sábado, 20 de julio de 2024

MAS QUE COCHES - Alonso, positivo con las mejoras de Aston Martin ,. / Para Todos La 2 - Colegio rural - Escuela de pueblo ,. / Gigantes de La 2 - Mireya González ,. - Jueves - 8 - Agosto ,. / ¡ Atención obras ! - Cine - Epístolas petrinas,.

 

TITULO : MAS QUE COCHES - Alonso, positivo con las mejoras de Aston Martin,.

 

  Alonso, positivo con las mejoras de Aston Martin,.

 

 

Dan Fallows, director técnico de Aston Martin. F1 2024.

fotos / Dan Fallows, director técnico de Aston Martin. F1 2024.

El AMR24 estrena suelo y difusor en Hungría. “Queremos un coche más consistente que dé confianza a los pilotos”, dice Fallows, director técnico.

Más interrogantes en Aston Martin - AS.com

Parte del crédito de Dan Fallows como director técnico de Aston Martin pasa porque las evoluciones estrenadas este viernes en Hungaroring permitan repuntar al AMR24 después de un segundo cuarto de temporada más bien decepcionante. Alonso sumó 33 puntos en las primeras seis carreras de 2024 y solo 12 en las siguientes seis, ocho de ellos en una pista tan específica como Montreal. Y eso sin comparar el magnífico arranque de 2023 (seis podios en siete carreras) con el discreto final. El paquete aerodinámico de Ímola no resultó efectivo (llegaron a quitarlo en Mónaco, aunque regresó después), la fortaleza a una vuelta del Aston se ha disipado y ahora los rivales le meten la rueda en la zona más apretada de la parrilla.

En ese contexto, a Hungría llegan con un nuevo fondo plano, la pieza aerodinámica más relevante de esta F1, más retoques en el difusor. Los primeros comentarios en la pista no sonaron extremadamente positivos (“Buena suerte”, le recetó Fernando a Stroll por radio tras estrenar las piezas). Sin embargo, AS puede confirmar que el comentario estaba más relacionado con la configuración de alerón delantero que utilizó el español en el primer entrenamiento (que ya no montó en el segundo). La impresión del asturiano no es negativa. “Un viernes positivo, mirándolo todo. Hemos completado todo el programa y hay mucho que analizar”, dijo a los medios. Hizo el décimo tiempo del día a siete décimas de Norris, pero se encontró con una bandera amarilla cuando venía marcando el récord en el primer sector. Que no cunda el pánico.


“Nueve cosas bien, y la décima no sale bien”

Antes, Fallows habló con un grupo de periodistas y expuso los objetivos de estas evoluciones: “No es un secreto que hay características del coche con las que no estamos contentos. Queremos hacer el coche más consistente. Hemos visto destellos de buenas prestaciones en ciertas condiciones o en clasificación, pero buscamos la consistencia entre circuitos. Los pilotos son bastante claros sobre lo que necesitan y traemos piezas para ayudarles. Queremos mejorar la consistencia y adaptabilidad para ajustarlo en condiciones diferentes y tener resultados y rendimiento similar. Queremos que los pilotos sientan la confianza en el coche porque nos cuesta mucho tiempo por vuelta”.

Esta generación de coches convive con el fenómeno del porpoising y añadir carga aerodinámica no siempre se traduce en más tiempo por vuelta, en parte por el lastre del rebote. “Hay una interacción compleja entre la aerodinámica y la suspensión. El suelo es muy sensible en su comportamiento, la aerodinámica también en función de la altura en algunas condiciones”, ilustra el ingeniero británico. Resume vagamente lo que le sucede en Aston Martin: “A veces quieres llevar más rendimiento a un coche y haces nueve cosas bien, pero la décima no sale bien”.

