El año de la marmota,.
Hace justo un año, al terminar 2018, HOY hacía un repaso a los asuntos pendientes para 2019. Y sí, salían Valdecañas y el tren. Y se citaban también tres proyectos pendientes de rematar a lo largo del año: el palacio de Justicia de Badajoz, que sigue enredado en los problemas ocasionados por la quiebra de la empresa constructora; la azucarera de Mérida, que se ha diluido en la bruma de los proyectos ansiados y nunca ejecutados; y el hospital de Cáceres, que por fin se ha llenado de médicos y pacientes. No todo van a ser retrasos y malas noticias.
2019 ha sido también el año de los proyectos con polémica incorporada, como el de la mina de litio de Cáceres, que se ha quedado sin defensores. Aunque la empresa continúa con los trámites administrativos, nadie apuesta por que se acabe explotando. La fiebre del litio y de otros minerales imprescindibles para nuestros cachivaches tecnológicos ha llegado a Extremadura y se anuncian prospecciones en busca de litio o vanadio en parajes de Cañaveral y Azuaga, lugares que, a priori, no presentan los problemas de Cáceres. Quizá no encuentren suficiente mineral y las investigaciones mineras queden en nada, pero de momento ya tenemos las consabidas plataformas en contra. Aquí no se mueve una piedra sin que se organice una protesta por el daño ecológico que puede suponer.
Los augurios políticos para el año que va a empezar no son los mejores. Quién sabe cuándo tendremos gobierno y cuánto durará. Pero quizá porque la política no pasa por su mejor momento deberíamos agarrarnos a alguno de los mensajes del Rey y tener confianza en España, un país que con todos sus problemas y disfunciones sigue mereciendo la pena. Por eso, con gobierno o sin gobierno, próspero 2020 a todos.
TITULO: EL MAGO DEL TIEMPO - Lluvias débiles en Galicia y tiempo estable en el resto del país,.
foto / La entrada de un frente por el oeste dejará el cielo nuboso en la mitad oeste de Galicia con lluvias débiles e intervalos nubosos en los litorales, mientras en el resto del país seguirá reinando el tiempo anticiclónico. Habrá probabilidad de nieblas localmente persistentes en la Meseta y en la cuenca del Ebro, mientras en los litorales del noreste peninsular, Baleares y área del Estrecho se esperan intervalos nubosos. En el resto de la Península, el cielo estará poco nuboso o despejado, aunque con abundante nubosidad de tipo bajo y probables nieblas matinales en áreas del interior, que pueden ser localmente persistentes en la Meseta y cuenca del Ebro. También aumentará la nubosidad de tipo alto en la mitad noroeste peninsular. En Canarias, cielo con intervalos nubosos de tipo alto y probables calimas. Las temperaturas diurnas descenderán en zonas de montaña y áreas próximas, y registrarán pocos cambios en el resto. Las nocturnas ascenderán en el oeste de Galicia. Habrá heladas en general débiles en zonas del centro y norte peninsular. El viento soplará del sureste en Canarias, del suroeste en Galicia y litorales de Levante y noreste peninsular, y moderado de Levante en el Estrecho. En el resto del país, viento flojo o en calma.
TITULO:'Volando voy -Jesús Calleja - Abelardo y el oficio de la supervivencia,.
Este domingo 5 de Enero , a las 21.30, Cuatro emite una nueva entrega de 'Volando voy',foto .
Abelardo y el oficio de la supervivencia,.
Tras
salvar al Sporting y al Alavés, el técnico inicia este sábado el reto
de rescatar al Espanyol en el derbi frente al Barcelona
El fútbol es un deporte retorcido.
Abelardo Fernández, quien aspira a arrancar al Espanyol del agujero de la clasificación, jugó 257 partidos con el Barcelona, equipo contra el que debuta este sábado en el banquillo blanquiazul en el derbi barcelonés. Será en el estadio de Cornellà-El Prat, ahora RCDE Stadium, y frente a Ernesto Valverde. Éste, tras un paso fugaz como futbolista azulgrana, alcanzó los 87 encuentros jugados con el Espanyol, a quien también dirigió en 99 partidos. La puerta 89 del estadio cornellanense lleva su nombre. También tiene cierta guasa que el entrenador que llevó de la mano al Espanyol a Segunda en su último descenso de 1993 -por mucho que Juanjo Díaz concluyera la faena- fue José Manuel Díaz Novoa, gijonés como Abelardo. Ex técnico del Sporting, como Abelardo.
Las carreteras se entrelazan sin remedio ante la disputa de un partido entre el primer y el último clasificado (29 puntos de diferencia tras la disputa de los primeros 18 partidos). El Espanyol, siempre que se enfrentó a un Barcelona líder desde la última posición en la tabla, nunca perdió (el triunfo 1-2 en el Camp Nou bajo el resplandor de la cabeza afeitada de De la Peña de 2009, y un empate a dos en casa en 1963). El equipo perico esquivó la caída a Segunda en ambas ocasiones.
Todas estas historias, a buen seguro, traen sin cuidado al empresario juguetero dueño del Espanyol, Chen Yansheng, ocupado en preservar su inversión en el club blanquiazul a 20 jornadas de que concluya el campeonato. A la espera de acudir al mercado de invierno y aprovechar el aumento de su límite salarial en 12 millones de euros una vez completada su ampliación de capital y gracias lo recaudado hasta la fecha en la Europa League, las esperanzas se focalizan en la figura de un especialista de la supervivencia. Abelardo, el tercer técnico blanquiazul este curso tras las deficientes experiencias con David Gallego y Pablo Machín, ya evitó en su día los descensos de Sporting y Alavés en situaciones igual de dramáticas.
La fórmula de Abelardo no tiene demasiados secretos. Hizo entrenar a su equipo tanto en Nochevieja como en Año Nuevo. Se ha empeñado en recuperar el aspecto emocional del vestuario, dada la importancia que concede a la llamada «intensidad» en sus encuentros. Ha hecho creer a sus futbolistas que no hay mejor jugador que el que ya forma parte del equipo, sin reclamar públicamente fichaje alguno [Machín llegó al Espanyol rogando la contratación de un ariete que encontrara los goles perdidos con la venta de Borja Iglesias]. Ha borrado Abelardo de la pizarra las piruetas tácticas de sus antecesores. El 4-4-2 de toda la vida como concepto. «El fútbol es de los pocos deportes en que puedes jugar horrible y ganar», afirmó en la víspera sin pestañear el técnico asturiano.
«Cuando tienes 10 puntos de 54, el jugador pierde la confianza en sus cualidades. Deja de atreverse a hacer cosas. Por eso hay que partir de cero, empezar una nueva Liga», insistió. Aunque el día para comenzar ese nuevo mañana no parezca el más idóneo. El Espanyol no ha ganado un solo partido en casa esta temporada, con un balance de dos empates y siete derrotas. Nadie ha encajado tantos goles en su propio estadio como el Espanyol (20 en contra). Sólo un equipo ha marcado menos en casa que el Espanyol (siete). Se trata del Celta de Vigo (seis), también en puestos de descenso. Abelardo, por cierto, ha perdido sus seis duelos frente al Barcelona desde que es entrenador.
Valverde, que espera cerrar la primera vuelta como líder del campeonato, tiene otro tipo de preocupaciones. Cedido Aleñá al Betis -«ha ejercido una cláusula por la que podía salir; pero no sabía que sería tan pronto», se quejó el técnico-, ausente Arthur por culpa de una pubalgia que no remite, y con Arturo Vidal en plena disputa legal con su club mientras mira de reojo a Italia, toca también mirar a la portería. Ter Stegen sigue con el proceso de recuperación de su tendinopatía en la rodilla derecha, por lo que será baja tanto en el derbi como en la Supercopa de España. Según el técnico azulgrana, el portero alemán debería estar disponible una vez concluya el torneo que se disputará la próxima semana en Arabia Saudí. El meta brasileño Neto, que ya jugó en el triunfo continental en el Giuseppe Meazza, jugará así sus primeros minutos en esta Liga.
Y Valverde, a quien se abrazó ayer Abelardo sobre el césped de Cornellà después de posar con unas camisetas intercambiables, no pudo más que admitir la evidencia ante un pasado del que no reniega: «Desde luego que quiero que el Espanyol siga en Primera».
Abelardo Fernández, quien aspira a arrancar al Espanyol del agujero de la clasificación, jugó 257 partidos con el Barcelona, equipo contra el que debuta este sábado en el banquillo blanquiazul en el derbi barcelonés. Será en el estadio de Cornellà-El Prat, ahora RCDE Stadium, y frente a Ernesto Valverde. Éste, tras un paso fugaz como futbolista azulgrana, alcanzó los 87 encuentros jugados con el Espanyol, a quien también dirigió en 99 partidos. La puerta 89 del estadio cornellanense lleva su nombre. También tiene cierta guasa que el entrenador que llevó de la mano al Espanyol a Segunda en su último descenso de 1993 -por mucho que Juanjo Díaz concluyera la faena- fue José Manuel Díaz Novoa, gijonés como Abelardo. Ex técnico del Sporting, como Abelardo.
Las carreteras se entrelazan sin remedio ante la disputa de un partido entre el primer y el último clasificado (29 puntos de diferencia tras la disputa de los primeros 18 partidos). El Espanyol, siempre que se enfrentó a un Barcelona líder desde la última posición en la tabla, nunca perdió (el triunfo 1-2 en el Camp Nou bajo el resplandor de la cabeza afeitada de De la Peña de 2009, y un empate a dos en casa en 1963). El equipo perico esquivó la caída a Segunda en ambas ocasiones.
Todas estas historias, a buen seguro, traen sin cuidado al empresario juguetero dueño del Espanyol, Chen Yansheng, ocupado en preservar su inversión en el club blanquiazul a 20 jornadas de que concluya el campeonato. A la espera de acudir al mercado de invierno y aprovechar el aumento de su límite salarial en 12 millones de euros una vez completada su ampliación de capital y gracias lo recaudado hasta la fecha en la Europa League, las esperanzas se focalizan en la figura de un especialista de la supervivencia. Abelardo, el tercer técnico blanquiazul este curso tras las deficientes experiencias con David Gallego y Pablo Machín, ya evitó en su día los descensos de Sporting y Alavés en situaciones igual de dramáticas.
La fórmula de Abelardo no tiene demasiados secretos. Hizo entrenar a su equipo tanto en Nochevieja como en Año Nuevo. Se ha empeñado en recuperar el aspecto emocional del vestuario, dada la importancia que concede a la llamada «intensidad» en sus encuentros. Ha hecho creer a sus futbolistas que no hay mejor jugador que el que ya forma parte del equipo, sin reclamar públicamente fichaje alguno [Machín llegó al Espanyol rogando la contratación de un ariete que encontrara los goles perdidos con la venta de Borja Iglesias]. Ha borrado Abelardo de la pizarra las piruetas tácticas de sus antecesores. El 4-4-2 de toda la vida como concepto. «El fútbol es de los pocos deportes en que puedes jugar horrible y ganar», afirmó en la víspera sin pestañear el técnico asturiano.
«Cuando tienes 10 puntos de 54, el jugador pierde la confianza en sus cualidades. Deja de atreverse a hacer cosas. Por eso hay que partir de cero, empezar una nueva Liga», insistió. Aunque el día para comenzar ese nuevo mañana no parezca el más idóneo. El Espanyol no ha ganado un solo partido en casa esta temporada, con un balance de dos empates y siete derrotas. Nadie ha encajado tantos goles en su propio estadio como el Espanyol (20 en contra). Sólo un equipo ha marcado menos en casa que el Espanyol (siete). Se trata del Celta de Vigo (seis), también en puestos de descenso. Abelardo, por cierto, ha perdido sus seis duelos frente al Barcelona desde que es entrenador.
Valverde, que espera cerrar la primera vuelta como líder del campeonato, tiene otro tipo de preocupaciones. Cedido Aleñá al Betis -«ha ejercido una cláusula por la que podía salir; pero no sabía que sería tan pronto», se quejó el técnico-, ausente Arthur por culpa de una pubalgia que no remite, y con Arturo Vidal en plena disputa legal con su club mientras mira de reojo a Italia, toca también mirar a la portería. Ter Stegen sigue con el proceso de recuperación de su tendinopatía en la rodilla derecha, por lo que será baja tanto en el derbi como en la Supercopa de España. Según el técnico azulgrana, el portero alemán debería estar disponible una vez concluya el torneo que se disputará la próxima semana en Arabia Saudí. El meta brasileño Neto, que ya jugó en el triunfo continental en el Giuseppe Meazza, jugará así sus primeros minutos en esta Liga.
Y Valverde, a quien se abrazó ayer Abelardo sobre el césped de Cornellà después de posar con unas camisetas intercambiables, no pudo más que admitir la evidencia ante un pasado del que no reniega: «Desde luego que quiero que el Espanyol siga en Primera».
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