TITULO:
Cena con mamá - Jorge Fernández . , Viernes -3- julio ,.
Viernes -3- Julio a las 22:00 en La 1, foto,.
Jorge Fernández,.
Jorge Fernández: «La ruleta no se puede hacer sin público»,.
Se ha quedado sin vacaciones para grabar nuevas entregas de 'La ruleta de la suerte', que viene de hacer su mejor temporada,.
–¿Cómo ha afectado la situación actual a las grabaciones?
–Siempre afecta, pero yo estoy intentando sacar todo lo positivo que se puede. En nuestro programa todo fluye, y hemos tenido que cortar muchas alas a la manera de hacerlo.
–¿Qué es lo que más le ha costado?
–No moverme de mi sitio. Soy un presentador al que le gusta ir donde el público, los concursantes, darles un abrazo… Me gusta que haya contacto, y ahora, para respetar las distancias, tengo que estar en mi sitio todo el rato. Nuestro plató tiene mucho público, y al haber menos, se nota que falta un poco de ese ánimo que siempre se dice de la gente que viene al programa.
–Prefirieron no grabar a hacerlo sin público. ¿'La ruleta' sin público no es 'La ruleta'?
–Claro. Se estuvo meditando, y parecía que íbamos a grabar sin público, pero luego se echaron para atrás. Yo creo que con buen criterio. Hay programas que se pueden hacer sin público, pero 'La ruleta' no es uno de ellos.
–Con programas repetidos ha conseguido 3 minutos de oro. ¿Se llegó a plantear si era necesario grabar más?
–Es justo lo que no me quería plantear, porque yo quería volver a grabar (risas). Es una pasada que tu programa haga el minuto de oro, y más siendo al mediodía, ganando al 'prime time'. Eso te da la certeza de la fortaleza y del músculo que tiene este programa, que incluso sigue en forma con entregas repetidas, pero por otro lado, dices: 'A ver si ahora no voy a hacer más programas'. Pero es en plan cachondeo, porque es inviable. Había que grabar más programas y lo hemos hecho en cuanto hemos podido.
–De hecho, acaba de firmar su mejor temporada histórica.
–Aunque parezca que no, año tras año, e incluso programa tras programa, siempre estamos intentando, dentro de lo que nos permite el formato, que es bastante sota, caballo y rey, dar una vuelta de tuerca para que no sea igual. Intentamos poner nuestro granito de arena para que no se convierta en un programa monótono, oxidado… y que parezca uno actual. Y creo que lo conseguimos. Es un programa al que va a costar mucho matar, por parte de cualquier cadena. Estamos más fuertes que nunca.
–¿Le ha dado las gracias Sandra Golpe alguna vez?
–Sí, sí (risas). Sandra y yo nos vemos mucho en la cafetería, a primera hora de la mañana, y me lo dice, sí. Nos llevamos muy bien, y yo creo que hacemos un tándem perfecto, con un programa de entretenimiento que lo deja en un 22% de cuota muchas veces, y luego llega el informativo, que es la parte más importante de la cadena. Hay programas que arrancan con un buen arrastre del anterior, y que van cayendo, pero no es el caso. Lo elevan más todavía.
–En el programa del jueves dijo que todavía no se había tomado una cerveza en una terraza. ¿Lo ha hecho ya?
–La verdad es que todavía no (risas). En el programa tengo muy poquito tiempo para explicar mis cositas entre panel y panel, pero le he dado mucha más importancia a hacer deporte, a meterme al mar, a salir con la bici… que a la cervecita, que, personalmente, me da igual.
–¿Hay algo que todavía se le haya quedado en el tintero?
–Lo que más, lo de dar un abrazo. Se me hace un poco raro todavía eso, y veo que va para largo y que tenemos que acostumbrarnos. Luego, es verdad que sin querer decides no hacer algunas cosas, como ir a restaurantes, aunque creo que hay que empezar a hacerlo, para levantar un poco la economía, que hay gente que lo está pasando muy mal.
TITULO: Imprescindibles' estrena en La 2 -Arianna Varone, promesa del fútbol italiano, muere en un accidente ,. . Domingo -5- Julio ,.
Domingo -5- Julio a las 21:30 horas en La 2, foto,.
Arianna Varone, promesa del fútbol italiano, muere en un accidente,.
La jugadora del Riozesse circulaba en moto cuando impactó contra un camión. Tenía 21 años,.
«Soy una jugadora de encuentro, me gusta jugar limpio con la pelota, inspirándome en la agresividad de Gennaro Gattuso y la delicadeza de Andrés Iniesta», expresó en alguna entrevista. «Era una futbolista con un futuro prometedor», afirmó la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) tras conocerse el triste suceso. Según la prensa italiana, la joven circulaba en moto cuando, por causas que se desconocen, perdió el control del vehículo e impactó contra un camión. La futbolista falleció unos minutos después debido a la brutalidad del impacto.
Hace poco más de un año Arianna Varone subía a sus redes sociales una fotografía sosteniendo la Coppa Italia que ganó con su club en el torneo de fútbol femenino de la serie C italiana, uno de los logros de su carrera. La jugadora se encontraba en la serie B y se caracterizaba por ser una «centrocampista con grandes perspectivas, mediocampista de buen pie e infatigable recuperadora de pelotas», tal y como la describió La Gazzetta dello Sport. Apuntaba muy alta y estaba ya en la órbita de los grandes clubes de su país.
«Lamentamos la muerte prematura de una chica muy joven. Dejará un vacío insalvable en la vida de las personas que la amaron y que tuvieron la suerte de estar con ella», ha expresado Ludovica Mantovani, presidente de la sección de fútbol femenino de la de la federación italiana.
TITULO:
De seda y hierro - El actor que adora las sobremesas sin fin ,. Domingo -5-Julio ,.
El Domingo -5- Julio a las 20:20 por La 2, foto,.
El actor que adora las sobremesas sin fin,.
Con 25 años de tablas, el intérprete aún se sobrecoge cuando se enfrenta a la cuarta pared. Disfruta de la paternidad y de las comidas con amigos. Las papelerías le procuran el mayor de los placeres,.Con apenas 20 años, Fele Martínez (Alicante, 1975) logró lo que a otros le cuesta toda una vida alcanzar y a casi todos los mortales está vedado: ganar un Goya al mejor actor revelación. Gracias a Alejandro Amenábar, que descubrió en él todas sus cualidades para dar vida al personaje de 'Tesis', tocó la cumbre. Más de dos décadas después el intérprete se ha hecho un hueco en los hogares españoles dando vida a personajes de afamadas series, como 'Estoy vivo' o 'La unidad'. Sus éxitos no le impiden sentir segundos antes de salir a escena el miedo escénico, el temor de dar la cara ante el público. Solo dura un suspiro, pero son momentos pavorosos. Ahora toda su mente está volcada en aprenderse el papel en una obra de Moliere con la que concurrirá al Festival de Teatro de Mérida. Hecho ya todo un cuarentón, nunca se imaginó que cuidar de su hijo iba a ser su ocupación favorita.
Lunes
7.45
horas. Lo primero que hago nada más despertarme es poner la radio y
hacerme un café para espabilarme. Preparo el desayuno, que para mí es un
puro trámite. Me ducho y voy al local de ensayos. Estoy absorbido de
lleno con 'El Anfitrión', un divertido enredo creado hace siglos por
Plauto y que Moliere reescribió después. Juan Carlos Rubio es el
encargado de este montaje que se estrena en Festival Internacional de
Teatro Clásico de Mérida.
15.30 horas. Preparo la comida. Me gusta la cocina siempre que lo haga con calma y disponga de tiempo. Mi chica dice que soy muy lento cocinando, y tiene razón. Me lo tomo con filosofía, cocinar es un ritual, no es un expediente que hay que despachar rápido. No sé si lo verán así los invitados que esperan para comer. Adoro ir de restaurantes. Una de las cosas con la que más disfruto es juntarme con unos cuantos amigos, comer y pasar una larguísima sobremesa. Es algo que me produce mucha felicidad.
21.30 horas. Hubo un tiempo en que me gustaba escribir diarios, pero ya hace bastante que lo dejé. Si me surge alguna idea la anoto, pero carezco de la disciplina para ponerme a escribir algo en serio. Soy un gran escritor de principios, de principios que luego no desarrollo.
Martes
9.50 horas. Suelo llegar media hora antes a los ensayos para calentar. El pánico escénico no se supera nunca. El primer día del estreno me lo replanteo todo, no es que tenga ganas de salir huyendo, pero sí me pregunto: «¿Por qué me habré metido en esto?» Los cinco minutos previos a que se enciendan las luces son aterradores. Pero luego ya te olvidas de todo y disfrutas a tope. En el teatro se invierte mucho esfuerzo, pero nunca se convierte en un sacrificio. Por eso es algo parecido a hacer el amor.
18.00 horas. Tengo una extraña fijación por las libretas y los cuadernos, quizá porque justo debajo de mi casa en Alicante había una papelería. Cuando era pequeño me encantaba ir cada vez que empezaba el curso y pertrecharme de las cosas que me hacían falta. Ya de adulto visitar una papelería es uno de mis pequeños placeres. Muchas veces no compro nada, pero me gusta mirar a ver qué chorraditas nuevas tienen.
Miércoles
17.15 horas. Ahora mi única ocupación es memorizar, memorizar y memorizar. La memoria es el músculo que más he trabajado. Desde hace 25 años lo llevo ejercitando y no se me da mal. Mi punto débil es el despiste. Los textos aprendidos enseguida desaparecen, porque el cerebro es sabio y cuando le metes muchísima información la desecha al cabo del tiempo. Con todo, a veces voy por la calle y me sale de manera natural la réplica de una obra que he trabajado con mucha intensidad a lo largo de dos años, por ejemplo.
18.45 horas. Lo que más me entretiene ahora mismo es estar con mi hijo. No me imaginaba la paternidad tal y como es. Está siendo mucho mejor la realidad que la ficción. Mi ideal de felicidad es viajar con Elena, mi chica, y el enano, que en septiembre cumple tres años. Esta tarde me voy con el peque porque mi chica tiene que trabajar. Pasearemos o jugaremos a lo que se tercie. A las nueve y media lo mando a la cama; me dedico entonces a repasar y adelantar trabajo, si es que no me quedo frito también.
Jueves
12.10 horas. En este momento me lavo mucho las manos con gel hidroalcohólico, soy incapaz de prescindir de ese hábito. Con las medidas preventivas contra el Covid, los ensayos son muy raros. Hay que mantener las distancias, aunque llega un punto en el que evitar cierto contacto físico es imposible. No obstante, da reparo y cierto pudorcillo acercarse.
17.50 horas. Tenemos un grupo musical y yo me encargo de aporrear el bajo. Ahora nos llamamos Supersudadas. Llevamos mucho tiempo sin tocar, pero es que nos resulta imposible reunirnos porque todos tenemos mucha plancha. Tocamos de todo, cosas de Iggy Pop, Nirvana, The Cure, los Beatles... Últimamente escucho poca música, salvo cuando estoy en la calle, donde me pongo los cascos. A veces nos montamos ciertos bailoteos con el peque.
19.00 horas. Para relajarme hago muchas cosas: monto en bici, salgo al campo, juego al mus. Como no soy especialista en nada, pruebo cosas distintas. Espero empezar pronto a ir otra vez al gimnasio, pero con tanto estudio y ensayo hoy por hoy es una misión imposible. La verdad es que no sé si ahora está abierto. Hago algo de dieta. He de cuidarme porque con la pandemia me he pasado, ha habido una explosión de colores.
Viernes
15.30 horas. No me cuesta nada ahorrarme la siesta, pero si llego a casa y el enano está durmiendo, dormito unos veinte minutos.
17.00 horas. Ya no lo hago, pero hubo un tiempo en que gustaba coleccionar las tarjetas que sirven de llave de los hoteles.
23.00 horas. Cuando está la casa tranquila y todos duermen, me pongo alguna serie que no me requiera realizar un gran esfuerzo intelectual. Busco algo que me entre por los ojos y ya está. Si estoy cansado cierro los párpados, apago la tele y me quedo dormido.
15.30 horas. Preparo la comida. Me gusta la cocina siempre que lo haga con calma y disponga de tiempo. Mi chica dice que soy muy lento cocinando, y tiene razón. Me lo tomo con filosofía, cocinar es un ritual, no es un expediente que hay que despachar rápido. No sé si lo verán así los invitados que esperan para comer. Adoro ir de restaurantes. Una de las cosas con la que más disfruto es juntarme con unos cuantos amigos, comer y pasar una larguísima sobremesa. Es algo que me produce mucha felicidad.
21.30 horas. Hubo un tiempo en que me gustaba escribir diarios, pero ya hace bastante que lo dejé. Si me surge alguna idea la anoto, pero carezco de la disciplina para ponerme a escribir algo en serio. Soy un gran escritor de principios, de principios que luego no desarrollo.
Martes
9.50 horas. Suelo llegar media hora antes a los ensayos para calentar. El pánico escénico no se supera nunca. El primer día del estreno me lo replanteo todo, no es que tenga ganas de salir huyendo, pero sí me pregunto: «¿Por qué me habré metido en esto?» Los cinco minutos previos a que se enciendan las luces son aterradores. Pero luego ya te olvidas de todo y disfrutas a tope. En el teatro se invierte mucho esfuerzo, pero nunca se convierte en un sacrificio. Por eso es algo parecido a hacer el amor.
