Sándwich de champis y avellanas
El perfecto tentempié
Ingredientes: 8 rebanadas de pan de molde, 1
tomate, 3 champiñones, media cucharada sopera de perejil picado,
avellanas tostadas, 4 quesitos, 6 lonchas de jamón ibérico y 50 g de
mantequilla. Para la ensalada con vinagreta: escarola, vinagres de sidra
y de Jerez, caldo concentrado y aceite de oliva.
Elaboración: De la ensalada con vinagreta: se calientan los dos vinagres a fuego suave y se disuelve en ellos una pizca de pastilla de caldo concentrado. Se deja reducir durante cinco minutos y se añade el aceite. Cuando la vinagreta esté esté frío, se puede enriquecer con una brunoise de champiñón crudo y perejil picado. Se reserva para aliñar con ella la escarola. Del sándwich: se untan las rebanadas de pan con la mantequilla en punto pomada. Se aplastan los quesitos con la ayuda de un tenedor para obtener una pasta con la que se untan los panes por la otra cara. Se lava el tomate y se corta en rodajas muy finas. Se pelan los champiñones y se cortan finísimos con una mandolina.
Acabado y presentación: se monta el sándwich colocando el lado untado con la mantequilla por fuera; a continuación, la pasta de quesito, las rodajas de tomate, las láminas de champiñón, las avellanas picadas, el perejil picado, una pizca de sal y el jamón ibérico. Se cubre con la otra rebanada con el quesito por dentro y la mantequilla por fuera. Se tuesta el sándwich en una sartén a fuego suave para que el pan coja color y los ingredientes se atemperen. Se acompaña con la escarola aliñada.
Elaboración: De la ensalada con vinagreta: se calientan los dos vinagres a fuego suave y se disuelve en ellos una pizca de pastilla de caldo concentrado. Se deja reducir durante cinco minutos y se añade el aceite. Cuando la vinagreta esté esté frío, se puede enriquecer con una brunoise de champiñón crudo y perejil picado. Se reserva para aliñar con ella la escarola. Del sándwich: se untan las rebanadas de pan con la mantequilla en punto pomada. Se aplastan los quesitos con la ayuda de un tenedor para obtener una pasta con la que se untan los panes por la otra cara. Se lava el tomate y se corta en rodajas muy finas. Se pelan los champiñones y se cortan finísimos con una mandolina.
Acabado y presentación: se monta el sándwich colocando el lado untado con la mantequilla por fuera; a continuación, la pasta de quesito, las rodajas de tomate, las láminas de champiñón, las avellanas picadas, el perejil picado, una pizca de sal y el jamón ibérico. Se cubre con la otra rebanada con el quesito por dentro y la mantequilla por fuera. Se tuesta el sándwich en una sartén a fuego suave para que el pan coja color y los ingredientes se atemperen. Se acompaña con la escarola aliñada.
TÍTULO: SHAKIRA, "POR FIN HE ENCONTRADO LO QUE ESTABA BUSCANDO",.
Shakira: "Por fin he encontrado lo que estaba buscando"
Su hijo, su pareja, la belleza
(exterior e interior), el 'parto' de su nuevo disco, las FARC, el
fútbol... Aprovechando el último lanzamiento de Oral-B, de la que es
imagen, la reina latina del pop se sentó con 'XLSemanal' para hablar en
exclusiva sobre el momento más luminoso de su vida. Aquí y ahora.Por
Fernando Goitia
Milan me ha mirado hoy en plan: '¿Qué ropa es esa que
llevas, mami?'. Acaba de cumplir un año, pero ya percibió algo raro».
Shakira, botas altas de cuero negro con taconazo de aguja y ajustadísimo
y cortísimo vestido violeta, habla de su hijo tanto como cualquier otra
madre primeriza. «A diario soy más de vaqueros y camiseta; y él, claro,
ha notado algo diferente». Su atuendo responde a una ocasión especial:
la presentación de la última campaña publicitaria protagonizada por la
cantante colombiana. Con Oral-B 3D White, Shakira promociona sonrisas
blancas y relucientes.
