Un trío en la cocina - Cocina - El cocinero del paisaje ,./ Un país mágico -Convocan en Don Benito el III Certamen de Fotografía 'Diego Sánchez Cordero' ,. / Diario de un nómada -El Ejército expondrá en Badajoz el fajín, las botas y las calzas del general Menacho,.

TITULO: Un trío en la cocina - Cocina  - El cocinero del paisaje,.

  fotos,. Un trío en la cocina -  Cocina -  El cocinero del paisaje,.

El cocinero del paisaje,.

Definía su casa como «un enclave de resistencia» frente a la comida basura,.

foto / Santi Santamaría, cocinero español, posa en su restaurante El raco de Can Fabes, en Sant Celoni (Barcelona). / Archivo

Tres cosas son buenas y serían de gran valor si no se encontrasen más que en las Indias: los ajos, las coles y el cordero». Este refrán catalán, reflejo perfecto de su filosofía, fueron las últimas palabras escritas por Santi Santamaria para La Vanguardia. El cocinero había convertido ese espacio dominical en un fortín desde el que diseccionaba el panorama gastronómico mundial.
Gran lector, polemista y gourmand, Santamaria defendía desde sus fogones un estilo de vida propio, heredado en la cocina de casa. Santi nació en la parte antigua del Racó de Can Fabes, algo así como el rincón de la casa de las habas. Se trata de una casona de payeses levantada en el siglo XVIII, cercana a una calzada romana, y que los Santamaria ocupan desde hace dos siglos largos. «Podría decirse que es un enclave de resistencia frente a la macdonalización y el fast food que nos agreden. Comer allí constituye un acto cultural antes que una manifestación del instinto», decía. Santamaria se proclamaba allí adalid de «la cocina del paisaje».
Esa defensa encendida de un modo de entender los fogones, que plasmó en su obra La cocina al desnudo, le llevó a disputar con los métodos de Ferran Adrià, un inventor sin cortapisas y dispuesto a utilizar todo cuanto está a su alcance para crear nuevos platos. Acusado de usar aditivos industriales que Santamaría consideraba impropios de los grandes restaurantes y de no informar de ellos a los clientes, Adrià se defendía con su habitual sencillez, recordando, por ejemplo, la complejidad de los procesos químicos que hay detrás de la obtención de una simple gelatina de pescado, elemento común en cualquier restaurante.
Escatológico y mordaz
Escatológico y mordaz, su frase «los cocineros trabajan por la puta pela» cayó también como una bomba entre sus colegas. Santamaria era un hombre pegado a la tierra. Al nacer, su padre le regaló 300 pinos y, con 12, era él mismo quien iba a plantarlos al monte. Trabajó en químicas y papeleras hasta los 23 años. Pero fue su madre Teresa Puig, antigua tejedora en los telares de Cardona, la que le inculcó el sentido de la economía. La cocina, decía el cocinero, es un desfile de identidades próximas: hierbas, setas, coles, la familiar matanza del cerdo... «Productos relacionados con las estaciones que permitían a las familias ser autosuficientes», añoraba.
Tras regresar del servicio militar, se declaró objetor de conciencia y militó en movimientos pacifistas. En 1981, y junto a su novia Àngels Serra, abre el Racó de Can Fabes en el salón de su casa. Vázquez Montalbán otro apasionado de Oriente le animó a cocinar. Empezaron por servir patés, quesos y embutidos artesanos del padre de Àngels. Los fines de semana, menús «a 320 pesetas» para los campesinos con posibles de la comarca. Y los miércoles, día de mercado, abrían para dar desayunos de porrón y forquilla (tenedor), como ceps con longaniza, butifarra, cabeza de cerdo, tripas y esqueixada de bacalo... Platos contundentes y primarios, una seña de identidad total.
Cuando se casa en 1982, Santamaría organiza un viaje de novios gastronómico por el País Vasco. En cuatro días, la pareja pasa por Arzak, Patxiku Quintana y por el Akelarre de Pedro Subijana. «Salimos de Arzak fascinados... Le dije a Àngels, algún día conseguiremos algo así». A su vuelta se sumerge en el mundo de las setas del Montseny y organiza cenas temáticas. Su casa se llena de una fauna variada: la gauche divine catalana comparte espacio y manteles con honorables payeses de festejo familiar.
Visto el éxito, decide hipotecar la casona para renovarla en 1985. Pero el cambio deja al local sin clientes. «No venía nadie», se lamentaría Santamaria. Los créditos se los comen. Su salvación se llama Philippe Serre, antiguo jefe de cocina con el tres estrellas Guérard, al que invita y le enseña técnicas de cocina casi secretas. En 1988 le cae la primera estrella Michelin y, para festejarlo, se va con su esposa de tour gastronómico por Francia, Holanda, Italia, Bélgica, Alemania y Suiza. Con 30 años se echan al coleto los menús de 30 restaurantes con dos y tres estrellas. «Copiaba lo que me gustaba». En 1994 llega el trío. «La tercera estrella no es solo técnica, tiene que haber un personaje, una filosofía y un estilo de trabajo», decía.
Preocupado por el abandono del mundo rural, por la desaparición de payeses y boletaires sabios que le surtían de delicias, Santamaria, crítico de la globalización, era, sin embargo, un defensor a ultranza de la comida asiática, de los mercados de China, Tailandia y Singapur, donde se sentaba a jamar unos fideos, unas gambas, un mangostán en Denpasar, la capital de Bali, o ese exquisito cerdo japonés de raza kurobuta por el que se le iban los ojos. «La creatividad es un impulso sentimental, algo inexplicable», dejó dicho.

 TITULO: Un país mágico  -  Convocan en Don Benito el III Certamen de Fotografía 'Diego Sánchez Cordero',.

  
 El sabado -23- Febrero  a las 18:30 por La 2, foto.

Convocan en Don Benito el III Certamen de Fotografía 'Diego Sánchez Cordero',.

Se trata de un concurso que une la lectura y la imagen para la Semana del Libro,.

La fotografía y la lectura vuelven a ir de la mano del III Certamen de Fotografía 'Diego Sánchez Cordero'. Bajo el lema 'Vivir leyendo', el concurso servirá para promocionar la Semana del Libro y, al mismo tiempo, fomentar el ingenio y las aptitudes artísticas del aficionado o profesional a la imagen fotográfica. Se trata de un certamen organizado por la Concejalía de Cultura, junto con la biblioteca Francisco Valdés. La edición anterior consiguió reunir un importante número de trabajos fotográficos, en total 145, de los que salieron como ganadoras la fotografía 'El Viaje de Manuela', que se muestra en el cartel anunciador del certamen de este año, 'Diversión de entre Letras y 'Enfocando Relatos'.
La temática, al igual que en las dos ediciones anteriores, girará en torno al mundo del libro y la lectura, con la idea de captar en imágenes momentos que se producen en cualquier disciplina de nuestra vida cotidiana.
El concurso está abierto a cualquier persona que sea residente en la comarca Vegas Altas-la Serena y se podrán presentar un máximo de tres fotografías por participante, que deben ser inéditas, originales y no haber resultado premiadas ni estar a la espera del fallo en otro concurso. El plazo de presentación será hasta el 31 de marzo. El fallo se hará público en el mes de abril.
Los premios serán para las tres mejores fotografías con premios de 300 euros para la fotografía ganadora, 200 euros para la segunda y 100 euros para la tercera imagen ganadora.
Las 30 mejores fotografías formarán parte del archivo fotográfico del Ayuntamiento y serán expuestas en la Casa de Cultura durante la Semana del Libro. Asimismo, la edil de Cultura, Natalia Blanco, ya ha avanzado que próximamente se abrirá al público la exposición permanente que mostrará el archivo fotográfico cedido por Diego Sánchez Cordero.

