lunes, 13 de abril de 2020

MAS QUE COCHES - La DGT instala en los cruces señales que avisan de la llegada de vehículos,. / Para Todos La 2 - Bichos Raros acoge a animales con alguna discapacidad ,. / Gigantes de La 2 - Jesús García Bragado ,. Jueves -16- Abril ,./ ¡ Atención obras ! - La furia española,.

TITULO: MAS QUE COCHES - La DGT instala en los cruces señales que avisan de la llegada de vehículos,.


La DGT instala en los cruces señales que avisan de la llegada de vehículos,.

Señal activa que se ilumina. /  foto,.
Señal activa que se ilumina. / DGT

El 62% de los accidentes con víctimas ocurren en carreteras convencionales y el 32% de ellos en las intersecciones,.


En un futuro no muy lejano, cuando todos los vehículos estén intercomunicados, el conductor que circule por una carretera principal sabrá que un coche en las proximidades está esperando para incorporarse, pero mientras eso llega la DGT ha elaborado un sistema pionero en España.
Se plasmó en la Instrucción 20/TV-110, del pasado 28 de febrero. En la misma se considera que el número de muertos y heridos se podría reducir entre el 40 y 55% teniendo en cuenta que el 62% de los accidentes con víctimas en zonas interurbanas se producen en carreteras convencionales, y de ellos el 32% en las intersecciones.
El sistema instala señales activas con sensores de detección de vehículos, tanto en la vía principal como en los ramales, detectando la presencia del vehículo que se aproxima a la vía principal desde la secundaria. Entonces en la vía principal la señal de cruce se ilumina y aparece el texto: VEHÍCULO EN CRUCE. Estas letras destacan porque son 228 led, en ámbar o en rojo, debajo de la señal triangular de cruce, la cual está integrada en un panel rectangular con focos led en sus cuatro esquinas que parpadean para llamar la atención del conductor, advirtiéndole que en el ramal hay un vehículo que pretende incorporarse a la vía principal.
En la instrucción se contemplan todo tipo de intersecciones: ramales en T directa, semidirecta, con carril de espera central, doble asimétrica, de cuatro ramales sin carril de espera (típico cruce en X), e incluso glorieta partida.
La fuente de energía puede ser una acometida eléctrica, paneles fotovoltaicos y siempre una batería que permita funcionar al sistema durante cuatro horas cinco días seguidos.

     TITULO: Para Todos La 2 -Bichos Raros acoge a animales con alguna discapacidad ,.


Resultat d'imatges de para todos la 2Bichos Raros acoge a animales con alguna discapacidad,.

foto / ¿Dónde están y adónde van los animales de compañía que padecen alguna discapacidad? Reportaje con una asociación que se ocupa de eso, de darles cobijo y cuidados. Se llama Bichos Raros. La labor que desempeñan sus creadoras, Macu y María junto con una red de voluntarios, nos demuestra que su singular "patrulla canina" a pesar de ir en silla de ruedas es, además de un ejemplo de supervivencia, todo un canto a la vida.



TITULO:   Gigantes de La 2 -  Jesús García Bragado  ,.  Jueves -16- Abril ,.

 

Gigantes de La 2 - Programa de entrevistas, de cincuenta minutos de duración y emisión semanal, para La 2  Jueves -16- Abril ,.  - 23:50 de Televisión Española. Presentado por Mari Cruz Soriano,.

 Jesús García Bragado,.

García Bragado: «A estas alturas no influye demasiado tener 50 o 51 años»,.

Jesús García Bragado, durante una competición. /EFE
foto / Jesús García Bragado, durante una competición.

El marchador madrileño afronta con optimismo el aplazamiento de sus octavos Juegos, los últimos para él: «Me va a permitir llegar más entero y poder hacer un calendario normal»,.


En el momento en que Estados Unidos se plantó, federaciones de atletismo y natación mediante, Jesús Ángel García Bragado ya supo que no despediría su carrera con 50 años. El mejor marchador español de la historia tendrá que esperar otros doce meses para colgar las zapatillas en sus octavos Juegos Olímpicos, todo un récord en el 'deporte rey'. La imparable expansión global del coronavirus lo ha convertido en inevitable: Tokio 2021 es una realidad después de que el Comité Olímpico Internacional (COI) haya tenido que lidiar con las autoridades japonesas y los contratos televisivos para minimizar el impacto del aplazamiento en las arcas de Lausana.
Para 'Chuso', el único superviviente español de Barcelona'92, el aplazamiento es prácticamente una buena noticia. Parece increíble cuando, en teoría, el tiempo debería correr en su contra, pero es cierto. «A determinadas alturas no es realmente importante. Tener 50 o tener 51 no creo que influya demasiado si uno se cuida», asegura confinado en su casa de Sant Adrià. Y es que la prórroga olímpica le permitirá recuperarse por completo de las molestias que aún acarrea de su agonística gesta en el Mundial de Doha (su decimotercer campeonato), donde fue octavo con 31º y un 72% de humedad. «Le digo al Comité Técnico que me ha venido como mano de santo entrenar en la cinta que me ha conseguido la Federación Española (RFEA), porque el impacto a nivel muscular y tendinoso es menor. Cuando podamos hacer entrenamientos normales ya voy a tener todas estas molestias resueltas», señala 'el hombre de mármol'.
«Mirando en positivo, esto me va a permitir llegar a los Juegos mucho más entero y poder hacer un calendario competitivo más normal, de otra manera habría tenido que reducirlo mucho para no arriesgar», explica García Bragado, que aprendió la lección de ser conservador en el anterior año olímpico. Sin embargo, al principio, como al resto de atletas, el cambio de fecha de Tokio le contrarió: «Contaba los meses que quedaban. Estaba siendo duro, pero pensaba: mira, no falta ni un año. Cuando ya ves que esto es así tienes que resetearte y adaptarte a las circunstancias». Camaleónico. No hay otra manera de mantenerse en la élite de la marcha atlética durante casi 30 años, desde su décimo puesto en Barcelona'92 y el oro mundial en Stuttgart el verano siguiente hasta la octava plaza en Doha que le asegura estar en Tokio 2021. Habrá disputado unos Juegos en cuatro décadas distintas.
No tanto como la fecha, al marchador madrileño le preocupa el lugar de su despedida. «Si nos llevan a Sapporo (como iban a hacer en 2020 y así parece ser que harán en 2021) no perjudicaría tanto a los que se adapten peor al calor. Esa circunstancia a mí me permitió en Doha, al prepararme bien para un calor extremo, estar compitiendo con chavales muchísimo más jóvenes que yo», recuerda. Y es que en el Mundial entró justo delante del ucraniano Maryan Zakalnytskyy, vigente campeón de Europa en 50km, al que dobla la edad. «Yo ya no voy a pensar en estar entre los diez primeros del ranking por marcas, pero sí por resultados. En cierta manera, me perjudica Sapporo».

Incógnita en la preparación

También le perjudica, como al resto de atletas españoles, el desajuste económico que la pandemia creará en la Federación y que amenaza con trastocar la hoja de ruta hacia los Juegos. «Si hubieran sido en 2020 teníamos una idea de cómo prepararlos. Supongo que sirve para el año que viene, pero habrá que ver los recursos que tenemos. Todo parece indicar que no van a ser los mismos, hemos de hacernos a la idea», asume el cuádruple medallista mundial. «Entiendo que se mantendrán los convenios que la RFEA tenía con algunas prefecturas de Japón para ir a entrenar, pero habría que ver si hay recursos para viajar hasta allí. Si no, tendremos que adaptarnos a entrenar aquí en algún lugar con mucho calor y mucha humedad, como puede ser el delta del Ebro», deja entrever.
La veteranía es un grado, y a García Bragado le permite analizar con frialdad sus opciones en sus octavos Juegos. «Cuando vas a tus primeros tienes más responsabilidad, más presión. Lo que antes era hablar de una medalla ahora es hacer un buen puesto, no fracasar», expone el madrileño. «En una prueba de 50km pueden pasar muchas cosas: una indigestión, que no te encuentres bien, calambres… Hay que evitar retirarse y luego, técnicamente, no tener problemas con los jueces». Todo con el objetivo de poner punto final a su legendaria carrera con buen sabor de boca: «Acabar retirándome o descalificado sería muy triste».
Los 50km marcha también se despiden en Sapporo,.
De la mano de Jesús Ángel García Bragado, el escenario de sus gestas se despide también del calendario en Tokio 2021, aunque todo hace indicar que será en Sapporo y no en la capital, como ya se había previsto para 2020. Los 50km, que en los Juegos solo se disputan en categoría masculina, dejarán de formar parte del programa olímpico para dar paso a una nueva distancia, entre 30 y 35 kilómetros que también será femenina, ya a partir de París 2024. «Como ahora hay tantos deportes y los Juegos duran 15 días hay eventos como los 50km, que duran cuatro horas, que difícilmente tienen espacio», explica 'Chuso'. «¿Qué pretende el Comité Olímpico Internacional? Que los eventos duren entre dos horas y dos horas y media, y la única solución es cambiar la distancia para adaptarse», añade.
En la práctica, la supresión de los 50km del programa olímpico supone que la prueba desaparezca del calendario internacional. «No tendría sentido que hubiera competiciones de 50km y luego en los Juegos fueran de 35km, por eso la distancia va a quedar extinguida después de Tokio», señala el marchador más longevo de cuantos participarán en Japón. A sus compañeros más jóvenes, en todo caso, les favorece el menor kilometraje: «Entiendo que a los españoles les va a beneficiar el cambio. También a las mujeres. Los que están a buen nivel internacional sobre todo compiten en 20km, por eso una prueba que esté más cerca les viene mejor. Subir de 20 a 50km es un cambio muy brusco a nivel energético, de entrenamiento y de enfoque». Miguel Ángel López es campeón mundial y europeo de 20km, Álvaro Martín es el vigente campeón continental, igual que María Pérez, y Diego García Carrera el subcampeón.


 TITULO: ¡ Atención obras !- La furia española,.


La furia española,.

Pessoa o el sosiego luso en una escultura del museo Delta Café. / E. R.
Pessoa o el sosiego luso en una escultura del museo Delta Café./ foto,.

El sosiego luso. En Portugal, opusieron la buena educación a la violencia de los años 20,.


Solemos argumentar que lo que más nos gusta de Portugal es la tranquilidad y la buena educación. «Es como España hace 40 años», comparamos sin despreciar, sabiendo que, al otro lado de la raya, están, en lo fundamental, tan desarrollados como nosotros.
A veces, una caravana de nómadas portugueses entra en Badajoz sin haberse enterado de que hay una pandemia, pero ese dato no deja de ser una curiosidad que no permite categorizar, parecida a aquellas fotos sacadas de contexto de españoles rebuscando en la basura que se publicaban en la prensa norteamericana durante la recesión de 2008 y empujaban a los simples a pensar que todos los españoles bajábamos cada tarde al contenedor para sobrevivir.
Cuando razonamos que el Portugal de hoy parece la España de hace 40 años nos referimos a la buena educación, al sosiego, al ritmo pausado y, en fin, a una lentitud que nos puede exasperar a la hora de enlazar el AVE con Lisboa, pero nos reconforta si nuestro ideal de vida es la armonía, el equilibrio y la falta de estrés y acritud.
Dicen los portugueses que, en cuestión de ritmo de vida, una cosa es el Alentejo y otra muy distinta Lisboa, Oporto o Braga. Sí, es cierto que en esas grandes ciudades se vive con más estrés, pero también allí triunfa la buena educación, el formalismo, la falta de acritud y un espíritu de unidad que, efectivamente, caracterizaba a la sociedad española de hace 40 años.
En estos días de pandemia y desazón, la actitud política de lealtad, colaboración y apoyo al Gobierno de la oposición política portuguesa ha sido muy alabada y puesta en España como ejemplo. Ya hace un lustro, cuando diferentes partidos de la izquierda portuguesa conformaron un gobierno que parecía imposible, saltó la sorpresa y primó la colaboración.
Algunos argumentan que en Portugal nunca ha habido una guerra civil y eso ha facilitado las buenas formas políticas. Sin embargo, allí también vivieron en la primera mitad del siglo XX un periodo convulso y violento. No llegó al nivel de la Guerra Civil española, pero en 1908 era asesinado en las calles de Lisboa el príncipe heredero del trono portugués. Tras la revolución republicana de 1910, hubo entre 1915 y 1920 más de 1.500 muertos por enfrentamientos políticos. En la «noche sangrienta» ( 20-21 de octubre de 1921), un camión de la muerte con guardias recorrió Lisboa secuestrando incluso al presidente del Gobierno, Antonio Granjo, siendo torturados y ejecutados por los GNR los viajeros del siniestro camión. Este ambiente desembocó en la revuelta militar de 1926 y en el Estado Novo, la dictadura, en 1928.
A partir de ese momento y por contraste con la violencia agria del primer tercio del siglo XX, hubo un refuerzo en Portugal del culto a las buenas formas y maneras. Fue una reacción que entronizó la buena educación como esencia de la convivencia política. Hasta la dictadura de Salazar, temible y terrible como todas, supo disfrazarse de paternalismo educado y cuando el pueblo portugués se revolvió contra ella, articuló una revolución de claveles que también tenía su punto amable.
En España, la transición democrática y el recuerdo de la violencia de la Guerra Civil y del dolor amargo de la dictadura nos empujaron también a las buenas formas políticas sustanciadas en dos palabras: consenso y pacto. La diferencia es que en Portugal mantienen la dignidad, el disentimiento educado y la elegancia política incluso en los peores momentos: cuando fueron rescatados por Europa y cuando azota la pandemia. En España, a mediados de los 90, el consenso fue sustituido por la furia y en esas estamos: furiosos.

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