XLSemanal. Usted siempre ha sonreído mucho...
Shakira. Sí, es verdad. En pocas fotos me verás así [pone morritos].
XL. Hombre, también le va mucho lo de posar en plan sexi.
S. [Se ríe]. Pero ¿sabes qué? Muchas veces el fotógrafo me tiene que decir: «¡Para de sonreír! ¡Venga, seria!» [se ríe]. Quieren el gesto de Angelina Jolie, y yo saco la sonrisa. No puedo evitarlo.
XL. ¿Enseñó a posar a Gerard Piqué?
S. ¡Ah, no, no! Él ya sabía posar. Pero el que lo hace de maravilla es Milan. Le encanta la cámara. ¡Y los aplausos! No sé de quién lo habrá sacado [se ríe]. ¿Sabes cómo hago para que me dé besos? Le aplaudo cuando me da uno y entonces me da más. Sin aplausos, nada [ríe].
XL. ¿Sonríe ahora más que nunca?
S. Sí, sí. Desde 2010 sonrío mucho más [se ríe]. Estoy en un lugar maravilloso. He encontrado por fin lo que estaba buscando: el amor y mi propia familia. Son mi mayor prioridad.
XL. ¿Cree en eso de: «Cuando aparece el amor de tu vida, sabes que es él»?
S. Deberías preguntarle eso a Gerard. Cuando nos conocimos, le dijo a Cesc Fàbregas: «Voy a casarme con ella. Es la mujer de mi vida». Lo supo cuando me vio por primera vez.
XL. ¿Y usted?
S. Yo también supe que él sería el único hombre para mí.
XL. Hablar de matrimonio nada más conocerse suele asustar...
S. Pero no me lo dijo a mí, se lo dijo a su amigo. Aunque sí que me dijo que había soñado que tendríamos un hijo.
XL. O sea, él dio el primer paso...
S. Y el segundo y el tercero [se ríe]. Yo, hasta el cuarto, nada. Por eso luego me decía: «¡Qué tímida eres!» [se ríe]. Soy un poco anticuada. Me gusta que el hombre dé el primer paso.
XL. Con la maternidad, ¿ha cambiado algo en usted?
S. Ahora soy más organizada, más estricta con los horarios.
XL. Algo más habrá, ¿no?
S. Es que ha sido una transición tan natural y orgánica que no siento que mi vida haya cambiado radicalmente. La mayoría de las madres me dicen: «¡Cómo te cambia la vida!». Pero todo ha ido muy fluido.
XL. ¿Tendrá más hijos?
S. ¡Definitivamente queremos tener más niños! Es solo cuestión de tiempo que nos organicemos.
XL. Para su próximo álbum, ¿ha conseguido componer sobre algo que no sea su hijo o la maternidad?
S. Sí, sí, sobre muchas cosas. No es un álbum maternal. O no tanto como pudiera esperarse [se ríe]. Eso sí, he improvisado muchas canciones de cuna, porque cuando duermo a Milan y se me acaba el Twinkle, twinkle little star... termino cantando cualquier cosa. Tengo un gran repertorio.
XL. ¿Amenaza con un disco de nanas?
S. No, no. Eso nunca saldrá a la luz [se ríe]. El disco remite al principio de mi carrera. Un poco más de rock and roll, más actitud, aunque también hay música de baile. Estoy feliz. Ah, ¿y sabes qué? Creo que ahora canto mejor. Con el embarazo, algo le pasa a tu voz; es extraño, es más profunda, más aterciopelada; se redondea.
XL. En España existe la expresión «parir un disco». Adecuada, ¿no?
S. Sí, más que nunca. Pero ¿sabes qué te digo?: que tener un hijo, pasar un embarazo y parir es mucho más fácil que hacer un disco. Hice a Milan en un segundo, literalmente [se ríe], y llevó menos de nueve meses traerlo al mundo, mientras que este disco me ha llevado casi tres años.
