TITULO: Juego de Niños - Valladolid sigue haciendo historia en el pádel ,. Sábado - 5 - Octubre ,.
Juegos de niños,.
Sabado - 5 - Octubre , a las 22:00 por La 1, foto,.
Juego de Niños - Valladolid sigue haciendo historia en el pádel ,.
Valladolid sigue haciendo historia en el pádel,.
Gemma Triay y Claudia Fernández, en féminas, y Arturo Coello y Tapia, en hombres, se alzan con el torneo Valladolid Premier Pádel,.
Valladolid y el pádel han vuelto a hacer historia y demostrar que maridan a la perfección y que es un binomio de éxito y que funciona.
Los vallisoletanos son unos apasionados de este deporte como han demostrado durante muchos años en cada torneo organizado.
Pero, además, pueden presumir de contar con uno de los mejores padelistas del mundo: Arturo Coello, que este domingo lograba junto a su compañero Agustín Tapia con el prestigioso torneo Valladolid Premier Padel y afianza su número uno, tras una gran final en la que ganaban en tres sets (6-4/4-6 y 6-3) a Chingotto y Galán que lucharon hasta el último momento, desplegando un gran juego, en un abarrotado Polideportivo Pisuerga.
Un gran partido que hizo las delicias del numeroso público presente, que disfrutó con cada punto y con la entrega de los jugadores, que nunca dieron un punto por perdido.
El vallisoletano y número uno del mundo levantó el trofeo por primera vez en su carrera en su ciudad natal, en un partido muy igualado. La pareja campeona supo penalizar los errores de ‘Chingalán’, que vuelven a caer ante los mismos rivales una semana después de hacerlo en Róterdam.
En féminas, Gemma Triay y Claudia Fernández daban la sorpresa y se imponían a las que a priori eran las favoritas, Paula Josemaría y Ariana Sánchez, por un contundente 6-3 y 6-2 en un partido que controlaron desde el comienzo.
Es la primera vez que esta pareja se impone a las números uno en una competición "indoor", lo que han conseguido tras disputar un "partido muy completo" y "casi sin fisuras", con una gran coordinación entre ellas, tal y como ha advertido Triay.
TITULO: POLICIA O JUSTICIA -El potencial uso por Ucrania de sistemas misilísticos superiores dispara la tensión,.
El potencial uso por Ucrania de sistemas misilísticos superiores dispara la tensión,.
Las tropas rusas conservan la iniciativa en los sectores de Kupiansk, Chasiv Yar, Prokovsk, Kurajovo y Vuhledar,.
Estados Unidos y Reino Unido tienen que decidir si acceden a la solicitud del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, para poder utilizar los misiles de largo alcance que le han suministrado para bombardear objetivos en territorio ruso. Una decisión clave sobre todo tras las amenazas vertidas por el presidente ruso, Vladimir Putin, que ha dicho que la OTAN estará «en guerra» con Rusia si autoriza el uso de misiles de largo alcance a Ucrania.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro británico, Keir Starmer, se reúnen este viernes en Washington para abordar la guerra de Ucrania y, posiblemente, para estudiar y decidir esta cuestión. En una reunión en Kyiv el pasado miércoles, el secretario de Estado de norteamericano, Antony Blinken, y el ministro de Exteriores de Reino Unido, David Lammy, explicaron que la cuestión de los misiles sería tratada por Biden y Starmer en la reunión de hoy viernes.
¿Cómo son estos misiles?
Atacms
Estados Unidos suministró a Ucrania los primeros Atacms en otoño del pasado año, pero solo para emplearlos en territorio ucraniano y en una versión con un alcance más reducido que los que ahora podrían ser enviados, 165 kilómetros frente a 300.
El sistema de misiles tácticos convencionales del Ejército de Tierra (Atacms, por sus siglas en inglés) es un sistema de ataque superficie-superficie de alta precisión fabricado por la empresa estadounidense Lockheed Martin. Fueron utilizados con gran efectividad por primera vez durante la operación Tormenta del Desierto, entre 1990 y 1991, cuando una coalición liderada por Estados Unidos atacó Irak en respuesta a su invasión de Kuwait.
Los ATACMS disponen de un sistema de navegación inercial asistido por GPS y son propulsados por combustible sólido. Miden aproximadamente 4 metros de longitud, tienen un diámetro de 60,96 centímetros y cuentan con una ojiva de 226 kilogramos de explosión fragmentada. Pueden ser lanzados desde una plataforma de lanzamiento múltiple M270 o desde el sistema móvil HIMARS (por sus siglas en inglés).
Storm Shadow
En mayo de 2023, Ucrania empezó a utilizar los misiles de crucero Storm Shadow, suministrados por Reino Unido y con un alcance de unos 250 kilómetros. Como en el caso anterior, no podían ser empleados para atacar territorio ruso.
Los Storm Shadow se lanzan desde un avión y vuelan a una velocidad próxima a la del sonido. Son ideales para penetrar defensas reforzadas o depósitos de municiones. Su empleo en territorio ruso permitiría a Ucrania atacar bases aéreas desde las que se lanzan ataques contra el territorio ucraniano.
Estos misiles han sido utilizados ya con éxito por Ucrania para atacar el cuartel general naval ruso en el Mar Negro en Sebastopol o el puente Chongar que comunica las regiones de Jersón y Crimea. El Storm Shadow, que en Francia es denominado SCALP EG, tiene un peso de 1.300 kg, una longitud de 5,1 metros y un alcance de entre 250 y 500 kilómetros. Lleva una ojiva convencional de 450 kilogramos.
¿Y cuáles son los misiles que los rusos utilizan contra territorio ucraniano?
Los misiles Kinzhal
Del lado ruso, los misiles Kinzhal e Islander se cuentan entre el armamento más destacado de su arsenal ofensivo y vienen siendo empleadas desde el comienzo de la guerra.
Los misiles hipersónicos Kinzhal –también escrito Khinhzal y que significa «daga»– son una de las armas más modernas de Rusia y el orgullo de Putin, quien las presentó en 2018. Pueden volar a más de 6.000 km/h y alcanzar objetivos de hasta 2.000 kilómetros de distancia. Miden 8 metros de largo y pueden cambiar de dirección en pleno vuelo. Fueron usados por primera vez contra Ucrania en marzo de 2022 para dañar un almacén militar.
Aunque los Kinzhal siguen dañando infraestructuras ucranianas, las defensas aéreas han logrado derribar algunos, como en junio de 2023, cuando interceptaron seis dirigidos contra Kyiv.
Los Iskander
Los misiles Iskander fueron utilizados por primera vez en Georgia en el año 2008, tienen un alcance de 500 kms y poseen una velocidad máxima de entre 6 y 7 veces la del sonido (7.400 a 8.600 kilómetros por hora).
Dotados de variedad de cabezas, pueden portar desde ojivas nucleares hasta bombas termobáricas, de fragmentación explosiva, de penetración y de pulso electromagnético y están diseñados para escapar a los sistemas de defensa antimisiles, ya que vuelan en una trayectoria baja –desde los 6 a los 50 kilómetros– y pueden maniobrar durante el vuelo,.
TITULO: LA PANTERA ROSA - Y LUKE LUKE - La OCNE da una lección ,.
LA PANTERA ROSA - Y LUKE LUKE - La OCNE da una lección , fotos,.
La OCNE da una lección,.
Concierto de transfiguración, de elevación poética y de arrebato amoroso y desgraciado,.
Obras de Torres, Brahms y Chaikovski. Solistas: Margarita Rodríguez (soprano), Okka von der Damerau (mezzo), Iñaki Alberdi (acordeón) y Ángel Luis Quintana (chelo). Orquesta y Coro Nacionales. Director: David Afkham. Auditorio Nacional, 3 de marzo de 2024.
Concierto de transfiguración, de elevación poética y de arrebato amoroso y desgraciado. Ondas poéticas y musicales derramadas a manos llenas en este enjundioso concierto inaugurado por la música de Jesús Torres (1965), compositor que ha llegado en este momento de su carrera a un grado de madurez envidiable. Ya en sazón cuando en 2016 compuso su doble concierto para violonchelo y acordeón y que ahora hemos escuchado de nuevo. Es una partitura trazada diríamos que con unción sobre versos de Hildegarde von Bingen (1098-1179), una dama medieval poseedora de múltiples saberes.
La composición, escrita para acordeón y chelo solistas y un amplio conjunto de cuerda, nos ofrece un amplio recorrido emocional por distintos aspectos y pensamientos de Von Bingen. Aparece dividida en cinco partes: “O vis eternitatis” (¡Fuerza de la Eternidad!), “O cruor sanguinis” (¡Sangre derramada!), “Vivificans vita” (Vida que da vida), “O ignee spiritus” (¡Espíritu ígneo!), “Speculum lucis” (Espejo de la luz). Para cada una de ellas Torres tiene el acento, la elaboración, la construcción, la línea musical adecuada elaborados en un lenguaje de atractivas luces, de pasajeras e insinuadas volutas melódicas, de planos y contrastes muy sugerentes y envolventes.
Hay numerosas alternancias y un clima de rara calidez y de estimulante lirismo, que resumen muy bien estas palabras de Alberto González Lapuente en las notas al programa y referidas al quinto y resumidor movimiento, “Speculum lucis”: “aproximación simbólica de un estado de elevación mística a partir de una melodía diatónica y accidentada del violonchelo sostenida, sobre acordes de la orquesta, con los violines en un registro muy agudo”. Alusión instrumental a eso que podríamos llamar paisaje interior. Aunque a lo largo de la obra hay numerosas alternancias en las que los solistas pueden mostrar su virtuosismo, el clima general es el de una bien elaborada dimensión poética.
Un aspecto que viene anunciado en las dos adaptaciones del propio Torres de dos números del compendio de Von Bingen “Symphonia armonie celestium revelationum”, que recopilaba setenta y cinco advocaciones destinadas a las monjas benedictinas: el responsorio “O vis eternitatis” y la antífona “Spiritus sanctus vivificans vita”, cantadas con suavidad y finura por el coro, bien modelado por Afkham.
La inmersión en el subyugante mundo de Von Bingen pudo llevarse a cabo también por la exquisita y nada fácil labor llevada a cabo por la Orquesta, por el gesto suave y regulador de Afkham y por la justeza, eficacia y virtuosismo desplegados por los dos excelentes solistas. Alberdi, sobrio, sereno, expresivo y seguro proporcionó la base muelle sobre la que se movió de manera admirable Quintana, que afrontó sin pestañear, demostrando que está en plena forma en el momento de su anticipada jubilación, las innúmeras dificultades -spiccati, dobles cuerdas, saltos interválicos, ataques fulmíneos, pasaje vertiginosos- planteadas por el compositor y que en el estreno de 2016 afrontó otro gran chelista, Asier Polo.
En la segunda parte escuchamos la Rapsodia para contralto y coro masculino de Brahms, una obra que eleva a las alturas la poesía de Goethe y que en esta ocasión nos fue brindada de forma más bien prosaica. La solita, la mezzo, que no contralto, Okka von der Damerau, mezzo que no contralto, experta wagneriana, exhibió un atractivo y carnoso centro, pero sus graves son problemáticos y su canto falto de fantasía. Coro masculino cumplidor. La imaginaria batuta de Afkham se encontró más a gusto en la flamígera, intensa y dramática Francesca da Rimini de Chaikovski. Dirección segura, explosiones bien reguladas y extroversión. La gran frase lírica que explota el amor de los jóvenes amantes, Francesca y Paolo, fue estupendamente delineada y cantada.
TITULO : EL CLUB COMEDIA - «Adriana Lecouvreur», una compleja delicia dieciochesca ,.
«Adriana Lecouvreur», una compleja delicia dieciochesca ,.
El Teatro Real inaugura su nueva temporada con la ópera de Francesco Cilea, por primera vez en su escenario,.
Los acontecimientos tienen lugar en la Francia del XVIII. La famosa actriz Adriana Lecouvreur se enamora del mariscal Maurizio de Sajonia. Su relación con él desató los celos de la duquesa de Bouillon y poco después se produjo un misterioso accidente que llevó a Adriana a un trágico destino. La leyenda dice que fue asesinada y el causante de su muerte fue un ramo de flores envenenado ofrecido por su rival, la Duquesa de Bouillon. Su vida se hizo corta, ya que sólo tenía 38 años, pero su figura se hizo legendaria y el rechazo de la Iglesia a darle un enterramiento cristiano conmovió a la sociedad de la época. Este es el argumento de «Adriana Lecouvreur», la ópera más reconocida de Francesco Cilea (1866-1950), una de las más representativas del verismo tardío, que evoca la figura de Adrienne Lecouvreur, famosa actriz de la Comédie-Française, soberana de las tragedias de Voltaire –que la idolatraba– y de los versos de Racine y Corneille, fallecida en 1730. El libreto de Arturo Colautti (1851-1914) se basa en la obra teatral homónima de Eugène Scribe y Gabriel-Jean-Baptiste-Ernest-Wilfrid Legouvé, estrenada en 1849. Con ella, el Teatro Real inaugura hoy la más dieciochesca de las temporadas presidida por los Reyes y lo hace con la ya clásica producción de David McVicar, estrenada en el Covent Garden de Londres en 2010, y representada ya en todo el mundo. Su estreno absoluto tuvo lugar el 6 de noviembre de 1902 en el Teatro Lirico de Milán con Enrico Caruso y Angelica Pandolfini, pero curiosamente, esta es la primera vez que lo hace en el coliseo madrileño.
Luces y sombras
La puesta en escena de McVicar es un homenaje al mundo interior del teatro, con escenografía de Charles Edwards y el vestuario dieciochesco de Brigitte Reiffenstuel, tratan de potenciar la grandeza y fragilidad de la protagonista, una actriz atrapada entre las luces de la fama y las sombras de su desgraciado destino. El Real ofrecerá 13 funciones, homenaje a Montserrat Caballé y José Carreras, en el 50 aniversario de su legendaria interpretación de este título en el Teatro de la Zarzuela. En el papel titular se alternarán Ermonela Jaho y Maria Agresta, secundadas por Elina Garanca (Princesa de Bouillon), Brian Jagde (Maurizio) y Nicola Alaimo (Michonnet), en el primer reparto; y Ksenia Dudnikova, Matthew Polenzani y Manel Esteve, en el segundo, con Nicola Luisotti en el foso, principal director invitado del Real.
«Una cuestión que justifica la elección de esta ópera es la obsesión de David McVicar por el siglo XVIII y sus aspectos morales y políticos –comenta Edwards–, ver realmente cuál es el papel de los sirvientes y la aristocracia, dos mundos que nunca se mezclan y, cuando Adriana lo hace, las cosas empiezan a desmoronarse, porque su realidad es muy distinta». En cuanto al vestuario dieciochesco, afirma: «Es cierto que hay la percepción de que si situamos una obra en el periodo en el que fue concebida estamos siendo retrógrados y esto es un malentendido habitual, debemos ser respetuosos y para su verosimilitud política, esta obra debe situarse en su momento, con otras podemos jugar un poco, pero no con una pieza tan delicada como ésta, donde lo importante es que el montaje sea auténtico y de verdad, si no, no tendría sentido». A lo que apostilla Joan Matabosch, director artístico: «Creo que hay que sacar a la gente de esta confusión, que una producción sea moderna o clásica no tiene necesariamente que ver con que el vestuario sea de época o no, ponerle unos tejanos a los personajes no garantiza su modernidad, se puede hacer teatro de máximo voltaje con vestidos de época como demuestra McVicar». Porque como dice Justin Way, responsable de la puesta en escena, «su trabajo está totalmente basado en los seres humanos, en su humanidad». Algo que corrobora Ermonela Jaho: «Adriana es un personaje real donde todos los sentimientos están expresados de forma auténtica, celos, amor, sufrimiento, emociones que salen del alma y esperamos saber transmitir con verdad y sinceridad a todo el público, que es quien tiene la última palabra». Para Way, «esta es una obra llena de delicias, tiene ballet, recitaciones, arias, personajes fuertes…es una caja de bombones y, sobre todo, es una obra maestra también».
Su tardía llegada al Real puede tener que ver con el devenir histórico del coliseo, pero según Nicola Luisotti, también por su complejidad. «Tiene una música excelente, pero es una ópera muy difícil que cuesta mucho al director y cantantes retener en la memoria. Parece fácil al escucharla, pero es muy complicada de hacer, con muchísimas trampas que debemos estudiar. Adriana fue un personaje complejo y esa complejidad está en la ópera», afirma. El espectáculo «tendrá el honor de inaugurar la nueva temporada y, de alguna manera, reivindicarse así», concluye Matabosch, que sentencia: «Ya era hora».