18.00 horas. Tengo una extraña fijación por las libretas y los cuadernos, quizá porque justo debajo de mi casa en Alicante había una papelería. Cuando era pequeño me encantaba ir cada vez que empezaba el curso y pertrecharme de las cosas que me hacían falta. Ya de adulto visitar una papelería es uno de mis pequeños placeres. Muchas veces no compro nada, pero me gusta mirar a ver qué chorraditas nuevas tienen.
Miércoles
17.15 horas. Ahora mi única ocupación es memorizar, memorizar y memorizar. La memoria es el músculo que más he trabajado. Desde hace 25 años lo llevo ejercitando y no se me da mal. Mi punto débil es el despiste. Los textos aprendidos enseguida desaparecen, porque el cerebro es sabio y cuando le metes muchísima información la desecha al cabo del tiempo. Con todo, a veces voy por la calle y me sale de manera natural la réplica de una obra que he trabajado con mucha intensidad a lo largo de dos años, por ejemplo.
18.45 horas. Lo que más me entretiene ahora mismo es estar con mi hijo. No me imaginaba la paternidad tal y como es. Está siendo mucho mejor la realidad que la ficción. Mi ideal de felicidad es viajar con Elena, mi chica, y el enano, que en septiembre cumple tres años. Esta tarde me voy con el peque porque mi chica tiene que trabajar. Pasearemos o jugaremos a lo que se tercie. A las nueve y media lo mando a la cama; me dedico entonces a repasar y adelantar trabajo, si es que no me quedo frito también.
Jueves
12.10 horas. En este momento me lavo mucho las manos con gel hidroalcohólico, soy incapaz de prescindir de ese hábito. Con las medidas preventivas contra el Covid, los ensayos son muy raros. Hay que mantener las distancias, aunque llega un punto en el que evitar cierto contacto físico es imposible. No obstante, da reparo y cierto pudorcillo acercarse.
17.50 horas. Tenemos un grupo musical y yo me encargo de aporrear el bajo. Ahora nos llamamos Supersudadas. Llevamos mucho tiempo sin tocar, pero es que nos resulta imposible reunirnos porque todos tenemos mucha plancha. Tocamos de todo, cosas de Iggy Pop, Nirvana, The Cure, los Beatles... Últimamente escucho poca música, salvo cuando estoy en la calle, donde me pongo los cascos. A veces nos montamos ciertos bailoteos con el peque.
19.00 horas. Para relajarme hago muchas cosas: monto en bici, salgo al campo, juego al mus. Como no soy especialista en nada, pruebo cosas distintas. Espero empezar pronto a ir otra vez al gimnasio, pero con tanto estudio y ensayo hoy por hoy es una misión imposible. La verdad es que no sé si ahora está abierto. Hago algo de dieta. He de cuidarme porque con la pandemia me he pasado, ha habido una explosión de colores.
Viernes
15.30 horas. No me cuesta nada ahorrarme la siesta, pero si llego a casa y el enano está durmiendo, dormito unos veinte minutos.
17.00 horas. Ya no lo hago, pero hubo un tiempo en que gustaba coleccionar las tarjetas que sirven de llave de los hoteles.
23.00 horas. Cuando está la casa tranquila y todos duermen, me pongo alguna serie que no me requiera realizar un gran esfuerzo intelectual. Busco algo que me entre por los ojos y ya está. Si estoy cansado cierro los párpados, apago la tele y me quedo dormido.
TITULO:
Noche Sexo - Monica y el sexo -¿Cómo hablar de sexo con los hijos?,.
El viernes -3- Julio 0.40 / Cuatro, foto,.
¿Cómo hablar de sexo con los hijos?,.
La peor forma (y la más habitual) es «desde la vergüenza»,.
«Mi hija de 3 años se coloca el juguete entre las piernas»
«Un
juguete entre las piernas, el 'caballito' con papá... A muchos niños y
niñas pequeños les da una sensación placentera. Igual que con unos meses
se miraban embobados las manos descubriendo que tenían dedos que se
movían, con 2 años se tocan con los dedos la vulva, se frotan con un
juguete, se meten arena en la playa... Es una masturbación
insconsciente, obviamente no saben que están teniendo una práctica
autoerótica».– ¿Hay que decirles, como se suele hacer, que 'eso no se hace'?