XL. Con cada álbum siempre ha dado un paso más en el lado sexual de su imagen. Con Loba, incluso coqueteó con el pole dance. Ahora que es madre, ¿seguirá por ese camino?
S. No, no, voy a ir un poco hacia atrás. Siendo madre me tengo que medir, ¿no? [se ríe].
XL. Anda usted de coach en la versión mexicana de La voz. ¿Se recuerda a sí misma empezando en esto?
S. Sí, sí, me sorprende lo sueltos que están los chicos de hoy en día. Yo era mucho más vulnerable cuando tenía veintipocos. Los jóvenes tienen más confianza en sí mismos, en sus opiniones, en lo que tienen que ofrecer.
XL. ¿Acaso no confiaba mucho en sus posibilidades?
S. Hombre, presentía algo, pero de no haber sido por mi madre nunca lo habría conseguido. Estaba convencida de mi valor, creyó en mí y trabajó al máximo para ayudarme a construir la seguridad en mí misma, una herramienta vital para sobrevivir. Me parece fundamental que los padres estén conectados con sus hijos, que averigüen lo que estos quieren hacer en la vida y que, sea lo que sea, los apoyen.
XL. Sus padres le dieron confianza, pero ¿cuánta gente intentó desanimarla?
S. Salvo mis padres, poca gente creyó en mí. Por suerte, la confianza que me dieron fue más que suficiente. Es importante darles mensajes positivos a los hijos, ya que las opiniones que se hacen de ellos mismos están basadas en las que sus padres tienen de ellos. La opinión que mis padres tenían de mí fue de un valor incalculable.
XL. Su hijo es muy pequeño, pero ¿percibe ya qué cosas le interesan?
S. Totalmente. La pintura, por ejemplo. Y las historias. Le leo cuentos desde que nació. No se cansa. También le encanta ver los partidos de su padre. En cuanto le digo: «¡Fútbol!», gira la cabeza hacia la televisión. Lo llevo al Camp Nou y se queda mirando al campo de principio a fin con una concentración total. El problema es que también le gusta bailar [se ríe].
XL. ¿El Waka waka?
S. Lo que sea. Si le canto, empieza a moverse. El otro día, incluso agitó un poco las caderas. No sé si debo empezar a preocuparme [se ríe].
XL. Siempre ha llevado un ritmo de vida trepidante. ¿Lo ha reducido?
S. Sí, con un niño, además, cambian mucho tus prioridades. Intento simplificar mi vida todo lo que puedo. Mucha gente cree que soy controladora; lo era [se ríe], ya no.
XL. ¿Qué le hizo cambiar?
S. No tenía otra opción. O lo haces o te mueres intentando controlarlo todo.
XL. A lo largo de su vida, ¿han variado las cosas que le hacen sentirse cómoda consigo misma?
S. Antes abusaba del maquillaje; ahora veo las fotos y creo que me hacía mucho más mayor. O aquel vestido que no te favorecía en absoluto. Hoy soy más precavida [se ríe]. Creo que lo realmente vital es trabajar la confianza, ser tú misma. Es importante estar en paz. Siempre he buscado esa paz interior. Es el mejor sinónimo de belleza.
XL. Hablando de paz. Parece que Colombia está más cerca que nunca de alcanzarla. ¿Respalda la negociación con las FARC?
S. Mira, tengo 36 años y nunca he conocido la paz en mi país. Ni sociólogos, ni politólogos, ni expertos ni presidentes han encontrado hasta hoy el camino adecuado. No hay una fórmula mágica, pero hay que intentar nuevas vías que nos lleven hacia el fin de la guerra sea como sea. Me alegra saber que se están dando los primeros pasos hacia ese objetivo.
XL. Según el último Barómetro de las Américas, son mayoría los colombianos que rechazan que las FARC formen un partido político...
