TITULO: Comando
actualidad -¿Tu contraseña es '111111' 0 'mierda'? Pues ojo porque es vulnerable , Jueves - 18, 25 - Noviembre .
¿Tu contraseña es '111111' 0 'mierda'? Pues ojo porque es vulnerable , - Jueves - 18, 25 - Noviembre , 23.40 - después de ‘Néboa’, en La 1 / foto,.
¿Tu contraseña es '111111' 0 'mierda'? Pues ojo porque es vulnerable,.
Un repaso a los errores que normalmente cometemos al crear contraseñas,.
La empresa responsable de la suite de seguridad en Internet SafetyDetectives ha recogido más 18,4 millones de contraseñas en foros que están disponibles en la dark web para analizar cuáles son las más filtradas. De estas últimas, casi 460.000 procedían de residentes en España, lo que pone en evidencia que todavía tenemos problemas para crear contraseñas seguras. Según este estudio de las contraseñas encontradas en la web oscura procedentes de España, conviene cambiar cualquier contraseña que tenga números iguales (como '111111'), números seguidos ('123456789'), nombres de equipos de fútbol ('realmadrid'), combinaciones de teclas situadas seguidas en el ordenador, etc. Utilizar una clave con una seguridad débil como estas mencionadas puede traer problemas. Estos son los principales errores que cometemos al generar una contraseña.
Usar una palabra que tenga algún significado para el usuario
Fechas de nacimiento, aniversarios, los nombre de los hijos o de la propia persona, número de DNI, ciudad de residencia… Sin duda son mucho más fáciles de recordar, pero suele ser información fácil de encontrar en Internet y están entre las primeras opciones que probarán los delincuentes (además de las veinte combinaciones más comunes que enumeramos en el reportaje).
Utilizar una clave corta para que sea fácil de recordar
También son mucho más fáciles de piratear que las largas. Proteger el móvil con un código como '0000' o '1111' es un error porque son las primeras combinaciones que probarán los delincuentes.
Usar expresiones o palabras habituales
Nombres de equipos de futbol ('realmadrid' está entre las más vulnerables), de ciudades ('barcelona'), expresiones malsonantes ('mierda'), nombres propios ('alejandro'), expresiones de afecto ('tequiero'), están entre las más problemáticas.
Emplear solo letras o solo números
Las contraseñas que combinan letras, números y algún carácter especial no alfanumérico (porcentaje, guion bajo…) son mucho más seguras. Alguien que quiera averiguar una contraseña tardará muchísimo más tiempo en descifrar una que sea, por ejemplo, 'edr%209!Af' que otra como 'CamisetA' o 'password' que, por cierto, es la segunda contraseña más utilizada del mundo.
No cambiar las contraseñas nunca
Si uno de los sitios en los que nos hemos registrado es atacado de forma que las claves quedan al descubierto y no la cambiamos, la información seguirá siendo accesible para los delincuentes. Para saber si se han filtrado las contraseñas se puede consultar el portal Have I Been Pwned. Cuando una plataforma o página anuncie que ha sufrido un ataque es el momento de cambiar la contraseña y también es recomendable realizarlo con cierta periodicidad (no con demasiada frecuencia) y, al hacerlo, que el cambio sea completo y no consista en modificar simplemente uno o dos caracteres o números.
Usar la disposición de las teclas para crear una combinación fácil de recordar
Es uno de los errores más importantes detectados en la investigación de SafetyDetectives: utilizar un orden ascendente de números, las teclas del teclado de izquierda a derecha, a la inversa o en diagonal: 'zaq12wsx', por ejemplo, está en el puesto dieciocho de las contraseñas más utilizadas en el mundo y '123123' está en el décimo. Esto quiere decir que es mala idea usar en un teclado de ordenador '123qweasd' o en un teclado numérico como el del cajero del banco claves tales como '1379' o '2580'.
Utilizar la misma contraseña en todas partes
Es una práctica muy habitual, y uno de los errores más peligrosos. Si utilizamos la misma combinación en varios accesos, en caso de que alguien entre a la información de una cuenta, tendrá las claves para entrar en todas las cuentas de esa persona.
Apuntarlas en papel y dejarlas a la vista
De nada sirve haberse creado una clave como '34ga!Ju?34rF' si luego, para recordarla, se escribe en una nota que se deja pegada a la pantalla o en un cuaderno junto al ordenador, a la vista de cualquiera. No hay más que recordar cuando hace unos años el ministro de interior griego Nikolaos Toskas publicó una foto en la que se veía un 'post-it' en el que se leía la contraseña para acceder a su ordenador. Para rematar el despropósito, esta clave era '123456', es decir, la más utilizada en todo el mundo.
Guardar las contraseñas en un archivo en el mismo ordenador
Si la contraseña es larga y compleja pero luego se guarda en un documento de texto dentro del PC, está expuesta. Si no es posible almacenar esa información en otro sitio, lo recomendable es utilizar un gestor de contraseñas para recordar esas decenas de contraseñas. Hay versiones de pago y gratuitas, pero siempre hay que recurrir a uno que provenga de una fuente oficial y con garantías y del que existan numerosas opiniones positivas, ya que también hay gestores de contraseñas que buscan robar las claves en lugar de protegerlas.
Permitir que la contraseña se guarde en el navegador
Sin duda, así no habrá que recordarla, lo que nos facilita las gestiones. Pero esta práctica tan habitual encierra el peligro obvio: si otra persona utiliza ese mismo ordenador tendrá acceso a las contraseñas y sabrá a qué página o servicio está asociada, de modo que podrá operar.
TITULO: MasterChef Celebrity 6 - Verónica Forqué vuelve...para despedirse de MasterChef ,.
El lunes -22, 29 - Noviembre a las 22:10 horas en La 1, foto,.
Verónica Forqué vuelve...para despedirse de MasterChef,.
- Incógnita resuelta, la actriz pone punto final a su aventura gastronómica,.
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"¿Qué sabemos de la Vero?" Con esta pregunta de Miki arrancó la semifinal de MasterChef Celebrity 6. Era la gran incógnita. Tras el audio que Verónica Forqué le mandó a Pepe el programa anterior, todo el mundo se hacía la misma pregunta. ¿Había abandonado? ¿Era sólo un parón para descansar? Resolvemos la duda. La actriz regresó a las cocinas, con delantal blanco incluido, pero su vuelta fue solo para despedirse.
Ante la atenta mirada de compañeros y jueces, Verónica Forqué volvió a las cocinas, pero rápidamente dejó claro que su intención era colgar el delantal y despedirse del programa. “Estoy feliz de veros. ¿No ha sido una gran sorpresa?”, afirmó Vero antes de fundirse en un abrazo con sus compañeros. A pesar de su felicidad, confesó que necesitaba más descanso: “Estoy regular, necesito descansar. En el último exterior terminé agotada. No soy de tirar la toalla, pero esta vez voy a tirar un poco el delantal”.
En ese momento, Pepe Rodríguez, su gurú, le recordó lo que significa colgar el delantal: “Si lo entregas es que renuncias a seguir en el concurso”. Pero la actriz no tuvo dudas: “Lo sé. Pero hay que ser coherente y humilde. Y si no puedo mas no puedo más. Mi cuerpo y el universo me estaban pidiendo parar”. Ante esta afirmación, Pepe solo pudo decir que los jueces y el programa “respetaban su decisión”. El mensaje bomba había llegado: Verónica Forqué abandonaba definitivamente MasterChef.
Apoyo total de los compañeros
Después de escuchar la confesión de Verónica, los compañeros no dudaron en mostrarle su apoyo, su comprensión y todo su amor. Miki fue el primero en hablar: “Te hemos echado de menos porque hemos compartido muchas cosas contigo”. Juanma Castaño, con su humor habitual, se preocupó por el descanso de Vero: “No hagas esfuerzos, tranquila. Recupérate”. Belén y Bustamante no fueron menos y también mandaron un mensaje a su compañera. “Gracias por todos los momentos que nos has regalado”.
Carmina, con su sinceridad y cariño habitual, se dirigió también a Forqué: “Has sido un poco porculera, pero yo te quiero porque eres muy bondadosa”. Pero la frase que resume el paso de Vero por el programa la dijo Miki: “Esta edición de MasterChef Celebrity se recordará como la edición de Verónica Forqué”.
“Te quiero, chef”
Antes de marcharse, Verónica aseguró que para ella MasterChef Celebrity ha sido “la experiencia más emocionante, intensa, divertida y rara de mi vida. Hablé demasiado, pero me fui centrando. Os quiero mucho a todos”. Pero la actriz, por encima de todos, dejó un mensaje para su maestro: “Conocer a Pepe ha sido una de las cosas más bonitas del programa. Te quiero, chef”. Como no podía ser de otra manera, el juez de Illescas le devolvió el piropo: “Nos vemos en la final, en la Plaza de las cadenas o donde tú quieras”.
Con todas sus anécdotas, buenas y no tan buenas, es imposible no querer a Verónica Forqué. El mundo se merece más personas transparentes como ella. ¡Te queremos, Vero!,.
TITULO: EN PORTADA CRONICAS MUJERES VIAJERAS - ¿Ruido excesivo? Así se evitan los zumbidos y la pérdida auditiva . Jueves -18, 25- Noviembre ,.
El Jueves - 18, 25- Noviembre ,., a las 23:30 en La 2,./ foto.
¿Ruido excesivo? Así se evitan los zumbidos y la pérdida auditiva,.
Si hay un traumatismo auditivo, la clave es actuar rápido,.
Hay que ver (y oír) cómo la vida puede cambiar en un segundo. Un disparo cercano, un petardo demasiado cerca de la oreja, una explosión inesperada, un concierto donde se les va la mano... y, ¡zas!, nuestro oído, una de nuestras mejores herramientas para sobrevivir en esta jungla que es el mundo y que nos permite disfrutar de la música, de la voz de quienes nos rodean -ay, esas palabras queridas que nos salvan la vida- o del sonido de la naturaleza, se queda tocado para siempre. ¿Para siempre no es mucho tiempo? Sí, se hace largo. Pues es lo que duran, en muchas ocasiones, las consecuencias de un traumatismo auditivo, de un momento de exceso sonoro que nuestro oído no ha podido soportar.
«Al producirse, por ejemplo, una explosión, se mueve el tímpano (a veces se rompe o lesiona), el sonido se transmite al oído interno y a la cóclea... y las células nerviosas pueden quedar dañadas», explica Iñigo Ucelay, otorrinolaringólogo del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ). Es decir, la cadena de huesecillos se estremece y llegan a producirse daños en el sistema nervioso que, en muchos casos, son permanentes. «Esto ocurre si nos exponemos a sonidos muy fuertes, de unos 120 decibelios o más, durante un corto espacio de tiempo. Pero también si estamos trabajando ocho horas diarias a 80 decibelios... o a 90 durante cuatro horas. Claro, a mayor intensidad, en menos tiempo se daña el oído», explica. De ahí que en determinados trabajos sea preceptivo el uso de protecciones. «Tareas de forja, procesos industriales con golpeos constantes... En estos casos se ve una pérdida progresiva de audición, pero de modo selectivo, en una frecuencia», pone como ejemplo.
¿Qué ocurre cuando ya se ha producido el daño? Pues que el cuerpo, que tiene cierta plasticidad, intenta reparar el problema, pero en ocasiones no lo consigue y los efectos del traumatismo auditivo son permanentes. Sobre todo en gente joven es más fácil que se arregle solo, pero, si sabemos o tenemos la sospecha de que hemos sufrido un traumatismo auditivo, lo mejor es acudir a un especialista que valore el alcance de los daños y se ponga manos a la obra para arreglar el desaguisado antes de que ya no tenga remedio. ¿Se puede? «Muchas veces sí», anima Ucelay. Estas son algunas de las claves que debemos conocer para evitar que los efectos negativos de un ruido fuerte se queden con nosotros para siempre.
Cuidado si la genética o tu historial no ayudan
Aunque hay tablas muy precisas donde se recoge qué niveles de ruido afectan al oído y de qué manera, cada cuerpo es un mundo y unos oídos tienen más aguante y mayor capacidad de regenerarse. «Por ello, la gente que es proclive genéticamente a tener problemas auditivos o que sufre con frecuencia problemas de oído que se lo han podido dejar debilitado deben extremar las precauciones para no exponerse a ruidos intensos», apunta Ucelay. Un oído sensibilizado es un oído que va a acusar mucho un ruido excesivo.
Ojo con escuchar música con cascos a todas horas
Parece un mito, la típica frase de abuela de '¡te vas a quedar sordo por estar todos los días con los cascos!'. Pero no, tiene fundamento y es la causa de muchos oídos sensibilizados que, de sufrir un traumatismo, van a quedar tocados. «El uso de cascos es un problema real. Hay que darse cuenta de que llevamos el sonido encerrado en el oído y a ver a qué volumen... No es lo mismo que estar expuesto a un altavoz al aire libre, desde luego. Por eso, estamos viendo muchos casos de personas que presentan pequeños traumatismos en el oído por su uso continuado», detalla Ucelay. Si a una de estas personas, explica, le da por cazar -la posición del arma junto a la oreja cuando se produce el disparo es fatal para el oído- o tiene la mala suerte de que le explota al lado un elemento de pirotecnia, el traumatismo auditivo está servido. Su oído, ya delicado por las microlesiones, no soporta la sobrecarga... ni posiblemente la autorreparación.
Estar atentos a los cambios tras oír un ruido fuerte
¿Cómo podemos saber si hemos sufrido un traumatismo auditivo? Hay ocasiones en las que sabemos que hemos estado expuestos a un ruido brutal, pero no conocemos las consecuencias reales. En ocasiones se puede producir un dolor agudo, pero puede no ocurrir. Entonces, debemos estar atentos a la aparición de dos síntomas muy claros: si empezamos a oír zumbidos o si creemos que oímos menos que antes, debemos acudir de inmediato a un otorrino que revise el tímpano y realice una audiometría. Lo de ir rápido también suena a alarmismo..., pero no, «es que en muchos casos, no en todos, si se coge a tiempo tiene remedio», insiste Iñigo Ucelay.
Tratamiento con fármacos para revertir el daño
«Si acudimos al otorrino horas o días después del traumatismo, podemos usar corticoides y vasodilatadores para revertir el daño», indica el especialista. En muchos casos, el tratamiento surte efecto y el oído se recupera. «Pero, si tenemos una lesión de más de un mes y no vemos mejoría, hay que hacer un seguimiento», apunta. Aviso a navegantes: si el traumatismo ya es irreversible, debemos mentalizarnos de que tendremos que acudir al otorrino de por vida. «A veces tienes un zumbido o has perdido la audición en unas frecuencias y te va a más y pierdes en otras», advierte.
Los límites
La Organización Mundial de la Salud considera que exponerse a más de 70 decibelios durante un periodo de tiempo prolongado puede producir daños graves en el oído con consecuencias que pueden llegar a ser irreversibles. Estos son algunos de los ruidos que pueden causar traumatismos y sus decibelios.
Moto De 74 a 104 decibelios
Conciertos, música con cascos a volumen máximo De 80 a 110 decibelios. Ya estamos en zona peligrosa.
Eventos deportivos En torno a 100 decibelios
Sirenas Más de 110 decibelios
Umbral del dolor 120 decibelios
Martillo neumático De 130 decibelios
Pirotecnia De 140 a 160 decibelios.
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