TITULO:  Diario de un nómada -El Ejército expondrá en Badajoz el fajín, las botas y las calzas del general Menacho ,.

El domingo -24- Febrero a las 19:00 por La 2 , foto.

 

El Ejército expondrá en Badajoz el fajín, las botas y las calzas del general Menacho,.

El comandante Cardona junto a un retrato de Menacho.

Son los escasos enseres que se conservan del militar, ya que su sepulcro fue saqueado y trasladado, pero en marzo volverán a Badajoz,.

El 4 de marzo de 1811 el general Menacho murió cuando dirigía la defensa de Badajoz ante el ejército napoleónico. La metralla lanzada con un cañón le alcanzó. Sus soldados sabían que su tumba podía ser profanada si los franceses entraban en la ciudad, por lo que la escondieron en una cripta de la catedral. Años después ocupó el lugar que merecía en un panteón que le reconocía como un héroe de la Guerra de la Independencia, pero el sepulcro fue saqueado. Lo poco que se recuperó fue trasladado al Museo Militar de Toledo en 1941. 78 años después, estos enseres volverán a la ciudad donde murió.
Los artículos, entre ellos las botas, las calzas (medias) y el fajín del general, serán expuestos en Capitanía a partir del 14 de marzo, según anunció ayer el comandante Juan Vicente Cardona Ferrer, portavoz de la Brigada Extremadura XI. El Ejército ha adecuado cuatro salas de este edificio para crear una exposición que recorrerá la Guerra de la Independencia, los sitios que sufrió Badajoz y finalmente la vida del famoso general.
Para poder trasladar estos artículos desde Toledo a Badajoz, la Brigada Extremadura XI ha tenido que cumplir con una serie de requisitos. Además de adecuar unas instalaciones como museo, han tenido que costear la rehabilitación de los enseres. Para ello han contado con la colaboración de la Fundación CB. Las botas recuperadas son especialmente valiosas, ya que son las únicas originales que se conservan de esta época. En los objetos se aprecian otros datos interesantes, por ejemplo, a las calzas les falta una de las piernas, la izquierda, donde Menacho sufrió heridas días antes de morir.

La metralla

Durante la rehabilitación se encontraron también huesos del general procedentes de su tumba, pero estos restos se quedarán en Toledo al no tener valor expositivo. Otro hallazgo fueron balas de cañón. No se puede saber si son del bote de metralla que mató al que era gobernador civil y militar de Badajoz, pero es probable.
Junto a estos enseres, en las cuatro salas, habrá una colección de armas con trabucos y bayonetas entre otras, petos militares, espadas, una maqueta que recrea el momento de la muerte de Menacho y un uniforme que recreará el que llevaba el general en su día a día.
Estos fondos han sido prestados a Badajoz durante los próximos cuatro años, aunque podría prorrogarse la cesión o incluso ser definitiva. El comandante Cardona reconoció ayer que no ha sido fácil poder montar esta muestra y recordó que el impulso inicial partió del general de Brigada Francisco José Dacoba cuando estaba al frente de la Extremadura XI.
Precisamente Dacoba dará la conferencia inaugural de la sala de exposiciones el 14 de marzo en capitanía. Antes habrá un homenaje a Menacho en la catedral. Como previo a este día, Capitanía también acogerá un ciclo de conferencias con miembros de la recién creada Asociación Histórico-Militar Alfonso IX. La primera será hoy a cargo del teniente coronel Fernando Ortiz sobre los ejércitos en campaña (19.30 horas). La segunda el 21 de febrero sobre los sitios de Badajoz y estará impartida por Carlos Sánchez Rubio. El 28 de febrero será el turno de Jacinto Marabel, que repasará la historia de Menacho. El mes de marzo contará con un homenaje más a este militar, ya que, como avanzó HOY, se inaugurará su estatua.