S. A veces hay que pagar precios muy altos para conseguir lo que un país entero se merece. Hay millones de desplazados que podrían regresar a sus tierras, los niños podrían volver a las escuelas... En Colombia ya todos creíamos que nunca viviríamos en un estado de normalidad. Ya ni contábamos con ello, pero ahora estoy segura de que la paz va a llegar al fin.
XL. Una última cuestión: ¿irá a Brasil a ver el mundial este verano?
S. Eso espero. Sabes que cuando Gerard me conoció me dijo: «En 2014 iremos al mundial con nuestro niño». Y mira, parece que se cumplirá.
Belleza: 4 preguntas comprometidas
1. ¿Algún secreto de belleza que pueda compartir?
Procuro que todo sea lo más sencillo posible. Mi máxima es: limpieza y sencillez. Por las mañanas, me maquille o no, me aplico vitamina C en la cara. Para el pelo evito los productos con mucho alcohol, porque te lo secan. En su lugar uso aceites naturales. Y para la piel uso crema hidratante y, de vez en cuando, recurro al azúcar natural. Me exfolio para eliminar la piel muerta.
2. ¿Cuál es el mejor consejo de belleza que le han dado?
«Utiliza protector solar». No me gusta freírme al sol, le causa graves daños a la piel. Es genial estar bronceada, favorecedor, como si estuvieras de vacaciones, pero al final ¿cuánto dura un bronceado? Una semana, diez días. Y después tienes que vivir con el daño que el sol ha causado a tu piel. No soy de las que toman mucho el sol. Un poquito solo.
3. ¿Suele hacer algo especial antes de acudir a un evento?
Si noto que tengo la piel especialmente deshidratada después de algún viaje, algunas veces tomo cápsulas de vitamina E para favorecer mi piel. Son perfectas para tener un cutis más brillante. Pero nunca suelo ponerme mucho maquillaje. Por ejemplo, en fotos de hace diez años, me veo más vieja que ahora. Todo porque por entonces tenía un maquillador. Ahora, me maquillo siempre yo.
4. ¿Y cuáles son sus diseñadores de cabecera?
El tunecino Alaïa, sobre todo. Además, es un gran amigo. También me gustan mucho Versace y Helmut Lang. Mis camisetas de Lang son como un perro fiel: siempre se puede confiar en ellas.
El secreto dela sonrisa de Shakira
¿Qué le hizo decidirse a ser imagen de Oral-B White?
Oral-B es una marca seria, sus productos son seguros y han hecho una donación a nuestro nuevo colegio de la Fundación Pies Descalzos, que esperamos inaugurar este mes en Cartagena de Indias, en Colombia. Además, promociono un concepto único: sonreír. Todo el mundo se ve mejor con una sonrisa. Proyectas cosas positivas cuando sonríes.
¿Sus dientes tan blancos se los debe al nuevo dentífrico?
Todo, no. Ya venía de antes [se ríe], pero bueno... ayuda. Estoy muy emocionada con esta campaña. Promover la sonrisa es algo maravilloso. Forma parte de mí. Soy una 'sonreidora' [se ríe], tengo el hábito de la sonrisa, lo he tenido toda mi vida.
Dicen que la sonrisa es el mejor accesorio...
Sí. No hay maquillaje que supere a una sonrisa. Las mujeres, a veces, nos recargamos de cosméticos, accesorios, complementos, vestidos..., cuando lo más importante es sentirte segura y cómoda contigo misma y proyectar esa confianza. No hay nada más sexi que eso. Con una sonrisa amplia y desinhibida le estás diciendo al mundo que no tienes nada que esconder. Es la mejor forma de ser genuina, de ser tú misma. Y eso es lo más seductor, lo que más le gusta a los demás.
¿Cuál es el secreto de su sonrisa?
El secreto es ser una persona desinhibida, sincera y abierta. La gente que tiene una sonrisa de oreja a oreja no tiene nada que ocultar. Un buen ejemplo es la madre de Gerard, siempre transmite una gran felicidad. Esa honestidad al sonreír hace que parezca mucho más accesible a los demás.
XLSemanal. Usted siempre ha sonreído mucho...
Shakira. Sí, es verdad. En pocas fotos me verás así [pone morritos].
XL. Hombre, también le va mucho lo de posar en plan sexi.
S. [Se ríe]. Pero ¿sabes qué? Muchas veces el fotógrafo me tiene que decir: «¡Para de sonreír! ¡Venga, seria!» [se ríe]. Quieren el gesto de Angelina Jolie, y yo saco la sonrisa. No puedo evitarlo.
XL. ¿Enseñó a posar a Gerard Piqué?
S. ¡Ah, no, no! Él ya sabía posar. Pero el que lo hace de maravilla es Milan. Le encanta la cámara. ¡Y los aplausos! No sé de quién lo habrá sacado [se ríe]. ¿Sabes cómo hago para que me dé besos? Le aplaudo cuando me da uno y entonces me da más. Sin aplausos, nada [ríe].
XL. ¿Sonríe ahora más que nunca?
S. Sí, sí. Desde 2010 sonrío mucho más [se ríe]. Estoy en un lugar maravilloso. He encontrado por fin lo que estaba buscando: el amor y mi propia familia. Son mi mayor prioridad.
XL. ¿Cree en eso de: «Cuando aparece el amor de tu vida, sabes que es él»?
S. Deberías preguntarle eso a Gerard. Cuando nos conocimos, le dijo a Cesc Fàbregas: «Voy a casarme con ella. Es la mujer de mi vida». Lo supo cuando me vio por primera vez.
XL. ¿Y usted?
S. Yo también supe que él sería el único hombre para mí.
XL. Hablar de matrimonio nada más conocerse suele asustar...
S. Pero no me lo dijo a mí, se lo dijo a su amigo. Aunque sí que me dijo que había soñado que tendríamos un hijo.
XL. O sea, él dio el primer paso...
S. Y el segundo y el tercero [se ríe]. Yo, hasta el cuarto, nada. Por eso luego me decía: «¡Qué tímida eres!» [se ríe]. Soy un poco anticuada. Me gusta que el hombre dé el primer paso.
XL. Con la maternidad, ¿ha cambiado algo en usted?
S. Ahora soy más organizada, más estricta con los horarios.
XL. Algo más habrá, ¿no?
S. Es que ha sido una transición tan natural y orgánica que no siento que mi vida haya cambiado radicalmente. La mayoría de las madres me dicen: «¡Cómo te cambia la vida!». Pero todo ha ido muy fluido.
XL. ¿Tendrá más hijos?
S. ¡Definitivamente queremos tener más niños! Es solo cuestión de tiempo que nos organicemos.
XL. Para su próximo álbum, ¿ha conseguido componer sobre algo que no sea su hijo o la maternidad?
S. Sí, sí, sobre muchas cosas. No es un álbum maternal. O no tanto como pudiera esperarse [se ríe]. Eso sí, he improvisado muchas canciones de cuna, porque cuando duermo a Milan y se me acaba el Twinkle, twinkle little star... termino cantando cualquier cosa. Tengo un gran repertorio.
XL. ¿Amenaza con un disco de nanas?
S. No, no. Eso nunca saldrá a la luz [se ríe]. El disco remite al principio de mi carrera. Un poco más de rock and roll, más actitud, aunque también hay música de baile. Estoy feliz. Ah, ¿y sabes qué? Creo que ahora canto mejor. Con el embarazo, algo le pasa a tu voz; es extraño, es más profunda, más aterciopelada; se redondea.
XL. En España existe la expresión «parir un disco». Adecuada, ¿no?
S. Sí, más que nunca. Pero ¿sabes qué te digo?: que tener un hijo, pasar un embarazo y parir es mucho más fácil que hacer un disco. Hice a Milan en un segundo, literalmente [se ríe], y llevó menos de nueve meses traerlo al mundo, mientras que este disco me ha llevado casi tres años.