Otro tema de actualidad es la flexibilidad de la aerodinámica. Las piezas deben superar exámenes estáticos con pesos y sensores, pero las imágenes de las cámaras ‘on-board’ vuelven a revelar movimientos extraños. La FIA lo revisará a partir del GP de Bélgica tras emitir una directiva técnica. AS preguntó a Fallows, que no ve a Aston entre los sospechosos: “La FIA quiere ver lo que la gente está haciendo. Tenemos unas reglas muy claras sobre lo que está permitido y nos aseguramos de que lo cumplimos. Hasta donde sabemos, creemos que el resto de equipo también cumple. Las piezas siempre van a flectar. Puedes aceptar que existe y tratar de minimizarlo o usarlo como ventaja”. Puede que otros sí lo hagan y tras el verano deban replantear piezas.

 

TITULO: Para Todos La 2 - Colegio rural - Escuela de pueblo ,.

 Colegio rural - Escuela de pueblo,.

 Crónicas - El camino de la escuela

 Nubarrones sobre la libertad de información,.

 

fotos / Son pequeñas, ofrecen educación personalizada, establecen relaciones estrechas entre maestros, alumnos y familias. Como son pocos, aprovechan las ventajas de la ratio para aprender y enseñar juntos a grandes y a pequeños en la misma aula. Son públicas y mantienen vivas las poblaciones menguantes de los pueblos españoles. En pleno debate del presente y del futuro de la educación en España,  desembarca en algunos de los 720 Colegios Rurales Agrupados que hay en nuestro país. En la escuela rural española estudian 73.000 alumnos. ¿Qué y quiénes la hacen única?,.

 

TITULO:  Gigantes de La 2 -  Mireya González   ,.- Jueves - 8 - Agosto ,.

Gigantes de La 2 - Programa de entrevistas, de cincuenta minutos de duración y emisión semanal, para La 2  Jueves - 8 - Agosto , 23:50 de Televisión Española.

 

 Mireya González,.

 

 

 
fotos / Mireya González volverá a estar en una cita olímpica. D.G.

Mireya González: «¿El objetivo? Queremos las medallas»,.

La leonesa acude a sus segundos Juegos Olímpicos después de un último ciclo olímpico cambiante y complicado para González, que ha pasado de salir de las convocatorias nacionales a ser una de las lideres del vestuario de las Guerreras: «He vuelto a disfrutar jugando con España»,.


Es ya una veterana, pero con la ilusión de una recién llegada al mundo del deporte. En la competitividad, el sacrificio y el derribar muros ha encontrado su pasaporte al éxito y la leonesa Mireya González (1991) mira al horizonte y ve sus segundos Juegos Olímpicos.

No ha sido un camino fácil. Después de la plata del Mundial de Japón de 2019 y unos Juegos Olímpicos de Tokio que, en este caso, no salieron del todo bien, se inicio un cambio generacional que dejó a Mireya González fuera de la selección nacional. Pero el rumbo no era el adecuado, la Federación optó por Ambros Martín y este técnico volvió a contar con la lateral leonesa: «Entendemos el balonmano de la misma manera».

Ahora, a sus 33 años recién cumplidos, la leonesa se siente lideresa de las 'Guerreras', una de esas capitanas – aunque no lleve el brazalete – que debe tirar más del carro cuando se tuercen las cosas. Y tiene claro que el equipo español, aunque no esté en la lista de favoritos, va a dar mucha guerra.

Estamos a las puertas de unos Juegos Olímpicos, de tus segundos Juegos Olímpicos y de la mano del balonmano. ¿Cómo llegas a este deporte?

