domingo, 19 de enero de 2020

LIGA FUTBOL - REAL MADRID -2 - SEVILLA -1-,. / LIGA FTUBOL - EIBAR -2 - ATLÉTICO MADRID - 0- ,./ REVISTA GIGANTES - BALONCESTO - LIGA ACB - Montakit Fuenlabrada Montakit Fuenlabrada - 90- Barcelona- 94-,.

  TITULO: LIGA FUTBOL -  REAL MADRID -2 - SEVILLA -1-,. 

Resultado Final  -  REAL MADRID -2 - SEVILLA -1-,foto. 

Dos goles y un partido fantástico le bastaron al Madrid para tumbar al Sevilla en un partido cerrado. El VAR le anuló injustamente un gol al equipo andaluz y el árbitro le dio otro ilegal.

Casemiro celebró así su primer gol.Fue la tarde de Casemiro, el homenaje a un futbolista al que abrazan más los entrenadores que los titulares de prensa, el polígono industrial que permite que a su alrededor sea sostenible un Bolshoi. Tumbó al Sevilla como nueve de guardia en un partido cerrado entre dos equipos que producen poco arriba. También fue una tarde de VAR, que se entrometió cuando nadie le llamaba para anular un gol al Sevilla y se tapó después para concederle otro tras mano previa de Munir.
Diez títulos y una condición casi sobrenatural (caído del cielo, según revelación de Florentino Pérez) ofrecen a Zidane licencia para todo, incluyendo poner un ataque estrafalario con Lucas Vázquez, Jovic y Rodrygo. Un tridente repleto de mensajes. El primero es que Benzema llegó al partido de milagro. El segundo, que Vinicius viaja a cola de pelotón, visto lo visto, injustamente. El tercero, que Bale está en las últimas. Dejarlo en la grada en una tarde de tantas estrecheces sonó a tirar la toalla con un futbolista que ha ido perdiendo atributos aceleradamente: empezó por la salud, siguió por las apariencias y acabó por el gol, su clavo ardiendo. Se le han ido la pegada y las expectativas.
Ese once le quitó cintura al centro del campo, lo único verdaderamente clásico de la alineación, y por ahí quiso colar Lopetegui al Sevilla, al añadir un segundo medio de contención, Gudelj, para darle aún más vuelo a sus laterales, Navas y Reguilón, los más activos del campeonato, y mayor libertad a Banega, la mano que mece esta cuna.
El Madrid acusó la falta de órganos vitales: Ramos, en la salida de la pelota; Valverde, cuyas ausencias se perciben ya como crisis energéticas; Benzema, sin el que pierde la propiedad asociativa; Hazard, su toque de distinción. Todo resultó extremadamente costoso para el Madrid, que ganó la apuesta de la pelota y perdió la de la profundidad. Lucas Vázquez parece haber perdido sus facultades de extremo, Rodrygo empieza mucho más de lo que termina y con Jovic no funciona la terapia de insistencia con la que Zidane trata de devolverle a la superficie. Todo lo que emprendió el Madrid antes del descanso murió al borde del área.
Atrás, en cambio, aun sin Ramos ni Mendy, sigue intacto. Protegió bien las bandas y le permitió poco al Sevilla, que a la media hora de juego vio cómo el VAR corría en auxilio del Madrid al anular un gol a De Jong, en cabezazo espectacular a la escuadra a saque de esquina lanzado por Banega. El holandés se vio favorecido por un bloqueo de baloncesto con leve movimiento de Gudelj a Militao, una semipersonal de pívot casi en el área pequeña. Una jugada de grises que caía fuera de los límites del videoarbitraje en los orígenes. Hoy esa frontera es borrosísima y, por tanto, las quejas del Sevilla están más que justificadas. La sensación que quedó es que Militao quiso traspasar una pared y que hubo que acudir al microscopio para descubrir la infracción.
Para entonces, el partido ya había cambiado de manos porque el Madrid andaba perdido en aquella industria pesada dirigida por Fernando. El tridente blanco era fantasma, sin desborde, sin llegada, sin chispa. Y de las bandas tampoco llegaba nada, porque Carvajal andaba impreciso y porque Marcelo ha perdido cascabeles. Sólo Modric sujetaba la bandera del equipo.

