jueves, 22 de julio de 2021

Atención obras - Cine - Secun de la Rosa: "El cover habla de cómo los artistas somos un poco la mirada de quienes tenemos alrededor". Jueves -22- Julio,./ Detrás del instante - Glen o Glenda: el delirante debut del peor director de cine de la historia ,. / TARDE DE CINE CON - Actriz, madre y chef: así es Mónica Bardem, la hija más anónima de Pilar Bardem,. ,. / Historia de nuestro cine -Cine - Tacones Lejanos ,.Viernes-23- Julio,.

 

 TITULO: Atención obras - Cine -  Secun de la Rosa: "El cover habla de cómo los artistas somos un poco la mirada de quienes tenemos alrededor"   . Jueves- 22- Julio,,.

 

Atención Obras,.

Atención Obras'  - Secun de la Rosa: "El cover habla de cómo los artistas somos un poco la mirada de quienes tenemos alrededor",.

  • Jueves 22 de julio, a las 20:00 horas en La 2, fotos,.
  •  
  •  
  •  

    Secun de la Rosa: "El cover habla de cómo los artistas somos un poco la mirada de quienes tenemos alrededor"


Secun de la Rosa debuta como director de cine con El cover, un melodrama musical protagonizado por Àlex Monner y Marina Salas que se estrena en salas el 23 de julio

Secun de la Rosa durante el rodaje de 'El cover'. Foto: Tony Matey.
Secun de la Rosa durante el rodaje de 'El cover'. Foto: Tony Matey.

Secun de la Rosa (Barcelona, 1969) ha vivido mil y una situaciones a lo largo de su vida profesional. "A los artistas nos pasa de todo, como en botica. Cosas que van bien, mal, regular...", dice con ironía. "Y yo, que me gusta mucho leer biografías de actores, te diría que he pasado por mucho", subraya.

Ahora, el penúltimo giro en su vida es El cover, su primera película como director, que se estrena el 23 de julio en cines. Un trabajo que ha supuesto un esfuerzo gigantesco para De la Rosa a todos los niveles.

Àlex Monner y Marina Salas protagonizan la película.
Àlex Monner y Marina Salas protagonizan la película.

Entre otras cuestiones, este artista ha pasado por circunstancias como un rodaje partido en dos por el confinamiento, un reto técnico y humano ("del que he aprendido mucho", admite) y hasta pasar el Covid con complicaciones ("tuve mucha gente positiva a mi lado cuando ingresé en el hospital por el Covid. Hubo momentos que lo pasé mal y me sentía débil"). Y todo, para al final conseguir su sueño de mostrar al público una historia "dedicada a los héroes de guerrilla como son todos esos músicos que se buscan la vida".

EL ACTOR DEL 'MÁTAME CAMIÓN'

Secun de la Rosa ha hecho series (Paquita Salas, 30 monedas), películas (El otro lado de la cama. El bar, Pieles), así como infinidad de obras de teatro y cortos. Entre otros, su gran éxito fue ser "el Toni el de Aída. Nos lo inventamos para un capítulo de 2005 y no hay gay de Chueca que no haya dicho alguna vez lo de 'mátame camión'". A raíz de aquel papel, este intérprete barcelonés volvió a participar en películas y proyectos teatrales algo más modestos que la famosa serie de Telecinco pero muy satisfactorios para él. "Ahí agradecí volver a ser Secun y que no me dijeran Toni tanto por la calle".

Imagen promocional de la película.
Imagen promocional de la película.

Con El Cover, Secun de la Rosa ha convertido Benidorm, su bares y hoteles, en escenarios para una historia en la que dos jóvenes artistas (interpretados por Àlex Monner y Marina Salas) viven una emocionante historia de amor mientras se buscan la vida actuando para turistas en hoteles y salas. Al mismo tiempo que el espectador contempla los sueños, fracasos y pequeños éxitos de estos dos cantantes, suenan éxitos musicales de artistas tan heterogéneos como Amy Winehouse, Shirley Bassey, Lady Gaga, Manuel Alejandro o Caco Senante. Como secundarios aparecen Carolina Yuste, Lander Otaola, María Hervás, Susi Sánchez, Juan Diego y Carmen Machi.

OBJETIVO CONSEGUIDO

"Desde siempre he querido dirigir", indica Secun con respecto a cuándo empezó a fraguar la idea de rodar El cover en Benidorm. "Siempre he buscado estar cerca del público y contar historias, aunque fuera desde mi faceta como actor. Ahora que he rodado mi primera película como director quería contar cómo alguien intenta salir adelante.El cover habla de cómo los artistas somos un poco la mirada de quienes tenemos alrededor".