XL. Con cada álbum siempre ha dado un paso más en el lado sexual de su imagen. Con Loba, incluso coqueteó con el pole dance. Ahora que es madre, ¿seguirá por ese camino?
S. No, no, voy a ir un poco hacia atrás. Siendo madre me tengo que medir, ¿no? [se ríe].
XL. Anda usted de coach en la versión mexicana de La voz. ¿Se recuerda a sí misma empezando en esto?
S. Sí, sí, me sorprende lo sueltos que están los chicos de hoy en día. Yo era mucho más vulnerable cuando tenía veintipocos. Los jóvenes tienen más confianza en sí mismos, en sus opiniones, en lo que tienen que ofrecer.
XL. ¿Acaso no confiaba mucho en sus posibilidades?
S. Hombre, presentía algo, pero de no haber sido por mi madre nunca lo habría conseguido. Estaba convencida de mi valor, creyó en mí y trabajó al máximo para ayudarme a construir la seguridad en mí misma, una herramienta vital para sobrevivir. Me parece fundamental que los padres estén conectados con sus hijos, que averigüen lo que estos quieren hacer en la vida y que, sea lo que sea, los apoyen.
XL. Sus padres le dieron confianza, pero ¿cuánta gente intentó desanimarla?
S. Salvo mis padres, poca gente creyó en mí. Por suerte, la confianza que me dieron fue más que suficiente. Es importante darles mensajes positivos a los hijos, ya que las opiniones que se hacen de ellos mismos están basadas en las que sus padres tienen de ellos. La opinión que mis padres tenían de mí fue de un valor incalculable.
XL. Su hijo es muy pequeño, pero ¿percibe ya qué cosas le interesan?
S. Totalmente. La pintura, por ejemplo. Y las historias. Le leo cuentos desde que nació. No se cansa. También le encanta ver los partidos de su padre. En cuanto le digo: «¡Fútbol!», gira la cabeza hacia la televisión. Lo llevo al Camp Nou y se queda mirando al campo de principio a fin con una concentración total. El problema es que también le gusta bailar [se ríe].
XL. ¿El Waka waka?
S. Lo que sea. Si le canto, empieza a moverse. El otro día, incluso agitó un poco las caderas. No sé si debo empezar a preocuparme [se ríe].
XL. Siempre ha llevado un ritmo de vida trepidante. ¿Lo ha reducido?
S. Sí, con un niño, además, cambian mucho tus prioridades. Intento simplificar mi vida todo lo que puedo. Mucha gente cree que soy controladora; lo era [se ríe], ya no.
XL. ¿Qué le hizo cambiar?
S. No tenía otra opción. O lo haces o te mueres intentando controlarlo todo.
XL. A lo largo de su vida, ¿han variado las cosas que le hacen sentirse cómoda consigo misma?
S. Antes abusaba del maquillaje; ahora veo las fotos y creo que me hacía mucho más mayor. O aquel vestido que no te favorecía en absoluto. Hoy soy más precavida [se ríe]. Creo que lo realmente vital es trabajar la confianza, ser tú misma. Es importante estar en paz. Siempre he buscado esa paz interior. Es el mejor sinónimo de belleza.
XL. Hablando de paz. Parece que Colombia está más cerca que nunca de alcanzarla. ¿Respalda la negociación con las FARC?
S. Mira, tengo 36 años y nunca he conocido la paz en mi país. Ni sociólogos, ni politólogos, ni expertos ni presidentes han encontrado hasta hoy el camino adecuado. No hay una fórmula mágica, pero hay que intentar nuevas vías que nos lleven hacia el fin de la guerra sea como sea. Me alegra saber que se están dando los primeros pasos hacia ese objetivo.
XL. Según el último Barómetro de las Américas, son mayoría los colombianos que rechazan que las FARC formen un partido político...
