A falta de árboles.../ fotos
Proponen unos aspiradores para limpiar el aire en las ciudades
El diseñador holandés Daan Roosegaarde acaba de presentar en Róterdam su proyecto Smog Free,
que él mismo define como «el mayor aspirador de aire contaminado del
mundo». En colaboración con un grupo de expertos en tecnología iónica ha
desarrollado este aparato, que propone colocar en centros urbanos para
reciclar el aire y, además, con una estética integrada en el entorno. La
clave de la torre Smog Free es que produce burbujas de aire puro, sin
contaminar, al mismo tiempo que atrapa contaminantes. Con 7 metros de altura, emite 30.000 metros cúbicos de aire puro por hora,
para lo que gasta la misma electricidad que un hervidor de agua,
energía que además procede de fuentes renovables. Una vez a la semana,
el polvo y los contaminantes se recogen de las placas interiores de la
torre, donde quedan 'capturados'. No es la primera vez que este
diseñador y su equipo hacen innovadoras propuestas medioambientales. El
año pasado propusieron crear unos árboles con bacterias bioluminiscentes
que brillan en la oscuridad para sustituir a las farolas.
El proyecto se subvenciona a través de una campaña de crowdfunding en Kickstarter. Como recompensa, Roosegaarde ha creado piezas de joyería a partir de las partículas recogidas: el polvo de smog, compuesto de carbono, es comprimido y transformado en joyas.
TÍTULO: ENTREVISTA - Kevin Ashton, el padre del Internet de las cosas,.
Todo empezó con un problema de distribución en el trabajo de Kevin Ashton a mediados de los noventa. Como gerente de marca en una gran empresa en Londres, constató que una barra de labios que era un éxito de ventas no se reponía en las tiendas con la suficiente rapidez. Y pensó que por qué no le ponían un chip al labial para que él mismo pudiese pedir más unidades a la fábrica... Es decir, dotar de inteligencia a los objetos. Ashton planteó la idea de que los aparatos electrónicos que nos rodean dejen de ser cajas tontas que solo ejecutan órdenes dictadas por humanos y acuñó el concepto el Internet de las cosas. «No ser capaz de comprar tu tono favorito de lápiz de labios no es el fin del mundo, pero, cuando se habla del seguimiento de suministros médicos o de agua y electricidad, las cosas se vuelven importantes», explicaba. Sus planteamientos teóricos ya se han convertido en realidad. Él mismo se ha ocupado de ello, como investigador del MIT, adonde llegó en 2000, y al frente de varias start ups. Las máquinas toman decisiones por sí mismas. Desde objetos como ropa, electrodomésticos o coches... Incluso ciudades inteligentes que, asegura, serán más eficientes y sostenibles. Más de 3,8 millones de objetos están ya conectados a la nube; en 2020 serán 25.000 millones. Mientras tanto, Ashton ha escrito un libro, How to fly a horse, la historia de la creación, la invención y el descubrimiento, en el que hace un repaso de los grandes genios incluye a los accidentales que cambiaron el mundo. Todo un alegato para animar a pensar diferente.
Sabía que... Creó un falso perfil en Twitter Santiago Swallow, un supuesto tecnogurú mexicano que llegó a tener 85.000 seguidores y una entrada en Wikipedia. Quería demostrar que el éxito en las redes sociales no es un indicador fiable. Aunque ahora el perfil de Swallow tiene vida propia, como parodia.
Los tecno- gurús que vienen
Alejandro Campoy
Los nuevos asistentes virtuales. El director de Cortana para Microsoft en Europa y América Latina lidera la creación de los nuevos asistentes virtuales. Ya disponible en móviles, y pronto en Xbox One, se presenta como el mejor ayudante de voz, por su peculiar personalidad, la capacidad de acción y su inteligencia emocional. «Queríamos que fuese más allá de decir palabras, queríamos que solucionara la vida al usuario».
Kathleen Richardson
Promotora de la ética robótica. En un mundo en el que ya existen robots para mantener encuentros íntimos, esta especialista en ética ha iniciado una «campaña contra los robots sexuales», para concienciar de que no se los puede tratar de cualquier manera. Es la primera piedra para elaborar un código de comportamiento con respecto a estas máquinas, cada vez más humanos.
Aktarer Zaman
Viajes rentables con truco. Este joven de 22 años tiene a las aerolíneas encima por culpa de su plataforma Skiplagged. Lo innovador de esta web es que, en lugar de buscar el vuelo directo más barato, localiza escalas rentables. El viajero se baja donde le conviene y se olvida de terminar el resto del viaje.
El proyecto se subvenciona a través de una campaña de crowdfunding en Kickstarter. Como recompensa, Roosegaarde ha creado piezas de joyería a partir de las partículas recogidas: el polvo de smog, compuesto de carbono, es comprimido y transformado en joyas.
TÍTULO: ENTREVISTA - Kevin Ashton, el padre del Internet de las cosas,.
Kevin Ashton, el padre del Internet de las cosas
Este pionero de la tecnología fue el precursor de la conexión de los objetos a la red por sí mismos, sin mediación humana.
Todo empezó con un problema de distribución en el trabajo de Kevin Ashton a mediados de los noventa. Como gerente de marca en una gran empresa en Londres, constató que una barra de labios que era un éxito de ventas no se reponía en las tiendas con la suficiente rapidez. Y pensó que por qué no le ponían un chip al labial para que él mismo pudiese pedir más unidades a la fábrica... Es decir, dotar de inteligencia a los objetos. Ashton planteó la idea de que los aparatos electrónicos que nos rodean dejen de ser cajas tontas que solo ejecutan órdenes dictadas por humanos y acuñó el concepto el Internet de las cosas. «No ser capaz de comprar tu tono favorito de lápiz de labios no es el fin del mundo, pero, cuando se habla del seguimiento de suministros médicos o de agua y electricidad, las cosas se vuelven importantes», explicaba. Sus planteamientos teóricos ya se han convertido en realidad. Él mismo se ha ocupado de ello, como investigador del MIT, adonde llegó en 2000, y al frente de varias start ups. Las máquinas toman decisiones por sí mismas. Desde objetos como ropa, electrodomésticos o coches... Incluso ciudades inteligentes que, asegura, serán más eficientes y sostenibles. Más de 3,8 millones de objetos están ya conectados a la nube; en 2020 serán 25.000 millones. Mientras tanto, Ashton ha escrito un libro, How to fly a horse, la historia de la creación, la invención y el descubrimiento, en el que hace un repaso de los grandes genios incluye a los accidentales que cambiaron el mundo. Todo un alegato para animar a pensar diferente.
Sabía que... Creó un falso perfil en Twitter Santiago Swallow, un supuesto tecnogurú mexicano que llegó a tener 85.000 seguidores y una entrada en Wikipedia. Quería demostrar que el éxito en las redes sociales no es un indicador fiable. Aunque ahora el perfil de Swallow tiene vida propia, como parodia.
Los tecno- gurús que vienen
Alejandro Campoy
Los nuevos asistentes virtuales. El director de Cortana para Microsoft en Europa y América Latina lidera la creación de los nuevos asistentes virtuales. Ya disponible en móviles, y pronto en Xbox One, se presenta como el mejor ayudante de voz, por su peculiar personalidad, la capacidad de acción y su inteligencia emocional. «Queríamos que fuese más allá de decir palabras, queríamos que solucionara la vida al usuario».
Kathleen Richardson
Promotora de la ética robótica. En un mundo en el que ya existen robots para mantener encuentros íntimos, esta especialista en ética ha iniciado una «campaña contra los robots sexuales», para concienciar de que no se los puede tratar de cualquier manera. Es la primera piedra para elaborar un código de comportamiento con respecto a estas máquinas, cada vez más humanos.
Aktarer Zaman
Viajes rentables con truco. Este joven de 22 años tiene a las aerolíneas encima por culpa de su plataforma Skiplagged. Lo innovador de esta web es que, en lugar de buscar el vuelo directo más barato, localiza escalas rentables. El viajero se baja donde le conviene y se olvida de terminar el resto del viaje.
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