Secun de la Rosa junto a Juan Diego y Marina Salas.
Secun de la Rosa junto a Juan Diego y Marina Salas.

Sobre los personajes de El cover, Secun de la Rosa explica que son "imperfectos y se equivocan mucho. Y, aunque haya quedado una película muy luminosa, también cuento lo que sufre un artista por vocación". Dentro de esos momentos de altibajos que vive cualquier artista habría que destacar dos secuencias en las que varios personajes alertan sobre los peligros de la intolerancia y de que alguien te llame maricón o lindezas parecidas.

"Esos dos momentos eran más largos y los tuve que recortar por cuestiones que tienen que ver con la pandemia. Pero sí quería que el personaje de Jorge Calvo dijera 'antes me insultaban por artista. Y ahora por artista y maricón'", recuerda De la Rosa, que explica de manera muy su intención a la hora de colocar en la historias esos dos pequeños actos de valentía: "Es una pena que los tiempos vayan para atrás y ahora las libertades sean más complicadas que antes, cuando podía haber más ignorancia o miedos".

 

  • TITULO:  Detrás del instante  -  Glen o Glenda: el delirante debut del peor director de cine de la historia ,.

     

  • Miércoles -21- Julio a las 20:00 horas en La 2 / foto,.

     

    Glen o Glenda: el delirante debut del peor director de cine de la historia,.


Un presupuesto pírrico, un guión sin sentido, cuatro días de rodaje y Ed Wood delante y detrás de las cámaras. El resultado es espantoso e irresistible como un jersey de angora

Fotograma de Glen o Glenda.
Fotograma de Glen o Glenda.

  • Street Fighter Kylie Minogue, turismo sexual y 10 gramos de coca al día para Van Damme: por qué es la peor película de los 90

Hay películas que, de tan malas, dan la vuelta y se convierten en obras maestras. No es habitual y puede que los cinéfilos más puristas lo vean como una aberración, pero ¿a quién le importa? A Ed Wood desde luego que no. El entusiasmo contagioso del conocido como «peor director de todos los tiempos», inmortalizado por Tim Burton y Johnny Depp en 1994, podía con todo: con los presupuestos ínfimos, con la escasez de tiempo, con la lógica narrativa y, sobre todo, con el buen gusto.

Glen o Glenda, su debut detrás de la cámara, figura en un lugar de honor en la antología de las peores películas de la historia. Pero, ¿y si en el fondo fuera la autobiografía más honesta, vanguardista y transgresora de la era dorada del Hollywood clásico? Quizá no sea el mejor ejemplo de logro artístico, pero su visionado nunca se olvida, aunque sea por las razones equivocadas.

George Weiss, productor de tres al cuarto especializado en películas de serie Z, quería explotar el gran revuelo mediático generado por el caso de Christine Jorgensen, la primera persona en someterse a una cirugía exitosa de reasignación de sexo combinada con un tratamiento de hormonas. El tema le preocupaba tanto como el cambio climático a Donald Trump: lo único que quería era dinero fácil y rápido. Y Ed Wood, que llevaba desde mediados de los años 40 pululando por distintos estudios de Los Ángeles haciendo todo tipo de trabajos menores, vio la oportunidad de aprovechar la historia de Jorgensen para debutar tras las cámaras y, de paso, revelar su pasión por travestirse. Bajo el pseudónimo de Daniel Davis, él mismo sería el protagonista de la película, junto con Delores Fuller, su novia por aquel entonces, que más tarde se dedicaría a escribir hits para Elvis Presley. Pero esa es otra historia...

El guión, escrito en tres días, y el rodaje, realizado en cuatro intensas jornadas -las segundas tomas son de cobardes- hacen de la narración una sucesión de muñecas rusas que convierten cualquier sueño de David Lynch en un juego para niños. Es el tipo de película con el que uno tiene la sensación de que se ha quedado dormido durante unos minutos, aunque no haya podido apartar los ojos de la pantalla porque no da crédito a lo que está sucediendo.

Por suerte (o por desgracia), hay un omnipresente narrador que se encarga de explicarlo todo con didácticas alocuciones: «Dele a este hombre ropa interior de satén, un vestido, un jersey y una falda, y será el individuo más feliz del mundo. Puede trabajar mejor, pensar mejor, jugar mejor y ser más digno de su comunidad y de su gobierno porque es feliz». Así, la película acaba entendiéndose como un sincero y encendido alegato a favor de la tolerancia y la libertad sexual, en un tiempo en el que hablar de travestis y transexuales era algo más que un desafío a las convenciones sociales. Era un suicidio artístico y comercial en toda regla.

«Para hacer esta película sobre un extraño asunto no nos anduvimos con tapujos ni optamos por el camino fácil [...]. Esta película es realista y objetiva. Presenta los hechos tal como son hoy en día. Sois la sociedad. No juzguéis», se puede leer tras los títulos de crédito, justo antes de que aparezca el mismísimo Béla Lugosi encarnando a un personaje mitad científico loco, mitad demiurgo todopoderoso, que controla desde su laboratorio repleto de calaveras y humeantes tubos de ensayo a los infelices humanos. «¡Manejo los hilos! ¡Manejo los hilos!», repite Lugosi al borde de la apoplejía con su característico acento húngaro.

Así se nos presenta a Glen, un americano medio con cierta propensión a contemplar con mirada de deseo los escaparates de las tiendas de moda femenina y a vestirse con ropa de mujer, algo que le oculta a su prometida, Barbara. «Glen es un travesti, pero no es homosexual», aclara la voz en off. Ella tiene el cerebro de un mosquito y dice cosas como «¡aquí estamos, dos personas perfectamente normales a punto de casarse y llevar una vida normal juntos!». No sospecha lo obvio: el cariño que siente Glen por ella tiene más que ver con su jersey de angora que con su inteligencia.

Más allá de los diálogos absurdos y los decorados de baratillo, lo que convierte Glen o Glenda y el resto de la filmografía de Ed Wood en todo un festival lisérgico es el uso indiscriminado de material de archivo para rellenar huecos y ampliar el metraje. Del cine le gustaba todo, hasta los andares, y por eso aprovechaba cualquier recorte de celuloide que encontrara, por extraño o inadecuado que pudiera parecer. Imágenes de soldados en plena Segunda Guerra Mundial, una toma submarina de un pulpo moviendo los tentáculos, una estampida de bisontes, el denso tráfico de una autopista, rayos y centellas... Esos planos repetidos una y otra vez y personajes secundarios diciendo cosas aparentemente aleatorias como «toda nuestra existencia es un gran problema tras otro» o «solo tenemos una vida para vivir, si la echamos a perder, ¿qué nos queda?», hacen de Glen o Glenda lo más parecido a una película experimental entre los estrenos de 1953 en Estados Unidos.

Por si faltaba algo de carnaza y para llegar a los 70 minutos de duración, George Weiss decidió que en mitad de la película era necesario introducir una larguísima secuencia onírica con diferentes hombres y mujeres ligeros de ropa, flagelándose, atándose y repartiendo placer propio y ajeno al más puro estilo BDSM. Un delirio surreal de porno softcore al que Dalí y Buñuel se habrían sumado sin rechistar. La guinda del pastel para una película que es como un accidente de tráfico: grotescamente fascinante.

  •  

     

     TITULO:  TARDE DE CINE CON -Actriz, madre y chef: así es Mónica Bardem, la hija más anónima de Pilar Bardem,.

     

    Actriz, madre y chef: así es Mónica Bardem, la hija más anónima de Pilar Bardem,.


fotos / La miembro más desconocida de la familia de artistas lleva una vida discreta junto a su marido y su hijo, aunque ha hecho sus trabajos en el cine y ha intentado probar suerte en realities como Masterchef.

Mónica Bardem en una imagen de 2010
Mónica Bardem en una imagen de 2010E.M.
  • Actores La vivienda cerca del Retiro de Pilar Bardem y sus apuros económicos
  • Carlos Bardem más famoso por su activismo contra la derecha que por su trabajo

No hay duda de que la sangre que corre por la saga Bardem está impregnada con el gusanillo del cine. Juan Antonio Bardem es uno de los nombres más importantes que existen en la cultura audiovisual española. El de su hermana, Pilar Bardem, tampoco se queda atrás y siempre será recordada por la extensa filmografía que lleva a sus espaldas, en la que cuenta con títulos como Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto (Agustín Díaz Yanes, 1995) o Carne trémula(Pedro Almodóvar, 1997). Lamentablemente, la actriz fallecía este 17 de julio a los 82 años en la Clínica Ruber de Madrid.