S. A veces hay que pagar precios muy altos para conseguir lo que un país entero se merece. Hay millones de desplazados que podrían regresar a sus tierras, los niños podrían volver a las escuelas... En Colombia ya todos creíamos que nunca viviríamos en un estado de normalidad. Ya ni contábamos con ello, pero ahora estoy segura de que la paz va a llegar al fin.
XL. Una última cuestión: ¿irá a Brasil a ver el mundial este verano?
S. Eso espero. Sabes que cuando Gerard me conoció me dijo: «En 2014 iremos al mundial con nuestro niño». Y mira, parece que se cumplirá.
Belleza: 4 preguntas comprometidas
1. ¿Algún secreto de belleza que pueda compartir?
Procuro que todo sea lo más sencillo posible. Mi máxima es: limpieza y sencillez. Por las mañanas, me maquille o no, me aplico vitamina C en la cara. Para el pelo evito los productos con mucho alcohol, porque te lo secan. En su lugar uso aceites naturales. Y para la piel uso crema hidratante y, de vez en cuando, recurro al azúcar natural. Me exfolio para eliminar la piel muerta.
2. ¿Cuál es el mejor consejo de belleza que le han dado?
«Utiliza protector solar». No me gusta freírme al sol, le causa graves daños a la piel. Es genial estar bronceada, favorecedor, como si estuvieras de vacaciones, pero al final ¿cuánto dura un bronceado? Una semana, diez días. Y después tienes que vivir con el daño que el sol ha causado a tu piel. No soy de las que toman mucho el sol. Un poquito solo.
3. ¿Suele hacer algo especial antes de acudir a un evento?
Si noto que tengo la piel especialmente deshidratada después de algún viaje, algunas veces tomo cápsulas de vitamina E para favorecer mi piel. Son perfectas para tener un cutis más brillante. Pero nunca suelo ponerme mucho maquillaje. Por ejemplo, en fotos de hace diez años, me veo más vieja que ahora. Todo porque por entonces tenía un maquillador. Ahora, me maquillo siempre yo.
4. ¿Y cuáles son sus diseñadores de cabecera?
El tunecino Alaïa, sobre todo. Además, es un gran amigo. También me gustan mucho Versace y Helmut Lang. Mis camisetas de Lang son como un perro fiel: siempre se puede confiar en ellas.
El secreto dela sonrisa de Shakira
¿Qué le hizo decidirse a ser imagen de Oral-B White?
Oral-B es una marca seria, sus productos son seguros y han hecho una donación a nuestro nuevo colegio de la Fundación Pies Descalzos, que esperamos inaugurar este mes en Cartagena de Indias, en Colombia. Además, promociono un concepto único: sonreír. Todo el mundo se ve mejor con una sonrisa. Proyectas cosas positivas cuando sonríes.
¿Sus dientes tan blancos se los debe al nuevo dentífrico?
Todo, no. Ya venía de antes [se ríe], pero bueno... ayuda. Estoy muy emocionada con esta campaña. Promover la sonrisa es algo maravilloso. Forma parte de mí. Soy una 'sonreidora' [se ríe], tengo el hábito de la sonrisa, lo he tenido toda mi vida.
Dicen que la sonrisa es el mejor accesorio...
Sí. No hay maquillaje que supere a una sonrisa. Las mujeres, a veces, nos recargamos de cosméticos, accesorios, complementos, vestidos..., cuando lo más importante es sentirte segura y cómoda contigo misma y proyectar esa confianza. No hay nada más sexi que eso. Con una sonrisa amplia y desinhibida le estás diciendo al mundo que no tienes nada que esconder. Es la mejor forma de ser genuina, de ser tú misma. Y eso es lo más seductor, lo que más le gusta a los demás.
¿Cuál es el secreto de su sonrisa?
El secreto es ser una persona desinhibida, sincera y abierta. La gente que tiene una sonrisa de oreja a oreja no tiene nada que ocultar. Un buen ejemplo es la madre de Gerard, siempre transmite una gran felicidad. Esa honestidad al sonreír hace que parezca mucho más accesible a los demás.
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