lunes, 2 de diciembre de 2019

Un país en la mochila - Planeta sin recambio,./ AQUI HAY TRABAJO - Un Congreso instalado en la periferia,.

TITULO: Un país en la mochila - Planeta sin recambio,.

 

Planeta sin recambio

Planeta sin recambio

11.000 científicos han firmado un texto que avisa de la «amenaza catastrófica» que se avecina. Diez de ellos, españoles, explican aquí cómo el calentamiento afecta a sus campos de estudio,.


Si Orson Wells volviera a radiar hoy aquel programa en el que hace 80 años anunció que los extraterrestres estaban invadiendo la Tierra tendría más éxito asustando a la gente que el que han logrado los científicos en tres décadas de advertencias a la Humanidad sobre el cambio climático. Y eso a pesar del grito mediático que ha supuesto la irrupción de la adolescente Greta Thunberg en este escenario. «Damas y caballeros, tengo que anunciarles una grave noticia. Por increíble que parezca, tanto las observaciones científicas como la más palpable realidad nos obligan a creer que los extraños seres que han aterrizado esta noche en una zona rural de Jersey son la vanguardia de un ejército invasor procedente del planeta Marte...».
Doce millones de personas escuchaban las evoluciones de los recién llegados. «¡Espera un minuto! Alguien está avanzando desde el fondo del hoyo. Alguien... o algo. Puedo ver escudriñando desde ese hoyo negro dos discos luminosos... ¿Son ojos? Puede que sean una cara. Puede que sea...». Se lo tragaron, y eso que antes de empezar ya habían avisado de que todo era una broma basada en 'La guerra de los mundos' de H. G. Wells. Miles y miles de estadounidenses abandonaron sus hogares aterrorizados y colapsaron carreteras y comisarías de Policía...


Pero la emergencia hoy a cuenta del cambio climático, además de real, es mayor y más peligrosa, porque a muchos aún les cuesta distinguirla y porque la lucha debe emprenderse de manera global y en muchos ámbitos. El enemigo no viene de fuera ni tiene forma de hombrecillo verde, lo tenemos en casa: negacionistas como Donald Trump en Estados Unidos, Jail Bolsonaro en Brasil o Santiago Abascal en España dificultan la puesta en marcha de medidas al oponerse a algo que hoy por hoy no admite discusión; que el cambio climático avanza inexorable por culpa de la mano del hombre y que asistimos a una emergencia mundial que requiere la atención de los gobiernos.
Es lo que acaban de firmar 11.000 científicos de todos los rincones del planeta; es hora de actuar y es ya o nunca, porque la Tierra no tiene recambio y estamos cerca del punto de no retorno. Diez expertos españoles que se cuentan entre esos 11.000 científicos firmantes del aullido con el que quieren despertar al mundo han aceptado participar en estas páginas aportando su conocimiento sobre lo que está sucediendo en sus campos concretos de investigación por culpa del calentamiento global.
La comunidad científica lleva diciéndolo mucho tiempo, en la cumbre climática de Río 1992 ya advirtieron de la necesidad imperiosa de frenar las emisiones de gases de efecto invernadero. ¿Quién les escuchó? Ahora, ante el éxito mediático de Greta Thunberg, convertida en símbolo del ecologismo, muchos aducen que por qué hacer caso a una adolescente en vez de a los expertos. Pero... ¿quién los escucha hoy realmente? Los diez científicos seleccionados coinciden en valorar el éxito que ha tenido Greta en dar la voz de alarma a un gran sector de la sociedad al que difícilmente llegarían.
Para los que necesitan símbolos ahí está también 'Lewis', el koala rescatado de los incendios que están asolando Australia, muerto finalmente a causa de las graves quemaduras. Ni siquiera ha empezado el verano y los fuegos consumen buena parte de sus bosques. La ciudad de Perth acaba de registrar, con 40'4 grados, el máximo histórico de temperatura de un noviembre. Scott Morrison, primer ministro australiano, es un defensor público del 'lobby' de empresas mineras del carbón, al que ha prometido proteger de las «pretensiones» de los ecologistas con la creación de nuevas leyes. La muerte de cientos de koalas, además de canguros, zarigüeyas y otros animales, un millón de hectáreas carbonizadas, víctimas humanas, hogares destruidos... «¡El cambio climático es real! ¿No lo ves?», le gritaron durante su visita a las zonas afectadas. No. Ni siquiera recibe a un grupo de exjefes de bomberos que quieren hacerle entender que la crisis climática ha hecho los veranos más largos y mortíferos.