Fue mi padre quien me llevó a practicar balonmano. Cuando yo era pequeña quería jugar a baloncesto. En realidad, hacía muchos deportes, incluso hice taekwondo. Quería probarlos todos pero hubo un año en especial que me apetecía el baloncesto. Pero mis amigas estaban en balonmano y mi padre me sugirió que fuese con ellas a jugar al balonmano y que, si no me gustaba, tuviera la opción de dar marcha atrás. Esas condiciones me convencieron, me apunté… y hasta hoy. No sé que ha tenido el balonmano, pero me enganchó. Recuerdo que el primer año fue duro porque estaba empezando, no sabía nada, me ponían con niños más pequeños que yo que se reían de mí porque no me salía nada. Cosas de niños, nada más. Pero algo se creó ahí para que yo siguiera aunque no se me estuviera dando bien. Creo que fue en categoría benjamín y hoy día sigo con él.

¿Qué recuerdo guardas con especial cariño de esa etapa de formación?

Recuerdo que pasé muchos años en Maristas. Recuerdo que teníamos equipo y también lo tenía el Cleba y había mucha rivalidad. Era una locura, porque nos jugábamos representar a León en los campeonatos de Castilla y León y, quizá, en los de España si pasábamos la fase autonómica. Y esos partidos eran increíbles. Al final, muchas de mis mejores amigas salieron de aquellos partidos. El balonmano me ha dado, desde pequeñas hasta el día de hoy, la mayoría de las personas que tengo a mi lado.

¿Esa niña soñaba alguna vez con unos Juegos Olímpicos?

Y mucho. Creo que es el sueño más grande que tenía. A mi me gustaba mucho ir a ver el Ademar y, después de ver una película yo, que tenía mucha imaginación, me imaginaba el futuro. Y me veía tirando muy fuerte, tanto como para que el Ademar me fichara, aun siendo una chica. Y me ponía a entrenar en casa con pesas, muy pequeñas, de apenas dos kilos y le decía a mis amigas '¿Tú has visto a alguien empezar tan pronto a hacer pesas? ¿No, verdad? Pues por eso voy a ser la más fuerte y voy a jugar en el Ademar' (risas). Así me imaginaba yo el futuro, pero nunca creí que, realmente, podía dedicarme profesionalmente al balonmano hasta que, poco a poco, te lo vas encontrando.

«Nunca creí realmente que podría dedicarme al balonmano profesionalmente»

¿En qué momento eres consciente de ello?

Esa madurez me llega en Alcobendas. Me fichan con 16 años, estuvo allí cinco años jugando y tuve entrenadores que en enseñaron muchísimo y confiaron muchísimo en mi. Ahí me di cuenta de que podía ser jugadora de balonmano profesional algo que, sinceramente, antes no sabía que existía. Ya no quería jugar en el Ademar, quería jugar en Alcobendas (risas). Fue una experiencia muy bonita.

Y vas cumpliendo sueños y retos. Incluso el de ser olímpica, ya en Tokio. ¿Cómo recuerdas aquellos Juegos Olímpicos en los que, quizá, en lo deportivo, no salieron las cosas como os hubiera gustado?

Dos años antes, en 2019, en Tokio, fuimos subcampeonas del mundo, así que para mí, ir a unos Juegos Olímpicos en Japón era ideal, tenía mucha magia. Y queríamos un resultado mejor, es verdad, no llegamos a los cuartos de final y son años de trabajo que no dan el resultado que queríamos, fue un palo. Pero sólo llegar a lo Juegos es importante, somos sólo 12 equipos, hay muchas selecciones que se quedan sin ir y el simple hecho de estar allí es para estar orgullosas. Está claro que nos hubiera gustado llegar más lejos, pero compartir esa experiencia con el equipo y otros deportistas es increíble.

 
Mireya González tiene en su tríceps derecho un tatuaje recordando los Juegos Olímpicos de Tokio en 2021. D. G.

¿Qué tiene de diferente a otra competiciones?

Todas son muy bonitas y me encanta vivirlas con el equipo, sobre todo si hay un grupo unido, con bueno rollo… Pero los Juegos Olímpicos son diferentes. Siempre ha sido mi sueño desde pequeña. Estás al lado de otros deportistas de todos los países y disciplinas, con gente que ha luchado muchísimo por estar ahí y esa convivencia es increíble. En un Mundial, en un Europeo en la Champions… convives con otras jugadoras de balonmano, pero aquí el ambiente es todavía más especial.