Casemiro lo cambia todo

Y en el peor momento, el Madrid encontró un gol casi insólito. Jovic, de tacón, en su única acción notable, puso en ventaja a Casemiro, que definió con la finura de un nueve, salvando con un toque picado la salida de Vaclik. Por primera vez desde que enviudara de Cristiano el Madrid siente que los centrocampistas están por la causa. El partido parecía cuesta abajo para el Madrid, especialmente con la llegada de los refuerzos (Benzema y Vinicius), pero el Sevilla empató de inmediato con otra jugada de tribunales: De Jong aplicó un zurdazo estupendo aprovechando que Munir le había matado con el codo el balón desde el suelo. Una mano involuntaria pero, por ser jugada de gol, claramene sancionable. Fue el paréntesis en la tarde de gloria de Casemiro, el nueve de guardia. Ahí, en el terreno del mejor Cristiano, aplicó un cabezazo picado a centro medido de Lucas Vázquez, que volvió a poner en ventaja al Madrid. Fue el primer doblete en la carrera de un futbolista de diamante para todos los que le han entrenado. Lo bueno no es siempre bonito.
El Sevilla recalculó entonces la ruta, envasó el equipo en un 3-5-2 y se prestó a un partido más abierto, el hábitat perfecto para Vinicius, ahora varios escalones por encima de sus competidores salvo para Zidane. Él alegró el final de un partido que guardará Casemiro en el recuerdo porque él también es una bendición del cielo.



TITULO: LIGA FTUBOL -  EIBAR -2 - ATLÉTICO MADRID -0 - ,.

 Resultado Final - EIBAR -2 - ATLÉTICO MADRID  - 0 - ,foto.

El Eibar celebra el 1-0 al Atlético.

Naufragio del Atleti en Ipurua

Batacazo de los de Simeone ante un Eibar intenso. Burgos abrió el marcador en el 9' en una jugada de estrategia y Expósito lo cerró en el 89'.

Recibió el Eibar al Atlético en Ipurua estrenando pareja de centrales, Burgos-Bigas, y un propósito claro: evitar que la lluvia que caía constante del cielo se tiñera de rojiblanca en el césped. Sin el barro que se formaba en batallas pasadas y ante el Atlético más ofensivo que ayer le podía salir al Cholo (Correa, Vitolo; Morata, João), parecía el equipo de Mendilibar un maestro de esgrima rápido y eficaz, buscando dar la estocada desde la primera jugada. Era suyo todo. La intención, el dominio, las ocasiones, la hierba híbrida. Su florete, la presión altísima. Y el Atlético, mientras, dormido, como en los inicios de otros tantos partidos, y todo grietas en aquello en lo que una vez fue indestructible: el balón parado. Ni Oblak ni el VAR pudieron evitar lo inevitable. Sólo lo retrasaron. Unos minutos.
Porque la primera vez que el Eibar se acercó al portero esloveno lo hizo Pedro León lanzando una falta como una granada sobre su portería. La desactivó Oblak con su mano milagro. Como el cabezazo posterior de Enrich a la salida de un córner, titular él y no Charles. Cinco minutos después estaban todos los hombres de Mendilibar otra vez ante Oblak, olisqueando la sangre. Orellana acababa de sacarle un córner a Arias. Lo prolongó Enrich, lo cabeceó a la red Burgos, que iba con máscara. La celebración de Mendilibar la detuvo un banderín al aire. Fuera de juego. Hasta que Gil Manzano se llevó un dedo al oído: era el VAR. El gol valía. Todo el Eibar corría a la banda para fundirse en un abrazo mientras el Atleti tiritaraba desnudo bajo el agua.

Porque todos los planes del Cholo se estampaban en la pizarra de Mendilibar y su defensa y presión altas, su verticalidad e intensidad. El Eibar ganador de cada duelo, disputa y segunda jugada. El Atleti enredándose como un ovillo en sus pases por dentro, con el pelotazo como único recurso. Y echando de menos terriblemente al Correa de los últimos partidos. La primera vez que el argentino apareció en el partido fue en el minuto 25 para rematar sin fuerza un centro de Vitolo en la primera vez que los rojiblancos le encontraban la espalda al Eibar. Poco antes, Dmitrovic sacaba una buena mano ante João. Después, Cote cegaría a Morata en una ocasión: debía tirar y decidió pasar. Era el 35’ cuando el Atleti al fin despertó y se encontró en medio de este partido.
Buscaron los rojiblancos su ropa bajo la lluvia igualando la intensidad del Eibar en los duelos y las disputas, el ritmo. El descanso llegó después de que João intentara superar a Dmitrovic con una vaselina a metro y medio y Vitolo tropezara en el área y Correa, que inició su ocasión al dejar pasar el balón, con la rodilla del portero en el rechace.
A esperar salió el Eibar tras el reposo, mientras el primer balón disputado lo ganaba Saúl. Declaración de intenciones. El partido iba a jugarse ahora combinando por bajo y cerca de Dmitrovic. El Atlético encontraba a Vitolo y buscaba a João, más activo y sin el gesto abúlico de últimamente. La pelota la llevaba de lado a lado un Correa que, al dar un paso hacia dentro, dejaba la banda derecha libre para que Arias amenazara con sus carreras. El Eibar, neutralizado, esperaba tranquilo. Porque los minutos pasaban en Ipurua sin que el gol rojiblanco llegara. Morata cabeceaba suave en la línea de gol un centro de Saúl. Y Simeone a su espalda tenía a Adán, Lodi, Llorente y Hermoso con tres chavales.
Era el 71’ cuando Saúl recorría el camino inverso de otros partidos: abandonaba el lateral, acababa de entrar Lodi. Mendilibar respondía quitándole el forro a su juguete nuevo: Cristóforo. Como Simeone de eso no tiene, buscó la remontada en los minutos finales fiado a la cantera. “No tengo otra cosa”, parecía gritar al palco, el equipo estéril, la plantilla tan corta, el mercado aún abierto. Entró Camello, debutó Clemente, intentó Oblak evitar de nuevo lo inevitable ante Expósito. Que el Eibar se había soltado otra vez ante un Atleti roto por sus propios cambios. Lo hizo el portero una vez, lo de la mano milagro, pero la siguiente ya no. Era el 89’ cuando el Eibar se fundía de nuevo en un abrazo para celebrar ese disparo de Expósito desde la frontal. Le había arrancado de nuevo la ropa al Atleti en la noche de Ipurua, en pleno enero. Y con los mismos problemas de siempre.



TITULO: REVISTA GIGANTES - BALONCESTO - LIGA ACB -  Montakit Fuenlabrada Montakit Fuenlabrada - 90- Barcelona- 94-,.

 Resultado Final -  Montakit Fuenlabrada Montakit Fuenlabrada - 90- Barcelona- 94-, foto,.


Durante el partidoEl equipo azulgrana fue por delante durante todo el partido, pero casi ve como el Fuenlabrada, que tuvo balón para empatar, consigue una remontada que hubiese sido histórica.


El Barça se impuso al Fuenlabrada en un partido que dominó en todo momento, pero que estuvo a punto de perder. Anthony Brown tuvo balón a falta de menos de un minuto del final para empatar el partido, pero penetró en vez de intentar el triple y los visitantes, que se reencuentran con la victoria tras caer en la jornada anterior ante el Bilbao, cerraron el duelo desde el tiro libre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario