El domingo -9- Junio , a las 21:30 por La Sexta, foto,.
Un robo retrasa un proyecto de mejora genética de arándanos en el Jerte
La investigación de Cicytex pretende conseguir variedades que se adapten mejor a la comarca para diversificar los cultivos de la zona,.
Éstas formaban parte de un trabajo del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (Cicytex). «Con el objetivo de diversificar los cultivos, se busca conseguir variedades de arándanos que se adapten mejor a la comarca», explica Mónica Tierno, gerente de la Agrupación.
Las plantas robadas se estaban testando y se trata de especies protegidas, por lo que para su manejo es preciso poseer licencia de adquisición y cultivo, según exponen los responsables de la investigación, que interpusieron la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil. «Al formar parte de un proyecto, podemos reconocer genéticamente las plantas que se han llevado», advierte Tierno, que cree que la persona o personas que cometieron el hurto sabían perfectamente dónde iban. «Se han hecho visitas organizadas a la finca y suponemos que quien lo haya hecho ha venido expresamente a por estos arándanos», indica la gerente de la Agrupación.
El robo es un delito sobre la propiedad industrial y los agentes ya han comenzado su investigación.
Ahora, la intención es que el proyecto continúe avanzando, pero el robo va a afectar a las conclusiones que se obtengan. «Las mediciones no van a ser tan exactas», detalla Tierno, que lamenta que este suceso vaya a poner en peligro un ensayo que se hace para favorecer la economía de la comarca y hacer más rentables las explotaciones de los agricultores. Además, gracias a estas iniciativas se consiguen avances científicos que favorecen la introducción de nuevos cultivos.
TITULO: CAFE GIJON - MANZANAS VERDES - Europa no es sexy ,.
CAFE GIJON,.
Café Gijón - foto,.
MANZANAS VERDES - Europa no es sexy ,.
MANZANAS
VERDES - Europa no es sexy, fotos .
Europa no es sexy
En las tres décadas largas que llevamos en la UE los españoles hemos pasado de ser los primeros fans de Europa a dejarnos contagiar por el escepticismo que empapa la Unión. Los nacionalismos rampantes aprovechan la fatiga de materiales que sin duda sufre la UE para presentarse como la solución mágica a todos nuestros problemas frente a los desacreditados burócratas de Bruselas. Y no lo son.
Con su más de medio siglo a cuestas, la Unión Europea sigue siendo una historia de éxito. Y el pasaporte color granate que nos distingue como ciudadanos de la Unión es uno de los documentos más deseados del mundo. Muchos europeos no lo valoran, pero millones de refugiados y emigrantes matarían por poseer uno. Ellos sí saben que en Europa se vive mejor que en sus países de origen y que en la inmensa mayoría de los países del mundo. Y el éxito de la UE ha tenido mucho que ver.
Extremadura es una de las regiones en que se aprecian más las ventajas de pertenecer a la UE. Buena parte de las infraestructuras que disfrutamos no existirían sin la contribución de los fondos europeos: autovías, centros de salud, polideportivos, casas de cultura... Sin las aportaciones de la PAC el campo extremeño viviría incomparablemente peor y el fenómeno de despoblación que sufre hubiera sido mucho más acelerado.
El paraguas de Europa alivió los daños del huracán de la crisis económica, que fue muy dura, pero que en España hubiera sido mucho más dramática si no hubiéramos contado con los mecanismos de ayuda del Banco Europeo. Las instituciones europeas han tratado en estos meses de campaña y precampaña de publicitar las bondades de la Unión. Los responsables de comunicación admiten que les preocupa que los jóvenes no valoren la idea de Europa; que crean erróneamente que los derechos y las libertades que nos garantiza pertenecer a este espacio siempre han estado ahí y que siempre estarán ahí. Peor aún, que piensen que no hay que mover un dedo para defenderlas. Les preocupa que esa falta de aprecio les lleve a coquetear con los populismos y nacionalismos de todo pelaje y, a la postre, la UE decaiga por el desafecto de sus ciudadanos.
Hay miedo al contagio del 'brexit', a que el malestar que aqueja a una parte de los europeos se encauce hacia esos populismos que prometen soluciones fáciles a problemas complejos.
Esa UE cargada de burocracia, reglamentos y directivas de obligado cumplimiento ya no resulta atractiva para algunos sectores que ven aburrida la idea de Europa pero vibran con la mística del nacionalismo que, ese sí, empieza a resultar terriblemente sexy para sus seguidores. Mi pueblo, mi región, mis orígenes, mis tradiciones, mi ombligo son lo importante. Este es el sentimiento que ha empezado a calar de norte a sur y de este a oeste de una Europa en la que el 'brexit' que acaba de tumbar a Theresa May no ha sido una casualidad sino el síntoma de una enfermedad más grave.
No deja de ser paradójico que en un mundo globalizado, sin distancias físicas ni virtuales, triunfen quienes defienden levantar de nuevo fronteras entre países y regiones. Y si puede ser, más altas que las que se derribaron para construir la UE.
Hoy saldremos de casa e iremos a votar para elegir quién va a gobernar nuestros pueblos. Y está bien. Pero quizá también nos debería importar quién va a gobernar la Unión Europea en los próximos cinco años.
TITULO: LA AVENTURA DEL SABER TVE. Fundación Crecer Jugando,.
No hay comentarios:
Publicar un comentario