La lección de la Historia

«Nos estamos adentrando en un periodo sin precedentes. La última vez que la atmósfera tuvo niveles de CO2 tan elevados, los seres humanos aún no existíamos», explica Diego Rubio, profesor de Historia Aplicada en la IE University de Madrid y coordinador de la serie 'Una historia del futuro' que se estrena en Canal Historia el lunes 9 con un capítulo dedicado al clima. «El pasado está lleno de episodios en los que breves alteraciones climáticas provocadas por factores naturales -la erupción de un volcán- causaron desastres y llevaron a sociedades enteras al borde del colapso. En 1876, una oscilación natural en la temperatura del océano Pacífico desencadenó una brutal sequía de tres años que golpeó Asia, África y América del Sur: hambrunas, migraciones masivas y brotes de enfermedades mataron a 50 millones de personas, similar a las víctimas de la Segunda Guerra Mundial».
Los vaticinios de Rubio son para echarse a temblar: «Todo apunta a que, en las próximas décadas, catástrofes similares tendrán lugar con mayor frecuencia y a una mayor escala por el calentamiento. Nuestros hijos verán cómo regiones enteras del planeta se vuelven inhabitables por la desertización, o quedan sepultadas bajo el agua, lo que precipitará migraciones, crisis económicas y conflictos armados». También afectará a lo invisible: «Aparecerán virus y bacterias en lugares en los que antes no existían y para los que no estamos preparados».
Recuerda el experto que la Historia enseña algo importante: «Las variaciones climáticas de la Antigüedad contribuyeron a la caída de grandes imperios. El comercio y los cultivos de entonces no eran tan avanzados como los de ahora. Pero aquellas variaciones no son nada en comparación con los efectos que el calentamiento global tendrá en las próximas décadas. Ocurrió en el pasado y está pasando hoy en día. No es ciencia ficción». No, el problema no viene de Marte.


TITULO: AQUI HAY TRABAJO -Un Congreso instalado en la periferia,.

 

 

Un Congreso instalado en la periferia,.

Un Congreso instalado en la periferia40 diputados regionalistas y nacionalistas componen la Cámara Baja salida del 10-N, un récord histórico,.


foto / La llegada al Congreso de Teruel Existe el pasado 10-N ejemplificó que Madrid está cada vez más cerca de la periferia peninsular y viceversa. La Cámara Baja nunca había contado con la representación de tantos partidos regionalistas y nacionalistas en toda la historia de la democracia española. En total, en las últimas elecciones estos sumaron 40 escaños, cuatro más que en los anteriores comicios. Todo gracias a la irrupción de la agrupación de electores turulense, con un diputado conseguido con 19.696 votos; el regreso del Bloque Nacionalista Galego (BNG), con otro asiento; o el debut en las generales de la CUP, que hasta entonces solo había concurrido a las autonómicas catalanas y a las locales, con dos diputados. También repiten Compromís, que revalida en el parlamento a Joan Baldoví ahora bajo la marca Més Compromís (integrada en la coalición Más País de Íñigo Errejón), ERC, PNV, JxCat, Bildu, Coalición Canaria y el PRC. Y a punto estuvieron de ser 41, de no ser porque Coalición por Melilla se quedó a escasos 180 votos de superar al Partido Popular en la ciudad autónoma.
Un fenómeno que resumió de forma sencilla el pasado 28 de abril José María Mazón, diputado del Partido Regionalista de Cantabria y el único no socialista que apoyó la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno en julio. «La gente ha comprendido que tener al partido en Madrid es un bien para todos», dijo al confirmar su debut en el Congreso. Lo reafirmó el pasado 10-N Tomás Guitarte, el primer parlamentario de Teruel Existe, provincia que ha perdido el 9% de sus habitantes en la última década, «frente al centralismo, ¡teruelismo!». Los primeros presumen de haber arrancado la promesa de un tren de alta velocidad para Cantabria, los segundos hablan de «poner sobre la mesa mejoras» para su territorio.

Escaños regionalistas y nacionalistas

ERC
13
JxCat
8
PNV
6
Bildu
5
Coalición Canaria
2
CUP
2
BNG
1
Compromís (Más País)
1
PRC
1
Teruel Existe
1
Pero la teoría del 'voto útil' –o, para algunos, la del 'barrer para casa'– no basta para explicar un sentimiento territorial que existía previamente pero que estuvo dormido durante las mayorías absolutas de PSOE y PP. A lo largo de los años 90, los escaños regionalistas y nacionalistas no pasaban de 32, y en 2008, con la revalidación de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno, bajaron a mínimos históricos: 24. Los expertos afirman que el repunte actual se debe a situaciones políticas «más vivas en el debate nacional» como el auge de Vox o el conflicto soberanista en Cataluña. «Estas cuestiones han provocado una crisis de representación de los partidos mayoritarios. España siempre ha sido un estado heterogéneo, pero eso no se reflejaba en el voto, ahora sí. Se ve extraño que unos señores de Teruel formen un partido, cuando no es algo nuevo, la España vacía es normal que se refleje en política. Es una obviedad que los partidos defiendan sus intereses territoriales», explica el politólogo y profesor de la Universitat Oberta de Catalunya Iván Serrano.

«Crisis del bipartidismo»

Esta «crisis del bipartidismo» en su faceta más centralista también afecta a la gobernabilidad del estado. Además de frenar la consecución de mayorías absolutas, pone en valor los escaños nacionalistas y regionalistas a la hora de negociar leyes o investir presidentes. Quedó difuminada el pasado verano con la ruptura de negociaciones entre Unidas Podemos y PSOE, pero ha pasado a primer plano tras el 10-N con la dependencia del secretario general socialista, Pedro Sánchez, de la abstención o el apoyo de partidos como PNV, BNG, CC y, sobre todo, de los 13 diputados soberanistas de ERC, para llegar a la Moncloa.

Evolución desde 1977

1997
25
1979
29
1982
24
1986
35
1989
37
1993
32
1996
32
2000
32
2004
32
2008
24
2011
36
2015
26
2016
31
2019 (28-A)
36
2019 (10-N)
40
«Estoy convencido de que los grandes protagonistas del bipartidismo están deseando que este vuelva, porque lo que no es bipartidismo les molesta, les genera problemas para organizarse o pactar», comenta a este periódico el diputado del PNV Joseba Agirretxea, presente en el Congreso desde 2008. Él comparte la opinión de que la pluralidad regionalista «ha existido siempre pero estaba integrada en el PSOEy PP, ahora está eclosionando con la crisis política».
Con 16 partidos distintos en el Congreso, la cifra más alta de los parlamentos de los grandes países de la Unión Europea -seguido del de Países Bajos, con 15-, el día a día de los diputados no será sencillo. «Va a tocar negociar mucho, más allá del AVE hay otras inversiones que nos pueden unir a muchos, como la salud o las pensiones», reconoce el diputado del PSOE Felipe Sicilia. El parlamentario considera que entre estas formaciones existe«algo de egoísmo», y cree que se trata de un fenómeno que «se moderará».
Otros partidos regionalistas históricos que cuyos diputados han desfilado por el Congreso desde 1977, aunque ahora no cuentan con representación, son el Partido Andalucista, la Chunta Aragonesista, la escisión asturiana del PP Foro Asturias, Unió Valenciana, Amaiur o Geroa Bai (anteriormente denominado Nafarroa Bai) y otros pequeños partidos canarios o gallegos que acabaron intengrandose en Coalición Canaria o en el BNG.

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