hubo un recuerdo especial al que ya había aludido el propio Francisco de Asís Ramírez. Fue para los héroes de Baler, al cumplirse su 120 aniversario.
En un día de celebraciones, de fiesta general, abrazos y lágrimas de emoción, el coronel jefe avanzó que a Cáceres le esperan más jornadas como la de ayer.
La tendencia se mantiene para el futuro más inmediato. En mayo se esperan otros 1.320 alumnos cuya formación se llevará a cabo en Extremadura. Un centenar de los 1.340 que se incorporaron en este último ciclo, no llegaron a terminar su formación.
Los soldados participantes en el acto, durante un momento de la jura ,. 
 
 
TITULO:   Cachitos de hierro y cromo - ’¿Qué une al Sansón Extremeño con el Crimen de Don Benito?’ ,.  .  ,.Martes -29- ENERO,.

Martes-29- Enero  a las 22:00 horas en La 2, fotos .
 
 ’¿Qué une al Sansón Extremeño con el Crimen de Don Benito?,.
 
 Catalina Barragán e Inés María Calderón, ambas asesinadas por García de Paredes. Tuve una particular guerra que libré en el Registro Civil de Cáceres cada vez que fui a inscribir a un hijo. Se empeñaba el oficial del Registro (buena persona, pero cabezón), en poner a mis descendientes el 'de' después del nombre y la 'y' entre los apellidos. Discutí la primera vez con el oficial, al que conocía, al ver que me puso en el libro de familia el nombre de Marina de Lorenzo y Fernández.
–Pero... ¿estás de coña? –Le dije – Haz el favor de quitar esa 'de' y la 'y'. No me ennoblezcas a mi niña, que es hija del pueblo. Quítalo, anda.
–¡Qué no! Ese 'de' se queda ahí, porque cuando el primer apellido puede ser nombre hay que ponerlo para evitar confusiones, y la 'y' también se queda... porque sí. Venga, que hay cola. – Dijo mientras estampó el sello azul del Registro al lado del nombre.
Idéntica disputa tuve al inscribir a Sergio y a Francisco; y una vez ganó el de la ventanilla y otra yo, mientras los de la cola veían asombrados la disputa.
En una ocasión que perdí y refunfuñaba por la Redacción, me dijo el viejo periodista Sanjosé, que por entonces aún estaba vivo.
–Bueno. Eso de cómo se llama uno tampoco debiera ser tan importante. ¿Tú sabes que dos de las personas más destacadas en Extremadura, en lo bueno y en lo malo, se llamaban igual?
–Ni idea.
–Pues García de Paredes fue el valeroso héroe conocido como el Sansón Extremeño, y García de Paredes también fue el ser despreciable que cometió el Crimen de Don Benito. Eran dos personas totalmente distintas, pero a los dos les unía ser García de Paredes.
Sanjosé tenía razón, a los dos se les conoció como García de Paredes, aunque uno era Diego de nombre y el otro Carlos.
Según nos contó, Diego García de Paredes nació en Trujillo allá por 1468. Le describieron los que le conocieron, como un hombre de talla gigantesca, con cuello de toro y cabeza que parecía pequeña ante un gran cuerpo que todo era músculos. Devoto cristiano, era sincero, honesto, generoso, leal y cortés, con una fuerza descomunal que se dice que demostró ya en Trujillo, cuando para que su querida madre se persignara con agua bendita, le acercó la pila de piedra de la Iglesia de Santa María La Mayor como el que coge un vaso de agua. Cuando sus padres murieron empezó a buscarse la vida. Se fue a Roma, en donde el Papa le hizo de su escolta personal, cuando vio la forma en la que hizo frente a más de veinte que le atacaron con sus espadas. Se defendió con una pesada barra de hierro y según las crónicas de la época, mató a cinco e hirió a diez, «dejando a los demás bien maltratados y fuera de combate».
Luego fue condotiero al servicio del Duque de Urbino, y combatió como capitán de infantería en las guerras de Italia, norte de África y Navarra. Fue coronel de infantería de los Reyes Católicos bajo el mando del Gran Capitán al que idolatraba, aunque fue famosa una disputa que tuvo con él en 1503, en la segunda guerra de Nápoles, cuando al estar estudiando cómo vencían a 2.000 franceses que estaban al otro lado del río Garellano, el Sansón Extremeño se sintió herido en su orgullo por un reproche del Gran Capitán y se fue con su enorme montante (una espada de dos filos), al puente a desafiar al enemigo, que le atacó en masa pero uno a uno por la estrechez del puente en donde él se quedó solo. Fue tal la matanza que hizo, que se contó que acabó con unos 500 franceses entre los que mató con la espada y los que tiró al río y murieron ahogados.
Hubo una época que se enfadó con Fernando el Católico y se hizo corsario, para luego participar en las cruzadas como coronel de la Liga Santa con el Papa Julio II. También fue coronel de Carlos V, con el que peregrinó a Santiago de Compostela en 1520.
Este hombre al que nadie fue capaz de vencer, murió con 64 años en Bolonia, Italia, tras una caída del caballo. Las proezas de García de Paredes fueron contadas por muchos escritores, uno de ellos Cervantes, que le cita dos veces en El Quijote, indicando que el extremeño era un, «valentísimo soldado, y de tantas fuerzas naturales, que detenía con un dedo una rueda de molino en la mitad de su furia».
Sanjosé también nos contó como la ciudad de Don Benito se sublevó tras el asesinato, el 19 de junio de 1902, de la joven Inés María Calderón y su madre Catalina Barragán. Se había detenido a dos inocentes cuando el pueblo culpaba a un cacique juerguista y desalmado: «¡Ha sido García de Paredes!» gritaban.
Catalina Barragán e Inés María Calderón, ambas asesinadas por García de Paredes.
El Crimen de Don Benito lo cuenta muy bien en su libro 'Crónica de la España Negra' Francisco Pérez Abellán, que se murió el pasado 28 de diciembre. Escribió Abellán que Carlos García de Paredes, «era un caciquillo soltero, alto, estirado, fanfarrón, borrachín, sin oficio ni beneficio, final de especie de señoritos extremeños cuando Extremadura era un desierto cultural olvidado por Madrid. Tenía 32 años, el rostro apepinado, gastaba imponente mostacho y distraía sus ocios con el juego. (...) Se le suponía autor del apaleamiento de un sereno, de la violación de una deficiente y de haber propinado una puñalada a su madre». Nada que ver con el otro García de Paredes, el Sansón Extremeño.
Carlos García de Paredes se encaprichó de la hermosa Inés y, como no le hacía caso, intentó violarla con ayuda de su amigo Ramón Martín de Castejón. Entraron por la noche en su casa con la ayuda del sereno Pedro Cidoncha, que luego sería condenado a cadena perpetua. El verdugo de Cáceres fue el 5 de abril de 1905 a Don Benito, donde ajustició a garrote vil a Castejón y a García de Paredes. Abellán escribió que el caciquillo llegó tan mal al patíbulo, «que le fallaron los esfínteres y manchó los pantalones».
Ajusticiamiento de los autores del Crimen de Don Benito.
Tengo que decir, para ser sincero, que aquella guerra del Registro la ganó definitivamente el de la ventanilla, cuando el 20 de septiembre del 2000 hubo gente que se empeñó en darme el pésame por la muerte de una persona, a la que apreciaba pero que no era mi padre como ellos aseguraban.
Embobado estreché la mano que me extendió más de uno, mientras decían apesadumbrados:
–Sergio, siento mucho la muerte de tu padre. ¡Qué gran escritor era Pedro DE Lorenzo!
Ajusticiamiento de los autores del Crimen de Don Benito.

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