¿Con quién recuerdas haberte encontrado en Tokio que te haya marcado?

Con Pau y Marc Gasol. Son dos auténticas figuras del deporte español por todo lo que suponen y lo que han logrado. Son ídolos mundiales. Recuerdo hacerme una foto con ellos y (risas) son muy grandes. Pude compartir unas palabras con ellos y fueron muy agradables.

«Tengo ganas de encontrarme con Rafa Nadal. Siempre me ha inspirado»

Enlazamos así con lo que viene. ¿A quién quieres encontrarte en París?

A Rafa Nadal. Le he seguido mucho desde hace años. Yo no tengo grandes cualidades, todo lo que he logrado me lo he ganado con trabajo y sacrificio y, en ese sentido, todas las vivencias de Nadal o de su exentrenador Toni siempre me han inspirado y me siento identificada.

Volvemos a lo puramente deportivo. ¿Cómo ha sido el ciclo olímpico para ti? Parecía que había un cambio de era, no entrabas en los planes en un inicio, pero has acabado volviendo a ser habitual.

Sí, es cierto. En este ciclo olímpico se ha cambiado dos veces de entrenador y, desde que ha vuelto Ambros Martín, ha contado más conmigo. Coincidí con él en el Györ, le he seguido mucho siempre y tenía muchas ganas de jugar con él. Cuando estuvimos juntos en Hungría fue increíble, me ayudó muchísimo. Fue poco tiempo, pero todo lo que aprendí de él, dentro y fuera de la cancha, fue increíble. Tenemos una manera de pensar muy parecida. Siempre que preparamos los partidos y le escucho tengo la sensación de que 'sí, sí, es verdad, estoy de acuerdo'. Pensamos igual, somos personas afines y vemos el balonmano de una manera muy parecida. Ha confiado mucho en mí y me ha dado confianza. Estaba un poco baja en ese aspecto después de dos años y medio sin entrar casi en la selección, así que ha sido clave para que vuelva a disfrutar jugando.

Y ahora tienes un rol diferente, más de jugadora veterana

Es un poco el rol que te da el entrenador. Lo he aceptado tal y como él me lo ha dado. Me ha dado muchísima confianza y es lo que también me ha hecho tener un rol un poco diferente.

¿Con qué objetivo vais las 'Guerreras' a París?

Queremos una medalla. Estamos trabajando muchísimo para ello, hemos llegado a los Juegos Olímpicos peleando mucho y ha habido momentos en los que lo veíamos muy lejano. Pero hicimos un preolímpico muy bueno y la idea es seguir dando pasitos hacia adelante. El techo nos lo ponemos nosotras realmente. Cuando hemos tenido un buen o un mal partido depende, en muchos casos, más de cómo lo hemos planteado que del rival en sí. Podemos competir de tú a tú con cualquiera de las favoritas y, si quieres aspirar a algo importante, tienes que confiar en que puedes hacerlo y mantener un nivel alto. La idea es poder estar en cuartos y seguir adelante.

«Entiendo que la gente no dé un duro por nosotras, pero eso puede ser un punto a favor»

Después del pasado Mundial, parece que llegáis de tapadas. ¿Os puede ayudar?

Entiendo perfectamente que, después del último Campeonato del Mundo, la gente no dé ni un duro por nosotras. Tuvimos muy pocos momentos brillantes, fuimos poco consistentes y la sensación no fue buena, tampoco para nosotros. Entiendo que incluso los rivales no nos tomen con un equipo candidato a las medallas y que nuestro público nos vea como 'a ver qué pueden hacer'. Es algo habitual en el deporte, pero puede ser un punto a favor ir de 'underdog', de ser ese equipo del que nadie se espera nada. Lo que ha pasado, ya pasó, ahora sólo nos centramos en lo que está por venir y, eso, está en nuestras manos.

Por último, ¿qué vas a meter en un tu maleta que te recuerde a León?

Cecina y jamón, que no sé cómo nos van a dar de comer en París (risas). No lo sé, la verdad, no lo he pensado aún mucho. Hasta que no esté allí, hasta estar en la ceremonia de apertura y escuchar el himno antes del primer partido, no soy consciente de dónde estoy. Pero seguro que jamón y cecina me llevo. Eso no falta.

TITULO:  ¡ Atención obras ! - Cine - Epístolas petrinas,.

Epístolas petrinas,.

 Un misterio epistolar

foto / Cuenta el narrador de Perspectivas que encontró un legajo de cartas que leyó y releyó consciente de tener un tesoro entre sus manos por el que había pagado mucho menos del valor real que descubrió. Logra de este modo el autor establecer un pacto con el lector, que verá poblarse el libro de nombres reales y situaciones en muchos casos de sobra conocidas, para que, por un momento, crea que todo lo narrado es real.

Laurent Binet desarrolla un thriller epistolar en el que el arte y la política se entrelazan en el Siglo de Oro de la pintura florentina, dejando que el lector se sumerja en un mundo de intrigas marcado por los Médici tanto como por la melancolía de un Miguel Ángel que escribe desde su exilio en Roma. Pontormo, la víctima, aparece con un cincel clavado a pie de uno de sus frescos en la iglesia de San Lorenzo que deja además a la vista de todos modificaciones en alguna de sus obras que, en caso de ser descubiertas, podrían causar un verdadero revuelo. Y ese es el motivo por el que Vasari se dirije a Miguel Ángel en una petición de ayuda para esclarecer los hechos. Binet acierta con la víctima, Pontormo que fue alabado por sus propios maestros y cuya vida estuvo llena de excentricidades y misterios, y también en la forma en que, manteniendo ecos de Choderlos de Laclos, articula correspondencias de una forma tan fresca que se siente casi contemporánea mezclando las anécdotas, vivencias y teorías de los distintos participantes que construyen así un universo en el que todos tienen motivos para mentir. Más de una veintena de corresponsales convertirán la pintura en uno de los ejes centrales de esta historia, salpicada de confesiones y sentimientos encontrados en los que el humor hace acto de presencia, mientras la red de Vasiri y Miguel Ángel se extiende para ir descartando sospechosos.

"La Florencia de Binet es una ciudad ambiciosa, llena de luchas tanto políticas como sociales, que vive marcada por las dificultades para la libre expresión artística"

La Florencia de Binet es una ciudad ambiciosa, llena de luchas tanto políticas como sociales, que vive marcada por las dificultades para la libre expresión artística: el duque Cosimo I es cuestionado por Catalina de Médici, los desnudos artísticos son censurados por inmorales desde la época de Savonarola y la clase trabajadora reivindica sus derechos de una forma cada vez más tajante. Solo necesita un asesinato para que el ambiente se convierta en un polvorín.

Perspectivas juega con el lector desde el título, invitándolo a recibir una pequeña lección de pintura —ahí es fácil ver a lo que se refiere—, pero también a descubrir la verdad entre todas las versiones que va recibiendo de cada uno de los participantes que cuentan, como se suele decir, la historia desde su particular punto de vista. No es la primera vez que el autor asesina a una figura relevante: en La séptima función del lenguaje lo hizo con Roland Barthes, mostrando que la historia siempre deja espacios para una ficción capaz de hacer que el lector dude, gracias al uso inteligente de un estilo aparentemente simple en el que la muerte se convierte en un mero secundario. Binet ha encontrado un nicho en el que parece sentirse cómodo mezclando géneros para dar lugar a historias divertidas e inmersivas, y ahora solo resta saber si en el futuro tendremos alguna víctima más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario