-foto--ELSA PATAKY: Mi carrera ya no es prioritaria, pero no lo vivo como una renuncia,.
Vive en una granja en Australia, tiene tres hijos de
anuncio y un marido "superhéroe". Y con Women'Secret nos demuestra que
está tan sexy como siempre. ¿es perfecta o sólo lo parece?
Porque en cuestión de rankings de belleza, Elsa Pataky apenas ha perdido posiciones. A punto de cumplir 40, en la encuesta de Personality Media sobre los españoles más atractivos, sale en tercera posición. Genética aparte, lo consigue con ejercicio y buena alimentación. Dan ganas de preguntarle si no hay algo más, pero no parece la mejor forma de comenzar esta entrevista.
Mujerhoy. Las imágenes que vemos de su vida resultan envidiables: un marido con éxito, tres hijos preciosos, usted está estupenda y feliz... ¿Es todo tan idílico como parece?
Elsa Pataky. Sé que soy una persona afortunada y tengo muchos motivos para estar satisfecha con la vida que tengo. Además, soy una mujer muy positiva y me gusta proyectar una imagen optimista. No se trata de ir contando por ahí los problemas que tienes pero, obviamente, como en todas las familias, en la mía también hay días buenos y malos, contratiempos, dudas...
MH. Cuando era muy joven, ya decía que quería ser madre. ¿Es como lo imaginaba?
EP. ¡Qué va! Nadie te cuenta lo que realmente supone y, aunque lo hicieran, tampoco sería lo mismo. Disfrutas muchísimo, pero también hay momentos difíciles, muy duros. Son tres personas que dependen de ti y eso supone una responsabilidad tremenda, a veces agotadora pero también maravillosa.
MH. ¿Le compensa haber dejado de lado el cine?
EP. Cada momento tiene sus cosas y hay que saber disfrutarlas. Y yo ahora soy plenamente feliz ejerciendo de madre. Por suerte, he hecho infinidad de cosas antes. Mi carrera ya no es mi prioridad, pero yo no lo veo como una renuncia, sino como un disfrute. Mis hijos son muy pequeños, me necesitan y no quiero perderme estos años.
MH. ¿No le preocupa que cuando quiera volver ya no sea posible reconducir su carrera?
EP. Mentiría si dijera que es algo que no me preocupa. Cuando mis hijos no me necesiten tanto como ahora, ya veré lo que hago. Me encanta mi profesión y quiero seguir haciendo cosas como actriz, pero el mundo no se acaba ahí. De hecho, me encuentro trabajando en mi plan B. Está en marcha la idea de un segundo libro, más centrado en la vida sana y el bienestar; pronto empezaremos con el rodaje de la octava entrega de 'Fast & Furious', y además tengo proyectos de producción que, de momento, no puedo desvelar...
MH. Da la impresión de que las cosas no han cambiado tanto y que las mujeres siguen renunciando a más cosas por los hijos que los hombres.
EP. Es cierto. Ellos también adoran a sus hijos, pero si no los ven durante unos días no tienen ese sentimiento de culpa que yo no puedo evitar. Hay mujeres a las que tampoco les afecta tanto, pero yo soy como soy.
MH. Tal vez el hecho de que sus padres se divorciaran cuando tenía cuatro años le haya marcado especialmente.
EP. Seguro. Yo era una niña cuando mis padres se separaron y fue muy duro. He sufrido mucho por ese tema y no quiero que mis hijos pasen por lo mismo que yo. Cuando me casé, lo hice convencida de que era para toda la vida y con la firme intención de formar una familia fuerte y unida.
MH. Además, en su caso la custodia la tenía su padre y no pudo vivir con su madre hasta que fue adolescente y pudo decidir.
EP. Sí, son esas cosas que hacen los jueces... Mi madre era rumana y no tenía estabilidad económica. La relación que tenía con mi padre era buena, pero yo la veía poco. Lo pasé mal, pero después hemos podido recuperar el tiempo y estamos muy unidas. Ahora me ayuda muchísimo con los niños, les adora.
MH. ¿La afición por la interpretación le viene de su abuelo materno?
EP. Sí. Le veía muy poco porque el régimen de Ceausescu no les permitía salir mucho de Rumanía, pero él trabajaba en teatro y lo amaba. Siempre estaba recitando e imitando voces diferentes y a mí me encantaba. Y, aunque estudié Periodismo, siempre tuve claro que lo que me gustaba era actuar. Recuerdo la primera obra en la que participé, yo debía de tener unos 18 años y mi abuelo vino a verme. Su opinión era fundamental para mí y al finalizar me dijo: "Bueno, tienes mucho que aprender, pero veo algo...". Luego, unas cosas le gustaban y otras no tanto, pero yo siempre le preguntaba [murió hace unos meses]. Sus comentarios eran los que más me importaban.
MH. ¿Está satisfecha con su carrera?
EP. Estoy razonablemente satisfecha. He hecho 33 películas, unas buenas y otras malas, y me he ganado la vida con ellas. Chris tiene que aprovechar su momento y yo, centrarme en la familia, y no pasa nada.
MH. Es madre de tres hijos, está a punto de cumplir los 40 y sigue siendo un sex symbol. ¿Cómo vive eso?
EP. Yo me siento muy bien. Obviamente, ya estoy en otra fase y no tengo esa presión mediática, pero la edad está en cómo te sientas física y mentalmente. Se puede ser muy sexy a los 40. ¿No cree que a las mujeres se les exige demasiado? Completamente. Y, especialmente en Hollywood, la presión es brutal. Lo primero que hacen es mirar los años que tienes y enseguida te tachan de la lista por la edad, sin tener en cuenta si tu físico te permite o no interpretar ese papel. Proyecta una imagen de mujer sexy, pero parece pudorosa... Me gusta transmitir una imagen sexy, pero más sensual que otra cosa. Nunca he sido muy radical en este sentido. La verdad es que, para mí, proyectar esa imagen sensual es como interpretar un personaje: realmente, estoy actuando.
MH. Incluso puede parecer un poco distante, es difícil conocerla.
EP. Sí, es cierto que trato de no exponerme demasiado y de preservar mi intimidad. No me importa hablar con naturalidad de mi familia o de determinadas cosas, pero hasta cierto punto. Soy activa en Instagram, me gusta hacer fotos y las comparto porque es una manera sencilla y bonita de comunicar determinadas cosas, pero no tengo Twitter ni Facebook.
MH. ¿Es también una forma de proteger a sus hijos?
EP. Por supuesto. No quiero que vivan su vida como "hijos de". Quiero que disfruten de la naturaleza y que sean personas sencillas y felices. Entre otras cosas, por esa razón nos hemos mudado a Australia, allí vivimos en medio de la nada, ¡y puedo tirarme días sin mirar el teléfono móvil!
MH. ¿Está al tanto de lo que ocurre en su país, España?
EP. Siempre intento saber lo que pasa a mi alrededor, pero también trato de vivir mi vida. Solo me involucro con las causas que conozco muy bien, como es el caso de Oceana, la organización internacional que lucha por proteger los océanos. Además, políticamente no tengo una postura muy marcada y prefiero no posicionarme porque sí.
- Otros registros
Pero ahora la actriz también ha aceptado el reto de cantar. "Cuando me lo propusieron, pensé: ¿cantar yo? Pero al final dimos con el tema adecuado, un poco rockero. Estoy todo el día ensayando, incluso cuando llevo a mi hija India al colegio. ¡Hasta ella se ha aprendido la canción!".
TÍTULO: 7 DIAS CITAS - EL LEJANO OESTE CAPILAR,.
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- El peor amigo de nuestro pelo ha llegado: el otoño.
Yo me creo Clint Eastwood desenfundando mi pistola, mientras los clientes de la cantina de bebidas me miran agazapados en los ventanales. Todos hemos pensado alguna vez que si pasa un día más de otoño abrazaremos la calvicie. Hay duchas en las que recoges más pelos de los que creías tener. Menos mal que los expertos nos tranquilizan con eso de que el "efluvio telógeno" estacional, que es el nombre técnico del asunto, es un proceso natural.
Como todos los años, pasará y nuestro pelo volverá a nacer. Hay una expresión popular muy cierta que dice: "Guapa, guapa no es, pero tiene un pelazo". Existe mucha belleza por los pelos. Literalmente. Yo siempre he envidiado a la gente con pelazo, que es una palabra finísima. Hay cabelleras que provocarían que el mismísimo Sansón se girase.
Se puede tener pelo sano, con volumen, aparente; pero no, yo hablo de melenas identitarias, rotundas, aseguradas, como la de Jennifer Aniston. Al menos, los que no tenemos pelazo podemos echarle la culpa al otoño.
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