– No. Hay que explicarles que igual que no hay que meterse arena en la boca, no hay que meterla por la vulva. En todo caso, en eso no hay más que un problema sanitario, por lo demás, es normal. La masturbación infantil existe, y no hay que cargar el área genital de connotaciones negativas. Nada de gritarles 'no te toques ahí' o 'eres un cochino'. Si le ves de manera reiterada con el juguete entre las piernas escóndeselo, prueba a distraerle con otro juego pero nada de 'no lo hagas'.
Eso, a ninguna edad. «A los 7 u 8 años muchos ya saben cómo darse placer. No te digo que se encierren en el baño, pero saben que si aprietan las piernas o si se tocan el pene notan una sensación que les resulta placentera. Entonces hay que hacerles ver que entendemos que les guste hacerlo, pero que de la misma manera que uno no hace pis delante de la gente, tampoco pueden hacer eso en público».
Con 10 o 11 años, prosigue el sexólogo, los niños deberían tener su espacio de privacidad. «Dicho así a muchos padres les parece una locura pero es lo ideal. Normalizarlo». En torno a esa edad sucede a veces también que la niña (o el niño) que ha andado siempre correteando desnuda por la casa, de repente dice que no quiere que su hermano la vea así, o su madre, o su padre. Le entra la vergüenza y como a veces es repentino, algunas familias se preocupan. «No hay que buscar causas raras, no le ha pasado nada en el colegio, simplemente no quiere que la vean desnuda y hay que respetarlo».
La primera relación sexual... con 11 o 12 años
Insisten
los sexólogos en que las relaciones sexuales van más allá del coito y
que es importante que los menores partan de esta base. «Con 11 o 12 años
empiezan a darse los primeros besos, una mano que se mueve... Sobre
eso, los padres no tienen capacidad de control. En este caso lo que
deben trasladar al niño o la niña es que deben hacerlo solo si les
apetece, sin presión. Que tiene que ser algo placentero y que no es
placentero que te obliguen a dar un beso a alguien». ¿Y eso se aborda
así sin más? «Se puede hacer viendo una película, por ejemplo. Le dices:
'Mira esa escena, ves que la chica no quiere ¿verdad? Pues eso no te
puede pasar a ti'».
«¿La penetración duele?»
Roberto
Sanz da charlas en institutos ante un público adolescente «ansioso por
follar». «Yo siempre les digo: 'No tengáis prisa, que os vais a hartar'.
Pero hoy con 13 años se intercambian fotos sexys y se supone que tienen
que haber hecho ya un montón de cosas. Y no es así». Aquí la tarea de los padres será ayudarles a sacudirse esa presión del grupo para que se inicien en las relaciones solo cuando les apetezca. «Hay una idea de que la primera penetración es dolorosa y sangras, así que suena casi a tortura y, sobre todo las chicas, van asustadas. Hay que explicarles que se sangra porque el himen se rompe pero no tiene terminaciones nerviosas, así que eso no duele. El dolor viene de que la musculatura se tensa y la vagina no se dilata y eso sí es molesto». La 'solución' no es mágica pero el consejo es tener la primera relación coital «cuando apetezca, que es la garantía de estar lubricada y de que no duela». Otra advertencia: «No debemos 'orientar' solo desde la perspectiva heterosexual» ni «meterles miedo». «No les atemorices con el sida, pero infórmales de que está ahí. El sida, la gonorrea... Que sepan que existe el condón».
'Juego de Tronos'... una serie para ver 'en familia'
Cuando
en las casas solo había una tele, las familias veían el mismo programa:
'Un, dos, tres', 'La Clave' o una serie en la que tarde o temprano los
protagonistas acababan en la cama. «Si tú ves que tu padre y tu madre se
revuelven en el sillón cuando salen escenas de sexo no es bueno. Porque
vas a asociar la sexualidad con la vergüenza». Bendita multipantalla,
han pensado muchos padres mientras veían 'Juego de Tronos'. «Es una
serie que han visto adultos y chavales. En muchas escenas aparecen
violaciones, prostitutas... y cantidad de padres han pensado en ese
momento: 'Esto lo está viendo mi hijo...'». Lo han visto sí, pero lo
importante, advierte Sanz, «es que entiendan que eso es ficción, igual
que lo es una película de zombies, que la sexualidad es otra cosa y que
se basa en el placer, en el cariño, no en que te obliguen a hacer cosas
que no deseas».
No hay comentarios:
Publicar un comentario