Su legado, aparte de sus películas, son sus hijos: Carlos, Mónica y Javier. Los nombres del pequeño y del mayor son de sobra conocidos. Carlos Bardem ha hecho carrera en el cine y, sobre todo, en la literatura, mientras que Javier Bardem es uno de nuestros actores internacionales más exitosos. ¿Y qué pasa con Mónica?

La hija mediana de Pilar Bardem lleva una vida más discreta que la de sus dos hermanos. En 2008 se casó con su pareja, Alfonso González Mazarrón, un empresario dedicado a la hostelería en Madrid. Lo hizo en una ceremonia civil que tuvo lugar en una localización privilegiada de la Comunidad, La Casa de la Panadería, un edificio de la Plaza Mayor que data del s.XVII. A la boda asistió el hijo que tienen ambos en común, Pablo, que nació en 1999 y tuvo el honor de ser el primer nieto de Pilar Bardem.

La actriz Pilar Bardem con sus tres hijos, Mónica, Javier y Carlos
La actriz Pilar Bardem con sus tres hijos, Mónica, Javier y CarlosArchivo Pilar BardemE.M.

Su vida laboral ha estado centrada en los negocios, sobre todo en lo referente al que fuera su restaurante, La Bardemcilla, un local que fundó junto a Javier y que logró convertirse en uno de los más famosos del barrio de Chueca. El restaurante gozó de buenos años de salud económica, pero en 2013 se vieron obligados a cerrar, lo que supuso un episodio de lo más polémico para la familia por la forma en la que se gestionó.

Y es que se hizo mediante un ERE que sólo pagaba a sus empleados 20 días por año trabajado, algo contra lo que Javier y Carlos se habían manifestado públicamente cuando esta medida entró en vigor en la reforma laboral. Finalmente, la familia pidió perdón en un comunicado y aseguró que había sido únicamente Mónica la que había tomado esa decisión por recomendación de un abogado. Se retractaron y pagaron los 35 días por año trabajado.

No todo fue negativo en esta experiencia, ya que también le dio la oportunidad de escribir su libro Pimientos rojos rellenos y otros cuentos de cocina, en el que Mónica Bardem relata algunas de sus memorias familiares a la par que da algunas de sus recetas de cocina, como la de sus famosas croquetas.

También aprovechó su experiencia como chef para presentarse al talent show de TVE, MasterChef, pero no logró el delantal de concursante. Sí que llegó al último casting del programa, pero el jurado descartó su participación en pro de otros que habían elaborado mejores platos, algo que ella acató con deportividad. "Me hacía mucha ilusión continuar, pero es un veredicto justo. El resto de los compañeros han sido superiores", lamentó.

Como buena Bardem, también ha probado suerte en el mundo del cine y, de hecho, se ha dejado ver en varias producciones, como El joven Picasso, un documental de su tío, Juan Antonio Bardem; Boca a Boca, un filme protagonizado por su hermano Javier y su madre; o Más que amor, frenesí; película dirigida por Miguel Bardem, su primo e hijo del famoso cineasta.

Lejos del apellido Bardem, hemos podido verla en Kika (Pedro Almodóvar, 1993), Cuernos de mujer (Enrique Urbizu, 1995) o en la serie de TVE Villarriba y Villabajo en 1994.

Sí que es cierto que su filmografía contrasta con la de sus hermanos. Carlos cuenta con más de 70 apariciones en la pequeña y gran pantalla, donde destacan títulos como Celda 211, Alacrán enamorado o La Zona. Las dos primeras, le valieron una nominación al Goya. También ha hecho gran carrera como literato, con éxitos como Mongo Blanco, una novela sobre la esclavitud en el siglo XIX. Su obra más reciente es El asesino inconformista, una novela protagonizada por un antihéroe atrapado en una sociedad marcada por la inmoralidad y la corrupción.

Pilar Bardem y sus tres hijos en 1998
Pilar Bardem y sus tres hijos en 1998,.

Javier Bardem, no obstante, es el más conocido de los tres. En España demostró su valía con títulos como Mar adentro, mientras que ha hecho fama mundial gracias a su galardonada interpretación en No es país para viejos. Su nombre está relacionado con blockbusters como el del universo James Bond, Skyfall, del de Piratas del Caribe en La Venganza de Salazar o bajo las órdenes privilegiadas de Ridley Scott en El Consejero o Darren Aronofsky en Madre! Dentro de poco, le podremos ver dando vida al padre de Ariel en La sirenita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario